Élite: Toda una vida

Capítulo 4: Nadia

Salimos del aeropuerto y observamos nuestra ciudad. La ciudad donde habíamos crecido, la ciudad donde habíamos creados lazos, la ciudad donde aprendimos todo lo que sabíamos.

Durante esos 5 años en Estados Unidos lo habíamos pasado muy mal, habíamos tenido que trabajar muy duro y empezar desde lo mas bajo de todo, mientras Ander se curaba. Mi hermano y yo lo habíamos pasado fatal durante todo este tiempo, pero el hecho de volver a casa con Ander ya curado era el premio que compensaba todo el dolor de este tiempo.

Los 3 hablamos seriamente y valoramos la posibilidad de quedarnos para siempre en Estados Unidos, pero Ander y yo teníamos un mismo objetivo: Guzmán. Ahora mismo yo ya imaginaba que estaría casado, con "Lu" probablemente, tuvimos una discusión justo antes de irme, él no entendía porque me iba con Omar, pero no podía dejar a mi hermano solo en ese país y a cargo de Ander. Azucena nos quiso acompañar, pero Ander la convenció para viajar cada mes a visitarnos y mientras tanto conservar su puesto de directora, ya que con ese dinero pudimos sobrevivir y pagar el tratamiento a la vez.

- "Fara" vaya look mas americano me llevas eh, como se nota que ahora ya eres una chica mala de Norteamérica. -me fundo en un gran abrazo con Rebeka. La había descubierto en el ultimo curso en las Encinas y la verdad era una chica increíble, habíamos estado en contacto mientras estuvimos fuera, así ella nos contaba mas o menos lo que iba sabiendo de nuestros antiguos amigos.

Ella fue la que nos conto la condena de Polo, el nombramiento de Lu como concejala, la nueva titulación de Carla y lo que mas nos alucino la apertura de la discoteca por parte de Samuel, Nano y Guzmán.

Después de ir a casa de Ander, y de que su madre por fin pudiera abrazar a su hijo ya curado, los 3 decidimos ir a tomarnos una copa en un bar cercano que conocía Rebe.

-¿Así que no tienes contacto con nadie?

-Pues no...El Samu cuando la Marquesita se fue a Estados Unidos estuvo un tiempo que no se relacionaba con nadie, yo le envié mensajes, pero no me los contestaba, luego con el tiempo me enteré con unos amigos que él y el rubito pijo ese que te tirabas abrieron la discoteca, que se ve que tiene mucho éxito.

-¿Y dices que Nano está ahí también?- dice Ander extrañado.

-Si, eso me dijeron unas amigas, una de ellas tuvo un rollete con el Nano y lo saludo. Se ve que los 3 se hicieron socios y bueno son de los que mas noticias tengo por eso, porque mis amigas frecuentan esa discoteca. Luego todo lo demás lo he sabido por los periódicos, lo de Polo, lo de la Marquesita y lo de "Lu", eso amigos es la prueba de que la política en este país se va a la mierda, como pueden poner de concejala a semejante bicho.

Todos reímos, después de tanto tiempo y el odio que Rebeka tenia a Lucrecia estaba intacto, parecía como volver a nuestra época de instituto.

-Rebeka me tendrías que decir donde esta esa discoteca, debería ir a ver a Guzmán.

-Cariño no creo que...-mi hermano intentaba advertir a Ander, pero este no le deja acabar la frase.

-Omar, lo hemos hablado mucho, se lo debo y si me quiere golpear, insultar o lo que sea me lo tendré merecido, pero es mi amigo, es mi hermano y le falle. Luego colabore, pero muy poco en la detención de Polo por la mierda del cáncer y ahora es el momento, es el momento de volverlo a ver y de intentar recordar viejos tiempos, se que ahora con Samu y Nano estará bien, pero seguro que un cuarto amigo le vendrá de lujo.

-A cambiado mucho, el rubito pijo digo, mis amigas dicen que es el que sirve las copas junto al Samu, friega vasos y todo.

-¿Guzmán? ¿Fregar?

-Si "Fara" si tu niño-me sonrojo cuando Rebeka dice que es mío- lo que si tendrás que descubrir tu es si tiene pareja lo único que se que mi amiga la Marisol le entro, pero vamos que fue como entrarle a una pared de hormigón, la despacho que dio gusto.

-No quiero nada con Guzmán, lo mejor que pudo pasar es caminos separados, lo único que si que recuperar una amistad estaría bien.

-Que complicadilla eres amiga, bueno te reenvió ubicación por WhatsApp, pásate esta noche por ahí y supongo que tendrá un momento para ti, lo único que la entrada vale 15 pavos, no veas como se pasan, yo no pago 15 pavos para entrar a un local de esos 3 ni muerta, ni que fueran los tres reyes magos.

-¿Quieres que te acompañe Ander? – veo a Omar acariciando el brazo de Ander mientras este mira la ubicación que le ha mandado Rebeka.

-No, es algo que debo hacer solo. Espero quiera recibirme.