#4 Vacío

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Tembló al enterarse de la verdad del asunto, su mirada observo como Beverly se aparto del resto, sacando con prisa un cigarrillo del bolsillo para comenzar a fumar, notando como Ben iba tras de ella, como si los años no hubiesen pasado en los sentimientos de él así como podía comprenderlo cuando se sentía de la misma manera. Por otra parte noto a Bill distanciándose con un Mike siguiéndole el camino, atrapados en una conversación a la cual (t/n) no le presto atención en lo absoluto. Se abrazo a si misma cuando el viento soplaba, desordenando su cabello, sin poder moverse de su lugar cuando múltiples pensamientos estaban dando vueltas ahí. Ignorando que Eddie se había fijado en ella, quitándose la chaqueta para colocarla sobre los hombros de (t/n), capturando la atención de ella ahora mirando al hombre a su lado.

—Gracias Eddie... ahora vas a tener frío tú — le hablo observándolo, posando sus manos sobre la chaqueta del hombre sobre sus hombros —. 

—¿Quieres que vayamos juntos, o tienes auto? — pregunto sin dejar de mirarla, aunque tropezando con sus palabras, casi nervioso, sin saber realmente si era bienvenido —. 

—Si no te es un problema, entonces si... mucho mejor a caminar o pedir un taxi — ella contesto sonriente —.

Eddie con observarla sonreír de esa manera pensó en el sobrenombre que Richie le había dado a la mujer hace tanto tiempo, cuando solo eran unos niños pequeños, en esos momentos un año menos les era mucho, por lo cual la mayoría la considero una hermana pequeña a la cual todos realmente apreciaban, pensando en como aquella tarde en la cantera Richie lo dijo por primera vez: Algodón de azúcar. El hombre sonrió ante la memoria, sonrió también porque estaba agradecido de que ella le hubiese dicho que si. 

—Vamos, no quiero que te continúes congelando aquí afuera — le hablo —.

(t/n) siguió a Eddie hasta su auto que estaba estacionado al lado del auto de Richie, quién comenzó a echar a andar el auto y marcharse prontamente a buscar sus cosas, (t/n) estaba dispuesta a abrir la puerta por su propia cuenta cuando la mano de Eddie se adelanto, abriendo la puerta para ella.

—Eres muy amable — ella le hablo, (t/n) simplemente no estaba esperando que el hombre se comportara así con ella, no era como si alguien lo hubiese hecho en años, hace veintisiete años que nadie la trataba así —.

Él no supo como contestar más que asentir, observando como ella se sentaba, cerrándole la puerta y encaminándose a su propio asiento para encender el auto, observándola de vez en cuando de reojo, él sabia por completo que con Myra nunca era de esa forma, no le abriría una puerta, solo dejaría que la propia mujer la abriese, pero con (t/n) era diferente, sabia que quería tratarla bien, con amabilidad. 

—Entonces... — comenzó prontamente Eddie, mirándola solamente por un corto periodo de tiempo y luego continuar observando el camino — te convertiste en una escritora al igual que Bill, sabes... he leído todos tus libros. 

—¿Lo haz hecho? — ella pregunto con sorpresa en su tono de voz, entremezclada con alegría — La mayor parte de los lectores que tengo son mujeres, con un porcentaje muy bajo de hombres.

—Bueno, mi ex esposa era muy fan de todos ellos... me hizo leer más de uno, y de alguna manera me acabaron por enganchar en los tiempos libres, escribes realmente bien. 

—Viniendo de ti es muy lindo — (t/n) sonrió, rascando su nuca con un pequeño rubor en sus mejillas que por suerte el hombre no pudo notar —, pero... no me he enterado, ¿en que trabajas? 

Ahora fue el turno de Eddie para sonreír con un pequeño rubor formulándose, así como ella esperaba pacientemente a por la respuesta que el hombre tuviese para darle.

Beautiful Ghosts {Eddie Kaspbrak & Lectora} It 2 - FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora