ROSIE
—Ya sé que vienes ahora tú, Thomas...
La voz de Derek era tan gélida, burlona, antipática, cruel...
Suspiré y apreté los puños mientras descendía las escaleras, estaba en una pose desdeñosa sobre la silla metálica, respiraba de una manera que me indicaba cuan fastidioso le resultaba esto, llegué al final de las escaleras, la madera crujió bajo mis pies y tomé una inspiración, Derek ni siquiera me había prestado atención. Analicé la situación y me quedé perpleja al observar en sus pies las esposas.
—Derek —lo enfrenté. Mi voz salió firme, sin miedo y tan determinada, esto se había convertido en una situación de hermanos.
El sonido de mi voz hizo que volcara toda su atención a mí, volteó a verme rápidamente hundiendo su entrecejo y borrando su sonrisa—. ¿Tú que haces aquí?, ¿esos cobardes te mandaron a ti?
Meneé la cabeza negando y comencé acercarme a mi hermano, las muñecas le sangraban por zonas y las tenía amoratadas, me preocupaba la insensibilidad que presentaba.
—¿Cómo las trozaste? —el susurro salió de mis labios, acompañado de un gesto doloroso al ver las heridas en él.
Derek sonrió, sonrió de aquella manera que se me antojo siniestra y torcida, casi como si mi pregunta fuera un chiste, se acomodó en su asiento inclinándose al frente, recargando sus brazos contra sus muslos y me miró con atención, el verde de sus ojos me pareció opaco, era como ver a otra persona y no a mi Derek.
—Eso a ti no te importa, hermanita.
Arqueé una ceja indignada, su tono fue hostil, y cargado con aquella maldita sonrisa me irritó.
—No uses ese tono conmigo, hermanito —mascullé cruzándome de brazos, elevando el mentón y poniendo mi mejor semblante molesto.
Derek soltó el aire por su boca, rodó los ojos y soltó una amarga sonrisa sin gracia, chaqueó la lengua y aguardó silencio por unos instantes en los que cuando se le dio la gana, volvió a mirarme y sin más, masculló:
—Solo quiero mis putas píldoras.
Tengo que engañarlo y sostenerle las manos. Comienzo a observar a mí alrededor en busca de otras esposas, tengo que hacer el trabajo de los dos seremos humanos que están arriba y parecen meterle a Derek, aparte que no dejan de cuidarse el trasero, así como yo se lo cuido a Derek, como una protección de hermandad. Aunque, el característico sonido metálico me sacó de mis cavilaciones y búsqueda, me paralicé por completo volcando toda mi absoluta atención a mi hermano mayor.
—¿Buscas esto?
Su voz fue un sonido burlón y totalmente placido, su mirada verdosa había adquirido aquel aire juguetón y triunfador, entre sus dedos yacía el par de esposas nuevas, le daba vueltas con su dedo.
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¿Qué le pasó a Rosie Donovan? [¿Qué nos pasó? 2]
Ficção AdolescenteRosie Donovan, la segunda de los hermanos Donovan. El enigma familiar, la alegría y destello especial. Eso poseía Rosie. ¿Qué le pasó?, ¿Qué hizo?, ¿Qué decisiones tomó?, ¿Por qué hizo eso?, ¿Está viva? Las personas especulan respecto a lo que en re...