Mi Pieza Faltante

Capitulo 16

Se levanto a las 5 de la mañana, no pudo dormir más que eso, el sol ni siquiera empezaba a a salir. Fue al baño, intentando no despertar a la chica que habia atormentados sus sueños, despues de todo tener el cuarto de baño en la misma habitación era mala idea, cepillos sus dientes y mientras se enjuagaba la boca se miro al espejo, se veia fatal.

Las manchas oscuras debajo de sus ojos se marcaban más de lo usual, seguramente era el efecto del trasnoche.

Se desvistio, no podia empezar su días sin tomarse un baño,  bajo el agua caliente sentia su cuerpo relajarse cerro sus ojos por un momento, al parecer las imagenes de anoche ya no se encontraban, era una buena señal.
Despues de lo ocurrido con la chica y de darse un buen baño de agua fria, al querer dormir la imagen de ella, de su hermoso cuerpo y la sensación de cuando la abrazo no se iban, sentia pequeños cosquilleos en la parte baja de su abdomen, los pensamientos morbosos no tardaron en llegar a su cabeza, pensaba en las mil maneras que la podia hacerla suya, su instinto le decia que vaya por ella de una buena vez y que se lo haga pero no, que  clase de hombre era al pensar eso, la estaba faltando al respeto con solo imaginarselo, no queria eso, no debia, pero ella ya estaba en su cabeza.

La erreción que hace unos momentos habia regresado, era muy notoria sobre el pantalón de algodón. No iba a regresar en ese cuarto, pero le estaba doliendo, malhumorado se dirigio a la cocina y agarro la caja de servilletas, regreso y  se acosto boca arrriba,  deslizo su mano hsta su pantalon arrastrandolo junto a sus boxer dejando libre su enorme pene, nunca penso hacer esto, ¿como podia ponerle es chica de ese modo? Habia visto a mujeres con mejor imagen y buen cuerpo durante el tiempo de citas arregladas pero ninguna pudo ponerle de esa manera con tan solo mirarla.

En ese momento envidiaba al viejo calvo en el que en algún momento la chica suspiraba por el, mientras pensaba una manera de hacer algo para ella, empezo a recorrer su enorme pene con sus manos, al principio se sintio incomodo era la primera vez haciendo esto, deslizo su mano de arriba a abajo de manera suave, cerro sus ojos por un momento pensando que la mano que lo tocaba era Hanji, se sentia bien pero a la vez asqueroso,  inconsientemente aumento su rapidez, las sensaciones que invadian su cuerpo era nuevo, imaginaba que la chica lo acariciaba y que el podia de nuevo tocar sus labios, giro su cuerpo de lado pequeños gemidos ahogados salian de sus labios, con la mano no ocupada agarro su polera y se la llevo a la boca, no queria despertarla y menos en estas condiciones.

Su cuerpo se retorcia con cada imagen de Hanji, fue en ese momento que sintio que algo estaba por suceder, dio un ultimo gemido que callo gracias a la polera mordiendola, su cuerpo se contrajo cuando sintio un liquido caliente inundar su mano, su pecho subia y bajaba habia empezado a sudar por el esfuerzo, estiro la mano para gagarrar las servilletas y limpiarse las manos, limpio su entrepierna, de una cierta manera le parecia asqueroso, se sentia aun pegajoso y sucio no aguanto más tenia que bañarse de nuevo, se levanto limpio de nuevo el sofa y tapandose la vista para no verla regreso al cuarto para tomarse un baño, no salio del baño hasta asegurarse de estar bien limpio y sin rastro alguno de su liquido sobre él que aunque se habia sentido bien aún le desagradaba.

Agarro su ropa sucia y la puso en cesto, le molestaba el hecho que se haya manchado, cuando salio una hora despues repitio el mismo metodo de cuando entro, tapando los ojos para no verla.

Pero apesar de sentirse cansado, no quiso ir a dormirse en cambio se la paso buscando en internet una manera  de llegar a la chica, ella era la unica que lo ponia de ese modo y que le valia en cuanto a todo a su alrededor,  incluso cayo en cuenta que le daba igual haber estado sudado sin hacer tanto escandalo.

Pero ahora ahí estaba a las 5:30 de la mañana poniendose un playera azuĺ unos pantalones comodos, aún era muy temprano para andar en saco, se durmio sin siquiera saber la hora y luego desperto y esto era la consecuencias, pero aún así la mala noche no fue en vano.