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                     Mal dia

Los días seguían pasando, nada importante pasaba en algunas ocasiones las chicas tenían algún inconveniente con los F4 pero no pasaba algo más allá de los insultos.

En fin, llegó el fin de semana Jan Di desafortunadamente seguía en su trabajo y la salida que tanto habían planeado con ansias tuvo que cancelarse.
Era un aburrido domingo.
Mia seguía en su recámara en su escritorio leyendo un libro, se encontraba sola en el departamento bueno eso creía ella, pero cuando escucho ruido en el cuarto de su padre ahí fue cuando le entró la idea que no estaba sola.
Mia con buenas intenciones quiso sorprender a su padre con un pequeño detalle, fue a la cocina a preparar huevos estrellados y un vaso de jugo de naranja que ella había preparado hace unas horas.
Lamentablemente su padre la pasaba mayor del tiempo afuera de la casa, trabajaba muy duro tanto así que incluso llegaba días en donde no podía ver a su padre, llegaba tan tarde que Mia ya estaba dormida y se levantaba mucho antes de que su hija lo hiciera, Mia solo quería pasar un tiempo con el primer hombre de su vida, más bien el amor de su vida, con el hombre que estuvo con ella siempre.

Mia deja en una bandeja la comida que le preparo y camina directo al cuarto de su padre.
Y cuando la puerta de la habitación de su padre estaba enfrente de sus narices, toca la puerta con la esperanza de recibir respuestas de el.
Algo que le llamo mucho la atención o se le hizo algo muy extraño fue cuando tocó la puerta y el ruido disminuye y deja a cambio un silencio.
Quiso pensar que estaba dormido para no pensar o malintepretar otra cosa como si su padre le escondiera algo, bueno eso era lo que su visión futura le advertía, le daba señales de alerta de que su padre no estaba solo.
Agarra la perilla de la puerta y la abre sin pensarlo.

La imagen que acabo de ver hizo que si cuerpo se tensara y la furia empezó a consumir por todo su organismo.

Una mujer desconocida en ropa interior sentada en las piernas de su padre, la imagen de ver a la mujer desconocida comiendo literalmente a su progenitor, fue repugnante, notar como aquella señora quitaba las prendas de su padre fue lo que la cegó de ira.
Pero al parecer ambos amantes no les importó que alguien los viera, esa fue la cereza del pastel para que Mia muy molesta lanzará la bandeja para llamar la atención de ambos.

Causando un gran estruendo de plato y vaso romperse.

-¡¿QUE LES PASA?! ¡¡LARGATE DE AQUI!!-grita hecha furia.

Toma una lámpara que estaba cerca con intenciónes de lanzarlo hacía la señora desconocida.

Como respuesta su padre empuja un poco a la mujer así ella bajando de las piernas de el, rápidamente su padre se abrocha su camisa y la señora toma su ropa tirada del suelo y se retira corriendo, cuando escucha la puerta cerrarse suelta un pesado suspiro y se recarga en el marco de la puerta.
Su padre se acerca lentamente a su hija con intención de calamarla ya que ala veía muy alterada con ese rostro rojo y verla suspirar pesadamente.

-Hija por favor calmate-dijo calmado

Su mano se posa en el hombro de su hija pero ella se mueve bruscamente y como respuesta ella lanza la lámpara así estampandolo a la pared.

-¡¡¡NO ME TOQUES!!!-grita

El trata de acercarse pero al ver a su hija así muy ansiosa, fue algo que le sorprendió.

-Oye pero que te...-

-¡¡¡NO ME VUELVAS A TOCAR!!! ¿ME OISTE?-

El padre pierde la paciencia y toma muy bruscamente a su hija del brazo.

-¡¡ESCUCHAME!! ¡¡¡Yo soy tu padre y a mí me respetas!!! ¿Que te pasa?-responde molestó

-¡¿Que te pasa a ti?! Traes a mujeres desconocidas a la casa, porque no es la primera vez que te veo con una de esas mujeres de la vida galante, ya me tienes hasta la madre que traigas viejas aquí, también estoy yo papá vivo aquí, ten un tantito de madre y respeta-se safa de su agarre

-¡¡Esta es mi casa y si no te perece puedes largarte!!-

-¿Me estás retando? Por qué juro por Dios que lo haré, es más ahora mismo me iré de esta casa-alza la voz Mia

-Tu te vas de la casa y te parto el osico cuando te vuelva a ver, tengo que cuidarte no permitiré que tu madre sepa esto- dijo amenazante

-¿Tanto te importa mi madre? Mira cabron le estás poniendo el cuerno y tienes el descaro de nombrarla no seas ojete-grita Mía

Recibe una bofetada como respuesta.

-Tu madre es una vieja loca y enferma, la tuve que dejar a esa-

Mia alza la mirada para ver los oscuros ojos de su padre, tenía los ojos llorosos y le empezaban a picar, sus lágrimas se asomaban.

-No llores mocosa-agarra fuertemente ambas mejillas de la joven con una mano

-Nunca vas a cambiar ¿Verdad?-dijo en voz baja

Su padre la suelta y la empuja para salir del cuarto y luego de la casa, dejando a Mia con un remolino de emociones.

Se recarga nuevamente en el marco de la puerta y se queda ahí por un rato, respirando profundamente para no gritar, miraba al techo y perderse en sus pensamientos.

🌺🌺🌺

-Jan Di tengo que retirarme, debo de llegar para cuidar a mi abuela, nos vemos luego-abraza a su amiga

-Esta bien, con cuidado yo cerraré el negocio- se despide Jan Di

Jan Di barría el piso del lugar para después retirarse a su casa, ya daban más de las 10 de la noche y pensaba ir a su casa a dormir ya que venía muy cansada.

Escucha la puerta abrirse y aún atenta con su quehacer habla.

-Lo sentimos ya cerramos-

-¿Jan Di?-

Escucha esa voz femenina que se le hizo muy familiar, voltea a ver a Mia y se asusta al notar que estaba mucho más cerca de lo que pensó, ojos rojos y rastros de lágrimas.

-¿Que te paso?-pregunta preocupada

-¿Tienes tiempo para mí?-pregunta con voz quebrada Mia

•Light• (Boys Over Flowers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora