Amor en Volterra 2 (Alec Vulturi) [En pausa]

Capítulo 15

Los tres vampiros vieron como el suelo estaba plagado de partes de los cuerpos de los neófitos y algo aún más extraño, cientos de flechas volaban por el aire hacia los dos hermanos que permanecía detrás del escudo de Siriana. Por su parte Crysti se enfrentaba a todos los vampiros que se acercaban a ellos; su aura era totalmente distinta. Ya no quedaba nada de la dulce chica que habían visto durante todo el viaje. Allí de pie había una bestia sedienta de sangre que descuartizaba a todo el que osase acercarse más de la cuenta. Sus ojos se habían transformado y ahora tenían el color rojo de los vampiros, pero sus pupilas eran alargadas como la de los lobos; sus manos acababan en largas uñas que cortaban incluso el más duro de los metales y su rapidez era extrema, la rápida visión de los Vulturis no era capaz de captar todos sus movimientos.

- ¿De dónde narices salen esas flechas? - Nikro miraba a su alrededor, no había ningún lugar visible por el que viese salir los proyectiles. Con asombro vio como del suelo salían varias lanzas que intentaban atravesar a los dos cazadores-Están muy bien preparados -Nikro miraba serio la escena- ¿Por qué se esconden detrás del escudo? Las flechas no les pueden matar.

-Los humanos no sirven para nada- Jane observaba aburrida como la humana mantenía con esfuerzo el escudo mientras esquivaba las lanzas

-Si no detenemos las flechas no podrán avanzar- Alec miraba serio la dirección que seguían las flechas, pero su origen seguía siendo un misterio.

-Axel tenemos que hacer algo, no podré aguantar mucho más-Siriana notaba como el sudor recorría su frente, comenzaba a sentir un gran dolor en todas las articulaciones del cuerpo por el esfuerzo de usar tanta energía en impedir que su escudo desapareciese- ¿Cómo va tu herida? - el chico miró su brazo, la herida no tenía buena pinta.

-Mal, el acónito no deja que mi poder de curación funcione-Siriana gruñó algo ininteligible, mientras otra nueva descarga de flechas caía sobre ellos-Tenemos que alejarnos del alcance de las flechas-Ambos miraron a su alrededor analizándola situación. El ataque de las flechas ocupaba cerca de veinte metros y más haya estaban los neófitos que esperaban impacientes-Estamos justo en medio, pero allí y allí esta todo despejado, debe ser el punto ciego o en el peor de los casos una trampa.

-Nos dividimos. Tú te diriges hacia la izquierda y yo a la derecha-Axel asintió dudoso. En cuanto la protección del escudo se desvaneciera lo más seguro es que acabase hecho un colador-Puedo probar a envolverte con una parte del escudo, pero no sé si funcionara. Por si acaso intenta esquivar las flechas- ambos asintieron mientras se preparaban para correr.

El escudo de agua se rompió dejando que las miles de flechas cayesen. Por su parte los dos cazadores comenzaron a correr en direcciones opuestas intentado llegar al punto ciego, pero en su camino se interponían las flechas, que gracias al escudo que llevaban cada uno las podían evitar, las lanzas que seguían apareciendo sin ningún aviso, y los neófitos que intentaban impedir que continuasen.

Siriana vio la fila de neófitos que se interponían entre ella y el punto ciego, sabía que, si los atacaba uno por uno, tardaría demasiado, así que solo podía probar el poder del agua.

Los presentes miraban curiosos como Axel se lanzaba contra los vampiros de frente abriéndose un hueco para poder pasar entre ellos, mientras Siriana reunió en sus manos todo el poder que le quedaba, a su alrededor se formó una gran ola que arraso con todos los neófitos. Victoriosos los dos hermanos llegaron a su destino bajo la atónita mirada de Crysti y los Vulturis.

-Eso a molado un montón-dijo Nikro con una amplia sonrisa-Axel placándolos y Siriana creado olas gigantes, tenemos que venir a más misiones con ellos.

-Han caído en una trampa-dijo Jane con una amplia y malévola sonrisa- Una trampa donde ni el más estúpido caería como lo han hecho ellos.

-Maldición-Alec vio como el suelo se abría bajo los pies de los hermanos dejando salir unos gigantescos tentáculos.