7: ¿Me deseas tanto como yo a ti?

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THOMAS

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THOMAS

¿Para qué mentir?

Verla con mi camiseta esta mañana fue excitante de cierto modo y debo admitir que le quedaba increíble. Pero enserio no me podía arriesgar a decirle que la besé y la vi desnuda, sería mucha información por digerir, aparte que, no quiero que nuestra amistad se vea en algún tipo de riesgo.

Nunca me perdonaría si la pierdo.

Me dejo caer sobre mi cama boca arriba, mi respiración es relajada. Siento como alguien se sube en horcajadas sobre mi regazo y comienza a besar mi cuello.

Cabello castaño, tez dorada...

Se separa de mi cuello y comienza a masajear mi pecho suavemente.

Desearía que fueras Rosie.

Pero no lo eres...

—Cristal —emití con voz áspera, tomé sus caderas las acaricié. Ella me sonrió y me miró atenta.

—¿Qué pasa? —cuestionó con voz suave, pasó su mano por mi cabello.

Sentía que tenía algo que sacar dentro de mí, pero no se precisamente que. Esa gran... cobardía dentro de mí me estaba volviendo loco.

¿Por qué uno no puede tener lo que quiere fácilmente?

Lo fácil es aburrido, Thomas.

Exactamente, lo que estoy por hacer ahora me dará placer, pero el haberlo conseguido tan fácil no me da placer en todos los sentidos.

Me levantó obligándole a bajar de mí—. Vamos, te llevaré a tu casa.

Ella frunció el ceño confundida pero no protestó.

Eres un cobarde Thomas.

●○●

—Tierra llamando a Thomas —los lindos ojos de Alice se posaron frente a los míos. Sus labios en una hermosa sonrisa y su cabello rubio cayendo por sus hombros.

Parpadeo un par de veces volviendo a la realidad. Había estado tan perdido en mi cabeza todo lo que llevaba de clases. Me sentía cansado ya que el cumpleaños de mi padre sería mañana, viernes. La semana había pasado tan rápido. No había visto a Rosie ya que Diana me necesitaba para los preparativos de la cena de cumpleaños de mi padre y créanme que es cansado.

—Lo siento, me estoy durmiendo —sonreí.

Jake rodó los ojos y golpeó mi hombro—. ¿Noche loca, amigo? —inquirió divertido mientras levantaba sus cejas frenéticamente.

Ojalá estuviera cansado por tener sexo.

—No —bufé rodando los ojos—. Ojalá fuera por eso.

Alice abrió grande sus ojos y me lanzó una semilla de su naranja—. ¡Thomas estoy aquí! —chilló.

Los tres carcajeamos un poco, hasta que nuestra vista se enfocó en el estacionamiento. Un fuerte golpe de un portazo llamó nuestra atención, Derek estaba por pelearse. Jake y yo salimos disparados en dirección a él.

¿Qué le pasó a Rosie Donovan? [¿Qué nos pasó? 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora