Capítulo 8

1.6K 94 27
                                    


Narra Ana

-¿No saludas ni nada, Anita?

Miré a mi hermano, que estaba tirado en el sofá y suspiré.

-Lo siento. - dije acercándome a él y dándole un beso en la frente. - Es que vengo un poco estresada...

-¿Y eso? - preguntó mientras se sentaba bien para poder mirarme mejor. - ¿No ha ido el trabajo bien?

-No es eso... - dije sentándome a su lado y resoplando. - Es Miriam, que no la soporto.

-Ya... - sonrió divertido. - Mientes.

-¿Cómo que miento? Si es verdad. - dije, sin entender a qué venía eso.

-Estás liada con Miriam.

-¿Qué? - abrí los ojos. - ¿Tú qué sabes?

Mi hermano echó a reír.

-Sé muchas más cosas de las que tú crees.

-Pues las crees mal. Yo no estoy liada con Miriam. ¿Cómo se te ocurre pensar en eso? ¿Yo y Miriam? ¡En la vida! ¡Prefiero morirme!

-Venga ya, Ana, pero si os he visto comeros la boca.

-No tienes pruebas.

Mi hermano rodó los ojos con una sonrisa y después me miró con una ceja levantada.

-El otro día, cuando fuiste a sacar a Bambi y entré en tu habitación, sabía que Miriam estaba ahí. Y con tan solo ver que estabas en sujetador y que las camisetas estaba tiradas por el suelo, me sirvió para pensar muchas cosas. Además, ¿cómo te crees que entró en casa? ¿Transpasando la puerta?

-¿Le abriste tú?

-¡Pues claro! - rio. - Me lo pidió ella.

-Te odio...

-Cuando os fuisteis, miré por la mirilla a ver si os habíais ido juntas y, ¡sorpresa!, os pillé besándoos. Tengo que admitir que sois muy monas. Sabía que íbais a hacer muy buena pareja.

Me tapé la cara, muerta de la vergüenza.

-Agoney... ¿Y por qué miras lo que hacemos?

-Tenía que asegurarme de que érais novias de verdad, que no sabía si lo que había puesto Miriam por Instagram era una broma.

-Pues sí que lo era, porque Miriam y yo nunca hemos sido novias y nunca lo vamos a ser.

-Pero si os estáis comiendo la boca todos los días fijo.

Rodé los ojos.

-Que nos besemos no quiere decir que seamos novias. Y eso de los besos se va a acabar, porque no quiero saber nada de ella.

-A ver, ¿y eso ahora por qué es?

-Porque me ha mentido todo este tiempo.

-¿Mentirte con qué?

-Miriam es M.

Mi hermano abrió los ojos.

-¿Qué? Espera, espera. ¿Me lo estás diciendo en serio? - asentí. - ¡Joder, qué fuerte! Entonces sí o sí te gusta, porque si te gusta M es que siempre te ha gustado Miriam.

Si por mí fuera | Wariam Donde viven las historias. Descúbrelo ahora