Capítulo 14

325 23 0
                                    

-Mi señor, han entrado por los túneles como usted predijo- Xiang observó al vampiro que estaba delante suyo- Hemos mandado a veinte neófitos para que los enfrenten.

-Ahora solo tenemos que esperar a que entren los Vulturis,para atacarlos- el vampiro sonrió malévolamente, poder atacar libremente a los Vulturis era algo que nunca pensó que podría hacer, pero allí estaban, atacando su castillo en mitad de la noche. Esa era su gran oportunidad- Prepara a los demás, no quiero que nada salga mal- una fuerte explosión hizo que el castillo entero temblase- ¿Qué ha sido eso? - gritó furioso- Nada puede salir mal o Draken nos castigara a todos.


El tiempo de espera había concluido y ya era hora de que ellos entrasen en acción. Con una amplia sonrisa Nikro trepó el muro del castillo y a sus pies vio que había diez vampiros vigilando aquella zona. Unos metros más allá apareció Alec cubierto por su capa. De sus manos comenzó a brotar una espesa niebla que envolvió a los vampiros dejándolos totalmente desconcertados. Jane apareció al otro lado del rubio. Su miraba era tan fría como el hielo, pero en sus ojos se podía apreciar una mirada sádica que ansiaba acabar con aquellos vampiros lo antes posible.

Nikro miró fijamente a los vampiros que había atrapado Alec con su don, se movían asustados, chocando unos con otros. Con un largo suspiro el rubio se lanzó desde lo alto de muro y con un rápido movimiento descuartizó al primer vampiro. Así continuó hasta acabar con los diez vigilantes.

- ¿Los quemo ahora o luego hacemos una hoguera? - preguntó a los gemelos que seguían observando desde el muro.

-Quémalos-dijo Jane- Ya saben que estamos aquí- una fuerte explosión llamó la atención de los Vulturis.


Siriana miraba aburrida como su hermano y Crysti se encargaban de los vampiros. La pelirroja todavía no sabía luchar muy bien, pero su gran agilidad y agudos sentidos la hacían ser temible.

Los veinte vampiros habían caído en pocos minutos, dejando restos de los cuerpos esparcidos por todo el lugar.

- ¿Os habéis divertido? - la morena les observaba curiosa, ya que aquella era la primera vez que Crysti luchaba en una misión-. Si queréis seguir ahí vienen más invitados- otra veintena de vampiros apareció por el túnel-. Aunque también podéis dejarme probar una cosa que nos sacará de aquí rápidamente. A no ser que queráis que los Vulturis acaben con más neófitos que nosotros, en ese caso seguid.

- ¿Tu idea implica algún tipo de locura descabellada? -preguntó Axel dudoso, porque sabía que no era bueno dejar que su hermana idease ningún plan-Implica explosiones ¿verdad? - una amplia sonrisa apareció en el rostro de la chica-. Lo sabía- con resignación dejó que Siriana montase el explosivo, mientras él se encargaba de mantener a los vampiros alejados.

-Listo- dijo, mientras en sus manos llevaba un pequeño paquete con varios cables-. Formo mi escudo y lo lanzo contra ellos.

- ¿Yo también voy a aprender eso? - Crysti estaba entusiasmada. En su anterior vida como policía siempre había querido aprender a desactivar bombas, pero su pueblo era tan pequeño, que era imposible que nadie pusiera una.

-Esto no es algo que enseñen en los entrenamientos. Lo aprendió sola- Axel se acercó a las dos chicas. Mientras, los vampiros intentaron avanzar hacia ellos, pero el escudo de Siriana se lo impedía- Aprendemos mucho en las múltiples misiones que tenemos.

- ¿Preparados? - Siriana activó el aparato y lo lanzó contra los vampiros que lo miraban confusos, sin comprender que era aquella cosa. En segundos el artefacto explota desintegrando a los vampiros que había en el túnel.

Amor en Volterra 2 (Alec Vulturi) [En pausa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora