Capítulo 9: El momento perfecto

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~N~

Me observo al espejo, peino mi cabello cobrizo, miro el vestido que llevo puesto, es muy sencillo, no tiene escote ni es apretado, de hecho tiene muchas flores. Soy más yo que nunca, pero una parte de mí no puede admitirlo. Dejo de arreglarme el cabello, porque así no me considero, necesito que sea solo un poco, aunque ha pasado tanto tiempo que ya ni me acuerdo. Lo que más me inquieta es estar delante de otros siendo mí misma. Ya he sido descubierta, así que no hay nada que perder. Poseo muchos nervios. Bajo las escaleras intranquila, entonces salgo de mi casa a paso veloz.

Al llegar al parque, veo a Estuarth esperándome en una esquina. Se ve tan serio con sus manos en los bolsillos, esa mirada perdida y la chaqueta verde no le queda nada mal. No sé por qué lo estoy mirando tanto, quizás porque no me había dado cuenta que es atractivo y sus intenciones son buenas, tanto que me hacen adorarlo más. La primera vez que lo vi, quería conocerlo, me regaló una flor porque yo la miraba demasiado, fue un gesto muy lindo.

―Hola ―lo saludo nerviosa.

Estuarth se gira a observarme, sus mejillas se ruborizan, saca las manos de sus bolsillos y con una se toca la cabeza algo ansioso.

―Wow, es como la primera vez que nos vimos, pero mejor.

―¿Q... ¿Qué cosa? ―Me miro buscando alguna equivocación.

Ríe nervioso.

―A lo que me refiero es que te ves muy bonita ―me hace un cumplido.

―Gracias, tú también ―Lo agarro del brazo y lo tironeo para caminar ―. Vámonos antes de que alguien nos vea ―Saco mi lado demandante pero también son mis miedos.

Comenzamos a avanzar y él se ríe.

―No estés tan tensa, es solo una salida.

―No debí haberte hecho caso ―expreso molesta ―. Debí haberme vestido como siempre y ya.

―Yo creo que tú querías vestirte como antes ―opina.

―Claro que no ―exclamo con la cabeza en alto ―. Es tu culpa, tú me dijiste que venga sin todos los estereotipos que Lissa me impuso.

―Yo te incentivé a hacerlo, pero tú fuiste quien lo hizo, felicidades.

Bufo.

―Yo no sé.

―¿Y qué quieres hacer ahora? ―pregunta intrigado.

―Pues... ni idea, esperaba que tú lo eligieras, tú me invitaste.

Se ríe.

―Sí, pero quizás quieres hacer algo que te guste, no voy a decidir por ti, eso va por tu cuenta, puedo sugerir pero tú aceptas o no.

―¿Por qué haces esto? ―digo molesta.

―Lissa te ha manipulado por mucho tiempo, estaría bueno que elijas por ti misma, esta salida va dedicada a ti. Quizás un día salgamos de nuevo y haremos cosas que a mí me gusten o incluso a ambos, pero por ahora te dejo elegir ¿Qué quieres hacer?

―No sé ―expreso confundida ―¿Ver flores? ―Me lo pienso ―Aunque ya estamos en un parque, qué estupidez ―opino sobre mi sugerencia.

Se ríe.

―Quizás podamos ir a una floristería o a una reserva natural ¿Conoces alguno de estos lugares? Yo soy nuevo por aquí.

De popular a solitario (C.G #3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora