Por fin después de un rato volvimos a la enorme casa donde vivíamos, solo subí a mi habitación y me tumbé a intentar conciliar el sueño.
Al rato escuché unos golpes en mi puerta ya que gracias a los dioses no se me había olvidado poner el pestillo.
-Pilar....- dice Purre enfrente de la puerta.
-Si vienes porque quieres que te ayude con tu noviecita ya te he dicho que...- digo pero me interrumpe.
-No no, aunque si quieres...- dice levantando la cejas con una sonrisa.
-¿Quieres ir al grano ricitos?- le digo perdiendo un poco la paciencia y apoyándome en el marco de la puerta.
-Que aquí la gente no sabe cocinar y que si nos podías hacer la cena- dice haciendo una sonrisa creyendo que me convencería.
-Primero, solo hago cena cuando yo tengo hambre. Y segundo, no me vas a convencer como a tus otras chiquitas del instituto con tu sonrisa y si dices que ellos no saben hazla tú - digo haciendo una sonrisa triunfadora.
-Venga Pilar, si se que deseas cocinar para mi- dice acercándose.
-Mira ricitos, das un paso más y te quedas estéril para toda tu vida- digo mirándolo desafiante.
-Vale vale, pediré una pizza. Luego si tienes hambre bajas- dice dándose la vuelta y bajando las escaleras.
Me di la vuelta y volví a cerrar la puerta. Me tumbé en la cama y volví con mi hermoso sueño.
Al rato me desperté por el rugido de mi estómago, abrí la puerta y allí había un plato con una nota.
Supuse que tendrías hambre después. Pd: se que te vuelvo loca-P
Maldije todo porque este Playboy me sacara una sonrisa con sus estupideces. Cerré la puerta y entré a mi habitación dispuesta a comerme las porciones de pizza.
Al rato me cambié y me fui a dormir sin prisas ya que mañana sería domingo.
Me desperté ya que notaba que alguien me estaba llamando.
-Pilar,Pilar- oía decir a Matías.
-¿Cada día tenéis que entrar uno? Espera, ¿Como has entrado?- digo cabreándome.
-Hay una cosa que se llama llave maestra hermosa- dice con una sonrisa.
-Bueno ¿Cuál es el motivo ahora para acosarme?- pregunto para saber porque demonios me había despertado de mi hermoso sueño con Zac Efron.
-Ya te gustaría a ti que te acosara- dice con una sonrisa.
-¿Me lo vas a decir o te vas a quedar observándome?- digo esperando.
-Lo que tú quieras- dice sacándome de mis casillas.
Yo solo le miré con cara de asco.
-Venga vale, tu hermano quiere que bajes.
-¿Enserio? ¿Todo esto solo para decirme esto?- digo enfadada.
-No es mi culpa que quieras pasar tiempo conmigo- dice subiendo los hombros.
-Venga vete- digo señalando la puerta.
-¿No me puedo quedar?- dice acercándose.
-Puedes irte a la mierda- digo a centímetros de su cara.
-Vale vale- dice separándose y yéndose por la puerta.
Me puse unos pantalones blancos rasgados con un jersey negro y mis parecidas vans.
Bajé y vi como todos los playboys se giraban de repente ¿No cambiarán nunca?
-¿Que pasa?- digo acercándome a mi hermano.
-Vamos a ir a desayunar a una cafetería de aquí al lado. ¿Te vienes?- me pregunta.
-Si no tengo otra...- digo sin ganas.
-Te puedes quedar conmigo si quieres- dice Kendal guiñándome un ojo.
-Callate- le dice mi hermano antes de que yo pudiera contestar.
-¿Vamos?- dice Matías agarrando su chaqueta.
-¿Andando?- digo con una sonrisa ya que no tendría que aguantar tiempo con ellos encerrados en un coche.
-Si, está cerca de aquí- dice mi hermano yendo delante mia.
-Genial- digo agarrando mi chaqueta y saliendo detrás de ellos.
Llegamos a la cafetería, la verdad es que era bastante acogedora. Nos sentamos al lado de unas chicas que para mi gusto llevaban una ropa demasiado corta y parecía que llevaran más maquillaje que cara.
Y obviamente los playboys se pusieron a coquetear con ellas. Como veía que yo allí sobraba me fui a la barra del bar a tomarme mi preciado chocolate.Unas chicas bastante normales se acercaron a mi.
-Hola, soy Cristina- me dice una chica con el pelo negro y piel más o menos blanca.
-Y yo soy Tatiana, pero me llaman Tati- me dice una chica con el pelo pelirrojo teñido y también un poco blanca de piel.
-Soy Pilar encantada- digo con una sonrisa.
-¿Vienes con ellos?- dice Cristina mirando a los playboys.
-Por desgracia- digo mirándolos yo también.
-Van a nuestro instituto, la verdad es que son todos unos descarados- dice Tatiana.
-Lo sé, y encima si vives con ellos- digo volviendo a maldecir mi suerte.
-¿Que dices? ¿Y porque vives con ellos?- me pregunta Tatiana.
-Uno de ellos es mi hermano, Carlos- digo señalándolo con la mirada.
-Él es el menos gilipollas de todos, pero no se queda atrás- dice ahora Cristina.
-Entonces ahora que me doy cuenta vamos al mismo instituto- digo mirándolas ahora a ellas.
-Siiii, seguro que será genial- dice Cristina.
-Seguro- digo con una sonrisa al saber que ya conocía a alguien normal.
-Bueno Pilar nos vemos mañana en clase- dice Tatiana yéndose acompañada de Cristina.
-Chau- digo despidiéndome.
Al rato de que los playboys dejaran de ligar nos fuimos a casa, por el camino de regreso estuve charlando por WhatsApp con Clara (sé que no he puesto foto de Clara, pero si vuelve a aparecer la pondré) ya que la echaba mucho de menos.
Llegamos por fin y fui a darme una ducha caliente, en este momento agradecí tener baño propio.
Me sequé y estaba buscando mi ropa cuando oigo que alguien abre la puerta, dichosa llave maestra...———————————————————————————Holaaa
Tenerme paciencia si alguna vez pongo Sara en la novela😂 Es que en la antigua historia la protagonista se llamaba así y me confundo😂
Si os gusta tanto como a mi darle a la 🌟 y comentar.
Besos❤️❤️
ESTÁS LEYENDO
Viviendo con playboys|| Versión Pilurre
Teen FictionPARTE 1 de la duología. ¿Vivir con tu hermano y los chicos más mujeriegos de toda la universidad?