Viviendo con playboys|| Versión Pilurre

11

Mi plan sería poner a "prueba" o "celoso" por así decirlo a Purre y enfadar a mi hermano.

Bajé de las escaleras de la mano de Zac, ya era tarde y se tenía que ir, así que empecé mi plan.

-Mi amor, te voy a extrañar- digo envolviendo mis manos en su cuello.

-¿Amor?- dice con cara pícara.

-Si, amor- digo uniendo mis labios a los suyos y pasando sus manos de mis caderas a mi trasero así haciendo que Purre y Carlos se dieran cuenta.

-Chau, te quiero nos vemos mañana- dice saliendo por la puerta.

-Chau, yo también- digo cerrando la puerta.

Cuando me giro solo veo la cara de enfado de mi hermano y también veo que Purre ya no está en el sofá.

Me iba a ir a mi habitación cuando noto que Carlos tira de mi.

-¿Pasa algo?- digo con una sonrisa victoriosa.

-Bastante es que tengas novio a que te beses con él delante de mi- dice molesto.

-¿Y eso te incumbe en...?- digo esperando a que terminara la frase.

-En que eres mi hermana pequeña y no me gusta verte besuqueándote con un chico- dice como con cara de asco.

-¿Y?- digo sabiendo que ganaría esta pelea.

Solo recibí un silencio por su parte.

-Eso pensaba- digo subiendo las escaleras.

Cuando llego a mi habitación veo a Raúl sentado en mi cama.

-¿Pasa algo?- digo entrando y cerrando la puerta detrás de mi.

-Mañana habrá una fiesta- dice con una sonrisa.

-¿Si? ¿Dónde?- pregunto feliz.

-Aquí- dice riendo.

-¿Enserio? ¿Y por que yo no sabía nada?- digo cruzándome de brazos.

-El señor Carlos no quería decírtelo- dice rodando los ojos.

-Bueno menos mal que te tengo a ti- digo sonriendo.

-Pero mis noticias tienen precios- dice con una sonrisa triunfadora.

-¿Que quieres?- digo rodando los ojos.

-He visto que tienes una amiga muy guapa... ¿Tatiana no?- dice como si intentara recordar el nombre a propósito.

-¿Te gusta Tatiana?- pregunto sorprendida.

-Quiero enrollarme con ella, luego ya no lo sé- dice subiendo los hombros.

-¿Que quieres que haga?- le pregunto.

-Solo háblale bien de mi y procura que mañana venga- dice con una sonrisa.

-Vale- digo abriendo la puerta para que se fuera.

-¿Ya me echas?- dice haciéndose el ofendido.

-Tengo sueño- digo riendo.

-Vale vale- dice yéndose y riendo.

Me tumbé en la cama a pensar.

¿Yo podría gustarle a Purre? Pero es que el chico es muy bipolar. En realidad Zac me hace feliz. ¿Pero entonces porque me importa tanto la opinión de Purre? Estoy hecha un lío, mejor será que duerma y siga con mi vida como si todo fuera bien dentro de mi.

Me desperté por mi hermosa alarma, menos mal que hoy no llegaba tarde.
Me puse unos vaqueros blancos con una sudadera corta rosa. El cabello me lo dejé ondulado y me puse unas zapatillas negras.

Bajé las escaleras y como de costumbre ya estaban todos sentados. Fui a la nevera y casualmente había una manzana, la agarré y empecé a comerla.

-Una cosa- digo hablándoles a todos.

-¿Que pasa?- me responde Matías.

-¿A mi cuando me ibais a decir que hoy había una fiesta?- pregunto matando a cada uno de ellos con la mirada.

-Emmmm- dice rascándose la nuca.

-Puede que no sea un Playboy o una de esas chonis con las que os acostáis pero soy parte de esta casa. Y si hay una fiesta en mi casa se me avisa. ¿Lo habéis entendido? ¿O lo tengo que repetir?- digo mirándolos a todos.

-¿Y porque tendrías que decírtelo niñita? Lo único que sabes hacer es quejarte- dice Purre mirándome.

-¿También me vas a pegar a mi por hablar Purre? ¿O con Zac no tuviste suficiente? - digo acercándome hasta donde estaba él plantándole cara.

-No te pego solo porque te quedarías peor- dice soltando una risita que me daba ganas de quitársela de un puñetazo.

-Primero mírate al espejo Playboy de mierda. Que lo único que sabéis hacer es follar y quedaros jugando a la play- digo con cada vez más rabia.

-No me importa lo que pienses de mi niñata- dice clavándome aún más la mirada.

-Perfecto- digo dándome la vuelta y saliendo por la puerta.

Obviamente no podía gustarme Purre.

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