Angel?

El pacto

La calle estaba demasiado oscura y el frío de Busan se metía en la piel del joven demonio hasta calarle.

Aunque en cierta forma agradecía salir de ese antro lleno de nuevos estímulos que su antiguo cuerpo humano no podía captar y que ahora se intensifican por diez mil.

No podía dejar de pensar en el chico de ojos azules intenso que había producido esa ira en su pecho mezclada de una nostalgia extraña.

-"Ahora estamos más tranquilos, ¿aceptas mi trato entonces?"- Yoongi le había pedido salir afuera para negociar ese extraño pacto que le estaba ofreciendo el dichoso Jungkook.
No lo tenía nada claro pero ahora no tenía muchas más opciones. Era eso o matar y alimentarse de la primera persona con la que se cruzara.

-"Entonces, tú me consigues alimento a cambio de ayudarte con tus servicios..."

-"Así es"- afirma Jungkook mientras se encendía un cigarro de liar.

-"¿Qué tipo de servicios son esos?"- Yoongi no era tonto, sabía dónde se metía, tenía un conocimiento a sus 25 años unos conocimientos de lo sobrenatural y los tratos con demonios bastante extenso como para que se aprovecharan de él.

Pero era bastante inexperto en todo lo que estaba por venir.

-"Mi trabajo en el mundo de la noche es bastante complicado como para contártelo aquí en medio"- Jungkook mira a su alrededor y fija sus ojos negros en una chica que salía borracha por la puerta de atrás del local. -"pero digamos que me encargo de poner en equilibrio la balanza entre lo ordenado y lo caótico."

Un hombre de unos cuarenta años sale también del local buscando a la chica que se encontraba vomitando entre los cubos de basura.

-"No existe el mal sin el bien, al igual que el bien no sería nada sin unas gotas de sangre derramadas correctamente"- continúa el demonio mirando como el hombre agarra a la chica del pelo y mete su otra mano por la falda acariciando sus muslos.

Yoongi estaba demasiado concentrado pensando en lo que el joven le estaba diciendo y en lo que estaba ocurriendo ante sus narices. No tenía intención alguna de impedirlo porque una voz en el fondo de su consciencia le decía que lo disfrutara.

Jungkook chasquea los dedos cuando oye a la chica gritar ayuda. En ese momento los contenedores se incendian y prenden fuego a la chaqueta de piel del hombre que intentaba violarla.
Él se aparta gritando e intenta rodar por el suelo para parar el fuego sin éxito.
Ella sale corriendo ilesa.

Jungkook dirige su mirada esta vez a Yoongi quien disfruta de ver arder a ese hombre llorando desesperadamente. -"Las llamas son hermosas ¿verdad?"

El pelinegro sigue en silencio procesando todo aquello.

-"No me gusta la gente que utiliza a los animales para hacerse abrigos caros y codearse de ello."- prosigue el pelirrojo -"Toma mi tarjeta, llámame si te decides."

El chico le pasa su tarjeta con dos dedos de la mano y le sonríe de nuevo de aquella siniestra forma. Se da media vuelta y comienza a caminar hacia la oscura calle desértica lejos del lugar.
Yoongi se queda clavado en el sitio.

No se había percatado de que sus manos le sudaban y tenía la mandíbula extremadamente apretada.

Le gustaba ese joven, le gustaba mucho aunque las cenizas humanas que quedaban aún en el interior de Yoongi le susurraran que no se acercara a ese tipo.
Pero su orgullo no podía quedar doblegado a las órdenes de un jefe y eso era innato en él, por eso siempre había vivido por su cuenta de forma autónoma.

-"Yoongi-Hyung"- le llama Jungkook de lejos mientras caminaba hacia atrás a paso lento. -"¿Sabes como comemos los demonios inferiores?"

El mayor no dice nada pero le sonríe mordiéndose el labio sin querer con sus colmillos afilados. El contrario le devuelve la sonrisa y esta vez sí, se marcha del todo.