Dulce bebé ( Hongmin)

Capitulo 15 parte 2

Cuando Mingi despertó todo estaba oscuro, sentía un leve dolor de cabeza y unos brazos aprisionando su cintura, estaba confundido, le dolían los ojos.

—achu~—Ese sonido fue suficiente para que el otro peso a su lado se sobresaltase y despertará de golpe encendiendo la lámpara a su costado.

Hongjoong enfocó la vista y vio a su bebé ya despierto y con dificultad para abrir del todo los ojos, el azabache respiro un poco más tranquilo, levantó a Mingi y lo recostó con la cabeza en su pecho abrazándolo fuertemente como si fuese a desaparecer.

—Hongie—restrego su nariz en el cuello de este.
—¿Estas bien?, me aplastas— Hongjoong aflojó  su agarre y se escondió en el cuello de su bebé.

—Es-estoy bien—inhalo un poco del aroma natural de su bebé—Ahora lo estoy.

—Tengo que ir al doctor...— Hongjoong se sobresaltó y se alejó lo suficiente para verlo.

—N-no, bebé todo está bien, ¿de acuerdo?—su sonrisa era débil y nerviosa, Mingi lo notó.

—... Porque...estoy enfermo—sus ojitos de pronto se cristalizaron—Ellos dijeron eso.

Hongjoong sabía, siempre ha sabido que Mingi está consciente de su transtorno, pero no, no era su culpa, era la de ellos, esas personas que se hacían llamar los padres de Mingi y lo dejaron de lado.

Los odiaba, Hongjoong los odiaba por hacerle tanto mal a su bebé.

Porque desde que Mingi era un niño se encargaron de alejarlo, así que cuando su bebé, cumplió dieciocho años y adquirió toda la fortuna de su difunto abuelo el gran empresario Song Kang, sacó a la razón de su adoración de esa podrida mansión y comenzó a vivir con él, como siempre soñó hasta que se casaron hace casi dos años.

Las pastillas solo eran necesarias cuando Mingi tenía ciertos ataques, provocados por aquellos en esa mansión.

Cosas como "Mingi realmente eres un tonto", "No me sorprende que nuestros padres ni volteen a verte".

—Hongieee—llamó alargando la "e"-¿Porque lloras?— Hongjoong acunó la mano que Mingi tenía en su mejilla y sonrió sinceramente.

—Amo cada momento contigo—Susurró.
—Ellos...ellos solo son unos monstruos—respiró furioso.
—Tu no, mi amor, tú no—besó su sien.

—¿Iremos al doctor?—Ladeo su cabeza.
—Hace mucho no vamos con él.

—No, bo, Minmin, las pastillas son lo único que necesitas, no hay razón para que te fuerces con esas terapias—acarició su rostro casi con desesperación.
Mingi recibía ciertas terapias, estás ayudaban a que su infantilismo "no progresará", pero estas siempre terminaban con un Mingi gritando de dolor de cabeza por la sobrecarga de recuerdos o las constantes presiones a que deje de comportarse como tal.

Hongjoong no seguiría permitiendo aquello, Mingi no estaba enfermo, tan sólo era diferente en su mente, Hongjoong lo ama así como es, moriría si algo le pasará a su bebé.

El había mejorado mucho, se comportaba casi como "alguien normal", y eso era suficiente para Hongjoong, su bebé viviría por siempre con ese transtorno así que esas terapias son inútiles y dolorosamente innecesarias.

Quizás Hongjoong dependía más de la seguridad de su bebé, que la propia.

—Minmin, está bien, porque Hongie me cuida— y con ésto el menor besó tiernamente al azabache el cual dejó salir un sonido de alivio.

Si, el amaba a su dulce bebé tanto que su corazón dolía.