Bell, el Conejo Blanco de la familia Freya.

CAPITULO 34: EL ÚLTIMO ESFUERZO.

CAPITULO 34: EL ÚLTIMO ESFUERZO.

Después de unos pocos minutos, la familia Loki y Freya finalmente reanudaron su viaje para investigar en los pueblos más lejanos. Al no encontrar ni una pista en el lugar, se marcharon lo más rápido posible para no perder tiempo, ya que tenían pocos días para encontrar a Bell y Welf en los alrededores.

La familia Loki tampoco encontró alguien sospechoso en el lugar y tampoco es que se estaban esforzando realmente en la búsqueda, considerando que esta vez eran acompañados por personas que no les brindaban mucha confianza para ocultar un secreto.

Solo había un pequeño problema.

Ottar estaba mirando hacia el exterior de su carroza gracias a la pequeña ventanilla que tenía detrás de él. Esta vez sí se subió con los miembros de su familia y parecía estar más cayado de lo normal, aunque también podría deberse a que Allen y Tammuz se encontraban durmiendo en estos momentos.

Ottar: | (serio) (apretando fuertemente el marco de la ventana) estoy seguro que ese chico era Welf. Y si Welf se encuentra en esos lares, eso quiere decir que Bell también está por allí...|

Ottar suavizo su mirada seria y cerro la pequeña ventanilla, mientras pensaba en toda la familia Loki.

Ottar: | (estoico) será mejor que no les diga nada. Mientras más sepan de esto, más probabilidades hay que Freya-sama se entere en donde se encuentra Bell. Si él todavía no decidió regresar por su cuenta, eso significa que quizás aún no esté listo para regresar. (Apretando un poco los puños) el problema es que ahora tengo una pista certera de la ubicación de Bell. Es más que obvio que cuando regrese a Orario, Freya-sama me preguntara personalmente si hay alguna información de Bell y eso sería el final. No voy a poder disuadir su pregunta con ninguna media verdad, y si le miento seria aun peor.|

Ottar miro hacia el techo de la carroza, mientras sostenía su típica expresión estoica.

"solo toca esperar para ver que deparara el futuro."

Ese fue el último pensamiento de Ottar, antes de cerrar sus ojos para descansar.

SALTO DE LINEA

Hades: (sonriendo) bien. Por fin llegaste.

Bell: (sudando un poco) (sonriendo) lo siento, es que este lugar es bastante grande y me costó un poco de tiempo para llegar al final del patio.

El patio del Olimpo era un gigantesco campo de flores blancas y cerezos enormes con un cielo de un color azul marino hermoso. También se podía ver a muchas ninfas cerca de los arboles oh sentados en ellos, aparentemente pasando un buen día entre amigas.

Bell nunca vio algo parecido (suponiendo que era un monstruo), pero suponía que eran una especie de sirvientes para los Dioses que Vivian en el Olimpo, ya que también vio algunas llevando diferentes recados de un lado a otro dentro del hogar de los Dioses. Aunque en este lugar habían muchas más y parecían estar relajadas y no atareadas hasta más no poder.

Bell: |supongo que se turnan para hacer las tareas diarias...|

Hades le dio una leve palmada en el hombro para que Bell le volviera a prestar atención. El peliblanco lo miro algo confundido.

Hades: (leve sonrisa) puede que este lugar te parezca bastante bonito en estos momentos. Pero créeme que en tres días no pensaras lo mismo. (Sacando una pequeña libreta del bolsillo izquierdo) ¿Tienes alguna última pregunta antes de comenzar?

Bell: (poniendo una mano en su mentón) (con rostro pensativo) bueno. Ahora que lo mencionas, me gustaría saber qué fue lo que me tome como mi supuesto castigo. (Agitando ambas manos de una forma graciosa) ya sabes, esa pócima que me dio Ares, porque no lo entendí del todo.