Capítulo 22

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Emily:

Me encontraba llorando en los brazos de Erin después de contarle sobre mi pasado.

Ella sólo me consolaba diciéndome que todo había pasado y que ahora podía contar con ella, claro que lo sabía pero era bueno escucharlo.

-Es por eso que... Llegué a vivir con Duff, él es el único que me apoyó, que quiso lo mejor para mí, que estuvo a mi lado cuando nadie lo estaba.

-¿Y tu hermano?.- preguntó

-En ese tiempo, mi hermano seguía con sus vicios... No podía contar con él.- eliminé mis lágrimas y sonreí.- Pero ahora si, ahora tengo muchas ganas de vivir, tengo a mi hermano, te tengo a ti y sobretodo al amor de mi vida...- sonreí más al recordarlo.

-Entonces... Duff... ¿No te ha hecho daño?.- preguntó, la miré confundida y reí.

-¿Qué daño me haría? Si él me rescató, él me ha estado apoyando... En la universidad, en la casa, en la vida... Todo lo que soy ahora, se lo debo a él... Hasta estuvo en contra de su propia familia por mí, no sólo yo he tenido problemas, él también... Y por mi culpa pero ya todo está solucionado.- sonreí, ella bajó la mirada.

-Emily... No sabes cuánto lo siento, he sido una tonta por dudar de él, por creer que ibas a pasar lo mismo que yo... Lo siento.- yo negué.

-A mi no me deberías pedir perdón... Sino a él, y no sólo tú... Yo también, me dejé llevar por todo y lo herí... He estado distante con él y me arrepiento mucho...- ella asintió y tomó mi mano.

-Es un buen hombre... Después de todo.- asentí y sonreí.

Se quedó un rato más hasta que tuvo que irse ya que Axl la esperaba en casa.

La veía más feliz con él, después de lo que pasó... Axl le pidió perdón de rodillas y ella lo aceptó ya que después de todo... Lo amaba.

Y así es el amor, ¿No?

Aceptarlo todo de esa persona así como él lo acepta todo de ti.

Duff llegó a casa muy tarde, sabía que lo hacía para no incomodarme ya que yo estuve distante.

Estaba segura que él esperaba verme dormida, al verme bajó la mirada y quiso pasar de largo pero yo me interpuse en su camino.

-Duff...- él me interrumpió.

-Lo sé, lo sé... Tranquila, no tienes que decir nada, lo acepto, sé que dejaste de quererme pero yo no y es por eso que te dejo ser feliz con quien quieras...- lo miré confundida y lo interrumpí.

-No, no es eso, yo te sigo amando...- tomé su rostro en mis manos.- Te amo mucho y he sido una tonta por pensar mal de ti... Me dejé llevar por todo lo que me dijo Erin en vez de confiar en ti... Es más, ni siquiera tenía razones para hacerlo pero lo hice y por eso quiero pedirte perdón...- él sólo me miró.

Comencé a sentir miedo... ¿Y si él se cansó de mí?

¿Si ya no quiere arreglar lo nuestro?

¿Si me deja?

-Duff...- susurré.

Sin darme tiempo a reaccionar, juntó sus labios con los míos para luego rodear mi cintura con sus brazos y apegarme a él.

Yo rodeé su cuello con mis brazos.

Hace 1 semana que no lo besaba y se sentía como si fueran años, fui una tonta por alejarlo de mí y tuve mucha suerte de que él no me haya rechazado.

Me volví a sentir completa a su lado, él me abrazó y pude sentir cuánto me había extrañado.

Duff:

¡No podía creerlo!

¡Mi plan había funcionado a las mil maravillas!

1.- Había hecho sentir culpable a Erin

2.- Ahora, incluso, era mi aliada

Y sobretodo...

3.- Volvía a ser la prioridad de mi hermosa Emily.

Sin duda, todo me estaba saliendo bien.

En los ensayos, todos se dieron cuenta de que Erin ya no me odiaba, hasta le caía bien.

Y a mi también me comenzaba a agradar, era más linda cuando no me miraba con desagrado.

Axl y yo nos volvimos aún más amigos pero la banda se había ganado mala reputación gracias al último espectáculo que hizo Axl.

Sabía que para ganarme aún más, la confianza de Erin, debía controlar a Axl y mostrarle que gracias a mí, su novio no le hacía mas daño.

Aunque tampoco estaba de acuerdo con Axl en algunas cosas...

Digo, el tipo está loco y por eso mismo también debe ser controlado.

Todos en la banda me consideraban como un héroe y tenía su admiración así que ahora tenía a todos en la palma de mi mano.

-Emily... Sólo te aconsejo que tengas cuidado, ese chico... Daniel, no te va a llevar a nada bueno, no le puedes hacer esto a Duff... Él ha hecho muchas cosas por ti y lo único que puedes hacer es desobedecerlo.- escuché a Erin hablar con Emily.

-Lo sé, pero es mi amigo... No estamos haciendo nada malo, además nos ayudamos mutuamente en la Universidad y...- la interrumpió.

-Tal vez por tu parte no, pero según me contaste... Ese chico quiere algo contigo y aunque digas que no... Él malinterpreta tu amistad, sé lo que te digo Emily, no te metas en problemas por gente que no vale la pena...- fruncí mis cejas.

Fue buena idea tener a Erin como amiga.

Pero quitando todo...

Ese maldito Daniel sigue en nuestra vida, Emily...

¿Porqué permitas que siga ahí?

¿Es que acaso no soy lo suficiente para ti?

Caminé dentro de la cocina, ellas se sobresaltaron pero sonrieron.

-Hola amor.- dijo Emily, sólo la miré.

Ella dejó de sonreír, me miró confundida.

-Erin, te llama Axl.- dije, Erin se paró rápidamente y sonrió.

-Gracias, en seguida voy.- dijo y caminó rápido hasta la sala de estar.

-Duff, ¿Estás bien?.- preguntó Emily.

No dije nada, tomé un vaso con agua y salí a la sala de estar detrás de Erin sin siquiera mirar a mi novia.

Era hora de que aprenda que de mí... Nadie se burla.

Ni siquiera ella.

You're Mine [Duff Mckagan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora