Beautiful Ghosts {Eddie Kaspbrak & Lectora} It 2 - Finalizada

#13 Flor

El sentimiento del agua mojando su ropa era disgustante cuando se trataba de aguas grises como rememoraba Eddie solía decir en su infancia. Moviéndose y manteniendo ambas manos en el aire mientras iluminaba el camino con la linterna, pero no podía negar que estar ahí no era algo que hubiese estado en sus planes anteriormente.

 —Esto es sumamente asqueroso — comento —.

—Por favor ni me lo recuerdes algodón de azúcar — contesto Eddie con una sonrisa posándose en su rostro al darle una mirada a ella —.

—¿Desde cuando es que usas el sobrenombre que le di yo a (t/n)? — pregunto Richie —.

—Desde que es mi novia tarado. 

Cada uno, exceptuando a un Richie que solo parpadeo, se rio, sabían que no era el mejor sitio para que rieran, pero al menos era bueno mantenerse animados. La mano de Eddie se poso sobre la cintura de (t/n) mientras la ayudaba a subir a la zona sin agua, con un pequeño pozo por el cual debían de continuar descendiendo. Una vez arriba, a salvo, ayudo a Eddie a subirse, siendo los únicos arriba. 

Esperando a por el resto.

Inesperadamente, haciéndolos saltar de terror, una anciana de tamaño mayor al de ellos emergió del agua cara a cara frente a Beverly.

—¡Hora de hundirse!

Terror, fue lo que sintió cuando intento saltar al agua para buscar a su hermana que fue hundida, con un Eddie impidiéndole ir para que el resto de chicos solo fuera, creyendo que soltarla y dejarla nadar en esa agua solo podría empeorar la situación. 

—¿Dónde esta? — pregunto ella con terror — No la veo Eddie... ¿Dónde esta Bev?

—¿Chicos? — llamo Eddie —. ¿Chicos?

—Deben de volver pronto, deben... 

Hablo ella atemorizada, con nervios en su tono de voz, con Eddie observándola, pasando sus brazos por el torso de ella, posando una mano sobre su cabello, besando su frente, intentando contenerla hasta que todos salieran. Esperando, claramente nerviosos, podía pasar cualquier cosa.

Y todos regresaron, (t/n) soltó un suspiro de alivio cuando vio a Beverly emerger, tragando una buena cantidad de aire. Eddie soltó a (t/n) para permitir que ella se acercase a la orilla, extendiendo una mano hacia la pelirroja que automáticamente la tomo, regresando, dándole un abrazo a su hermana pequeña, calmándola.

—¿No te hizo daño? — le pregunto (t/n) examinándola —.

—Estoy bien — rio Beverly —, de verdad... no ha sido nada, estoy bien, soy una chica fuerte. 

Un abrazo más antes de que la pelirroja se moviera, adentrándose con cuidado dentro de dicho poso, con una (t/n) mirándole las espaldas, soltando otro suspiro más. El oír las palabras de su hermana podían ser como una píldora calmante que acababa de ingerior que le permitia mover sus piernas para descender. Solo quedaban Eddie y (t/n) en la superficie, con el resto haciendo su camino.

Hasta que Eddie hablo, y ella se detuvo.

—No sé si pueda hacerlo... — menciono él —.

Los ojos (c/o) de ella lo miraron, notando que el rostro de él estaba cabizbajo, mirando sus propios zapatos. Con inseguridad, dando vuelta para caminar a él, posando una mano sobre su mejilla sana, haciendo que él finalmente se atreviera a mirarla a la cara. 

—Se que puedes. 

—No... 

—Eres valiente — ella menciono, regalándole una sonrisa, con sus ojos cristalinos, porque cuando se trataba de él era incapaz de mentir; estaba asustada —, eres brillante, eres el hombre más valiente que he conocido en mi vida. Eddie, peleaste contra un maldito payaso asesino de niños a tus trece años, apuñalaste a Bowers, ¿Qué te dice que no eres valiente? Porque todo lo que veo en ti es esa fortaleza. ¿Qué, ser valiente es pelear en una guerra? No, opino que ser valiente es enfrentar tus miedos aunque no sepas como derrotarlo, le plantas la cara, y tu eres así, te paras frente a ello sin importar que, y eso honestamente, te hace muy valiente.