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Ya había finalizado, no se sentía como si hubiera hecho un gran avance. Wendy miraba de lejos a Irene, todavía sin saber cómo tratarla a pesar de todo lo que pasaron.

Era el último día del kinder, los padres de varios de los niños estaban dentro del salón hablando con la profesora, la típica reunión de padres. Mientras tanto, los niños parecían disfrutar de su último día, algunos irían a otra escuela y otros simplemente quedarían allí para comenzar primaria, ya que era una institución enorme y se dividía en dos secciones, kinder y primaria.

Wendy soltó un suspiro, veía a algunos de sus compañeros algo decaídos pero siempre acompañados. Probablemente eran los que irían a otra escuela, la pequeña castaña temía el terminar siendo uno de ellos también, su madre todavía no había hablado con ella sobre eso... Aunque, ¿Por qué parece importarle tanto?

Verán, en este buen año, Irene logró invadirla lo suficiente como para que una gran parte de Wendy le tomara cariño, y aunque esto haya sido un progreso enorme, Irene todavía no había podido conseguir la muestra de amor de la castaña.

—¿Por qué no estás jugando? —se sobresaltó ligeramente al escuchar una voz detrás suyo. Se giró y reconoció el rostro de Joy, la cual la miraba intrigada.

—Y-yo... —Wendy calló su tartamudeo, no se había dado cuenta de que estaba pensando tanto en el último día, que no estaba aprovechando al máximo el tiempo con sus, probablemente, amigos temporales.

—Ven, iremos con las chicas —tomó rápidamente la mano de la castaña y la guió al grupo de niñas debajo de un trepador.

—¡Iremos a la misma escuela el próximo año! —ambas niñas llegaron a tiempo para escuchar el comentario entusiasta lanzado por Moonbyul, quien saltó a los brazos de Yongsun haciendo que ésta perdiera el equilibrio e hiciera que ambas cayeran al suelo.

—¡Tonta! —se quejó, poniéndose increíblemente rosada por la vergüenza. La pequeña rubia se disculpó dándole un beso en la mejilla.

—¿Otra escuela? Entonces supongo que no se quedarán aquí —se escuchó la voz ligeramente desanimada de Wheein.

—No estés así, Puppy. Estarás conmigo —le habló Hyejin mientras le regalaba una sonrisa pícara, logrando las risas de las chicas alrededor, incluyendo a Wheein.

—Yo también iré a otra escuela —admitió Sana, una niña con la que Wendy no interactuaba mucho pero no significaba que le cayera mal.

—Muy bien... quiero saber quiénes son las que se quedarán en esta escuela y quiénes se iran a otra —Chaeyoung trató de liderar el momento, llamando la atención del resto de niñas allí—. Las que se quedan pónganse de éste lado del patio —señaló su lado izquierdo, por alguna razón, las niñas obedecieron sin quejas, parecía que la pequeña Rose podía sorprender cuando quería—, y las que se van, de éste lado, por favor —una vez más, el resto de niñas obedeció y en poco tiempo, ya habían dos filas. Chaeyoung se dirigió hacia la fila que pertenecía a las que se quedarían en esa escuela.

—Parece que quedaremos pocas —reconoció Irene, mirando la considerable diferencia en ambas filas.

Todas las niñas luego de intercambiar miradas y asentir, notaron que Wendy era la única niña que no estaba en ninguna de las dos filas.

—¿Wendy? ¿Por qué no estás en ninguna fila? —cuestionó Seulgi lo que, al parecer, estaba en la mente de la mayoría de niñas en ese instante.

La pequeña castaña se movió insegura en su lugar, y notó que Irene estaba prestándole toda su atención, ni siquiera reconoció a los niños yendo en dirección a ellas.

As she pleases ; WenreneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora