Amor, Pintura y otras cosas //Maitino Fanfic// Acacias 38 COMPLETADO #Wattys2020

Capítulo 7: Maite y sus secretos

CAPÍTULO 7:

Sin embargo, aunque tengo ganas de preguntar por lo que sea que está pasándole a Maite en este momento, no lo hago. Pero que yo sea la que no lo haga no significa que no termine la clase sin saber algo:

-Camino, ¿tienes prisa esta noche?

A penas dejo las cosas de la pintura de ese día, cuando Maite me llama. Aquella noche no tenía que trabajar, asique me vuelvo y niego.

-No... ¿pasa algo?- pregunto.

-Nada. Es solo que...- Maite se acerca, limpiándose sus manos de la pintura de las ilustraciones en la que trabajaba, me mira- ¿Puedo preguntarte sobre algo?

-Depende...- respondo sin saber qué está pasando- ¿Sobre qué es?

-Es sobre un rumor que creo que va corriendo por ahí sobre mí- que no lo creyera, porque era verdad- Solo quería saber si ha llegado a ti o...

-¿Rosina me ha preguntado?

Si quizás estábamos hablando sobre lo mismo, podría informarme sobre lo que pasaba. Si por el contrario, era otra cosa de la que me hablaba, bueno, supongo que podría mostrarle que podía confiar en mí lo suficiente como para que me dijera qué pasaba. Que supiera simplemente que podía confiar en mí.

Sin embargo, Maite al escucharme nombrar a Rosina, se ríe. Supongo que era más de lo primero que de lo de segundo.

-Ya sabía que estando Liberto liado, le iría con el cuento a la mujer.

-Está casado con la mujer más cotilla del barrio- todo el mundo lo sabía, no era ningún secreto- Si no lo sabe Rosina....

-Ya...- murmura bajo una suave risa- Es simplemente que... ¿Te preguntaron sobre mí? ¿Les dijiste algo?

Es extraño, pero cuando Maite me habla en ese instante, es como si notara su ansiedad en las palabras que decía. Como si dependiera algo importante de lo que yo le fuera a responder a sus preguntas.

-Sí y no- respondo rápidamente- No sé lo que está pasando, pero...- miro a Maite a los ojos y soy sincera, quiero ser sincera en ese momento- Es una mujer increíble y la admiro mucho, Maite- Maite sonríe, llega casi a sonrojarse- Y me está dando una oportunidad de lujo. No haría nada que pudiera dañarla. Ni siquiera decir...

Ninguna de las dos hablamos en ese momento. Sus ojos están fijos en mí y sonríe lentamente tras mis palabras. No una sonrisa alegre y contenta como la que suele mostrar. Si no una sonrisa humilde y agradecida. SU mano se posa en mi mano, tomándola por un momento y la escucho suspirar.

-Gracias... Te lo agradezco...

-No hay que darlas- respondo- Sea lo que sea, seguro que se resuelve.

La sonrisa de Maite se vuelve ahora más alegre, aunque manteniendo esa humildad en su gesto. Miro su mano aún encima de la mía, suave aunque ha estado desde que llegué pintando. Caliente en contraste con mi tacto. Se siente bien...

-En fin- Maite reacciona de repente, sobresaltándose y apartando su mano- Ha sido un día muy largo... Te toca descansar. ¿Nos vemos mañana?

-Mañana- asiento tomando mis cosas para ya marcharme- Hasta mañana, Maite.

Parada en la puerta, me giro un momento antes de salir.

-Hasta mañana...

Su sonrisa es lo último que consigo ver antes de salir del estudio.

Por raro que pueda sonar aquello, salgo del estudio sintiéndome rara, distinta, como si una simple pequeña charla hubiera tenido más efecto en mí que cualquier otra cosa que hubiera pasado. Maite no había respondido a lo que pasaba, ni siquiera había pensado quizás en darme razones o justificaciones por lo que había preguntando. Sin embargo, supongo que si lo mirábamos por el lado positivo, ahora me había ganado un poco más su confianza. Quizás, algún día, conseguiría que me lo contara.