II

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— Déjame en paz —el menor trato de quitarse de encima el agarre del más alto.

— Lo siento —trato de tomar sus caderas—. Pero me gustas mucho —tomó su mento al tiempo que el más bajo colocaba ambas manos en sus pecho para evitar que se acercara.

— Debiste de pensar en eso antes de salir con alguien más —trato de endurecer su mirada—. ¿Por que me miras así? —el otro suavizó su mirada—, pensaste que con solo decir "lo siento", volvería a tus brazos, pues no, todo lo que me hiciste no lo voy a olvidar jamás.

Aquel agarre que sostenía sus caderas se soltó y aprovechó la oportunidad para caminar hacia la mesita y tomar su mochila. Pero tal y como lo esperaba, un par de brazos volvieron a abrazarle.

— Cásate conmigo —tararearon aquellos labios y trató de poner un rostro sorpresivo por tal petición.

— Deja de bromear —trato de soltarse de nuevo, pero aquel lo tenía abrazado por la espalda y enterró su rostro en el hueco de su cuello—, te quiero te quiero —susurro.

— Déjame por favor —tomó las manos del más alto para quitarlas de su cuerpo, pero este lo apretó aun más.

— Te quiero y se que tu me has querido siempre.

Después de esto, el chico más bajo volteo y miro aquel con los ojos llenos de lágrimas; aquello era sorpresivo, no lo esperaba.

— Yo...

No lo dejo terminar porque tomó su rostro con una mano y la otra seguía en sus caderas, lo acercó lentamente, y no pudo evitar recibir aquel beso; abrió sus labios y se fundieron con pasión.

— ¡CORTE!

Alguien grito y su compañero no había dejado de besarle, por lo que KyungSoo fue quien se separó, escucho a Henry soltar un gruñido.

— ¡Me ha encantado¡ lo hicieron magnífico —el director seguía hablando mientras se acercaba a ellos—. ¿Lo ves? —preguntó a su asistente—, te dije que estos dos tenían una buena química.

— Señor Calvin —su asistente iba corriendo detrás del aludido y KyungSoo soltó una risa por eso.

— Chicos pueden ir a cambiarse, es todo por hoy y solo haremos las escenas finales, han sido tres meses arduos...

— Gracias —KyungSoo dio una ligera inclinación.

— Este chico es tan educado así como bonito.

— Señor, lo está buscando el productor...

— Si si ya te escuche —interrumpió a su asistente—, bien chicos, les avisaremos cuando tengan que venir, descansen.

— Gracias —los protagonistas dijeron en unísono.

KyungSoo volteo a ver a Henry y este tenía la mano en la barbilla. Aquel se percató de su mirada y le guiñó un ojo; KyungSoo le sonrió.

— Bien, creo que es todo por hoy —siseo—, nos vemos —se retiró sin esperar a que el otro se despidiera.

Se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia su camerino. Habían terminado un poco más temprano y deducía que SungYeol aún no regresaba.

Ya había caminado unos cuantos metros cuando escucho pasó detrás de él.

— Oye, espera —Henry lo tomó del brazo, tan solo unos pasó antes de entrar a su camerino—, lo siento —se disculpó al ver que KyungSoo se había sobresaltado.

— Me has asustado —se llevó una mano al corazón— ¿pasa algo?

Henry regreso a poner esa sonrisa seductora.

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