Viviendo con playboys|| Versión Pilurre

33

Narra Pilar
Estaba bailando con Tatiana cuando noto que dos chicos salen de la nada y me agarran poniéndome un trapo en la boca. No pude hacer ni decir nada ya que todo mi cuerpo se durmió en el instante que pusieron el trapo en mi boca.

Mi desperté en un sitio oscuro, atada de pies y manos y con la boca tapada por un trozo de cinta.
Miré a mi alrededor para ver si reconocía algo, pero lo único que veía eran montones de sobres con polvos blancos y algunas sillas de madera que no irán iguales a la que yo estaba atada, la mira era de metal. Supuse que los polvos blancos eran la droga que pasaban Lucas y sus hombres, y ahí me di cuenta, seguramente fue Lucas quien hizo todo esto. Todo por una simple venganza hacia Purre.
Así estuve un rato, mirando y pensando en lo que pasaría, hasta que unos hombres entraron a la sala proporcionándome unos nervios enormes.

Los hombres iban con unos pasamontañas, menos uno, Lucas.

-Dulce dulce Pilar- dice mirándome de arriba abajo.

Yo solo me moví en señal de que quería escapar, pero él me puso la mano encima para que dejara de hacerlo.

-No lo vas a conseguir hermosa, no hoy- dice riendo.

Yo le miré con cara de odio, solo quería romperle esa sonrisa de idiota.

-Venga chicos, ya sabéis lo que hacer- dice saliendo de la habitación.

Los dos chicos con pasamontañas se acercaron lentamente a mi, empezaron por tocarme los senos y a ir quitándome la ropa poco a poco. Tenían unas tijeras con las que iban cortando la ropa ya que no la podían quitar porque estaba atada. Cada vez me sentía más vulnerable. Estaba en ropa interior, y los vi hablar como diciendo quien lo haría primero, yo ya sabía a lo que se referían pero no quería creérmelo.
Uno de ambos pasó las manos por mi espalda y desabrocho mi sostén, para así dejar mis senos al aire y poder tocarlos mejor. El otro agarró las tijeras y cortó mis bragas y me las quitó a la fuerza.
Por lo que se podía ver por sus pasamontañas ambos me miraban con cara de deseo y perversión, uno le dijo a otro que él iría primero, el otro solo asintió.
Vi como se acercaba a mi, yo solo me movía para que no me hiciera nada, no quería ser violada por unos secuestradores.

-Parate niñita, o sino será peor- dice sacando una navaja de su bolsillo.

Yo solo me paré y cerré los ojos, no quería ver como mi vida se iba a la mierda por segundos.
Oí como el chico se quitaba los pantalones y sacaba su miembro de los bóxers.

-Me pondré precaución solo porque no quiero que luego me vengas llorando con un bebé, bueno si sobrevives- dice el chico riendo.

Se puso delante de mi, abrió mis piernas bruscamente y empezó a dar embestidas fuertes contra mi.
De mis ojos solo salían lágrimas de impotencia y dolor por todo aquello. No podía creer que me estuviera pasando esto.

Después de estar como 5 minutos de fuertes embestidas el chico paró. Pero el infierno no había acabado, aún no.

-Me toca- dice ahora el otro quitándose igual los pantalones y haciendo lo mismo que el anterior.

Agarró mis piernas bruscamente y las puso igual que el anterior chico. Empezó a dar embestidas más fuertes aún que el anterior.

Yo ya no sentía nada en mi cuerpo, solo que estaba rota, tanto por dentro como por fuera.

Al final los dos chicos se fueron, dejándome ahí sola y desnuda. Sentía como mis lágrimas no cesaban, no podía dejar de llorar. Me sentía usada, maltratada, violada.

———————————————————————————Holaaa
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