Entro en casa deteniéndome en la puerta, mi mano viaja hasta mi pecho que aun late con fuerza mientras diversos sentimientos invaden mi cuerpo.
— Danielle, ¿te sientes bien? — Pregunta Dante desde la cocina, junto a mi madre que me observa fijamente.
— Si, si jajajaja
— Vamos a cenar. — Puedo notar la cautela en la voz de mi madre.
— Ya comí, así que voy a subir a mi habitación, gracias mamá.
Corro escaleras arriba sintiéndome la mujer más afortunada de la vida.
— Lo amo tanto. — Abrazo mi almohada mientras giro sobre la cama.
— Casate conmigo. — Pronuncio extasiada recordando el momento para comenzar a reír.
— ¡Mi osito! — Digo recordando de pronto el animal de felpa.
La sonrisa en mi rostro no se borra con nada e irracionalmente alegre abro mi whatsapp abriendo el chat con Felipe y Jess.
Yo: Los amo chicos, estoy tan alegre de que estén juntos, los amo.
Jess: Danielle, ¿estas bien?
Yo: Si, por supuesto que estoy bien.
Felipe: Debe ser él profe Gabriel.
Yo: No, nada que ver...
Jess: ¿No paso algo malo cierto?
Yo: No nada malo.
Felipe: Pues que alegría.
Yo: Chicos los amo, mucho mucho.
Jess: Jajajaja Danielle ¿amas el mundo?
Yo: Pues claro, porque no, el mundo es tan bello, el amor es tan lindo.
Felipe: Jajaja Danielle ¿que paso?
Yo: Nada...
Jess: Como que nada, algo debe haber pasado para que estés tan feliz
Yo: Ok, ok ya que insisten se los contaré... Gabriel y yo nos vamos a casar...
Jess: ¿¡QUE!?
Felipe: ¿Es en serio?
Yo: Si, por dios si, lo amo tanto.
Jess: Felicidades Danielle.
Felipe: Wow estoy impactado.
Yo: No puedo explicar lo que siento pero es super fuerte, nadie nos va a poder separar nunca.
Felipe: Calmate... ¿estas respirando?
Yo: Si, aun respiro
Jess: Jajaja nuestra Danielle está enamorada.
Felipe: Bien enamorada diría yo.
Yo: Ustedes deberían casarse también.
Jess: Jajajaja ahora quieres que todos nos casemos...
Felipe: Es el momento, pronto se le pasara...
Después de un ameno momento de chistes sobre bodas, me despido de mis amigos para ir a dormir, pero en medio de la oscuridad de mi habitación no puedo parar de pensar en lo que significa realmente comprometerse con alguien a tal nivel, casarse son ligas mayores incluso para mi «¿Como será Gabriel como esposo? ».
— Esposo. — Mi mano va hasta mi boca que cubro mientras mis pies se mueven nerviosos.
— Calmate Danielle, tienes que dormir. — Me auto recuerdo.

ESTÁS LEYENDO
PROFESOR
RomanceDanielle es una estudiante de 17 años como cualquier otra y Gabriel es un profesor dedicado y muy diestro en su materia. Ambos se enfrentarán a los peligros de su situación, donde tanto amigos como familiares tendrán algo que decir con respecto a el...