Capitulo 6

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Jueves: 01:05 PM
Estaba demasiado asombrado ante lo que mis ojos veían, todo lo que había escuchado sobre seres mitológicos y de cuentos de hadas, existían aquí, estaba con la boca abierta de la impresión, estaba tan maravillado contemplando los seres que no me movía del puesto en donde estaba, hasta que Norah me agarro de la muñeca y me llevo casi a rastras por el bosque.

—Oye espera ¿Por qué tanta prisa?—No entendía su comportamiento, quería observarlos más, a los Centauros, a los enanos que estaban pasando, incluso hasta las diminutas hadas que volaban por el lugar, ante mi duda no tuve respuesta hasta que llegamos a un punto donde no había nadie.

—Sé que esto es maravilloso para ti pero contrólate, no todos tienen este privilegio, los que son del reino no se les permite entrar a esa cueva para poder verlos, si ellos ven que te sorprendes demasiado ante su presencia sospecharan de ti e incluso te pueden condenar a muerte.

—Aja si claro pero 3 cosas .

1-Lo intentare pero me será casi imposible, en mi mundo ellos son solo personajes de cuentos.

2-¿Por qué antes no lo podía ver y ahora sí?

3-¿Por qué a los del reino no se le permiten verlos?

—¿Porqué haces muchas preguntas?— ella me mira con cara de desagrado.

—¿Y porqué me respondes con otra pregunta?

—Ya que, no responderé ninguna de tus preguntas, eres un estúpido la ultima pregunta deberías saber porque ellos no podrían verlos —Ella aun con su expresión de estar molesta cruza sus brazos.

—Ay lo siento olvide que siempre habite en este planeta y conozco todo lo que ha pasado—lo digo con tono burlesco.

—Uy ¿la señorita de otro planeta se enojó?— luego de lo que dijo se rió un poco y como dicen que las risas son contagiosas, no me resistí a reír con ella –Bueno está bien te lo explico todo pero en la casa del árbol— habiendo dicho eso retomamos nuestra caminata en dirección a la casa.

—Como digas.

En el camino nos encontramos muchas criaturas más, unas nuevas como una náyades (ninfa del agua) y unas dríades (ninfas de los robles) en mi interior estaba todo maravillado, incluso me pondría a gritar por estar viéndolas, pero en mi rostro simulaba que no eran de mucho interés, y como había dicho Norah hace un tiempo atrás tenía razón deseaba que el lugar volviera a ser silencioso, era como estar en el centro comercial, se escuchaba gente hablando pero no sabes de donde proviene, era igual aquí, voces salían de los árboles y por más que buscaba con la vista se me hacía difícil encontrar los cuerpos de quienes estaban hablando.

Mientras seguíamos caminando reflexionaba, debido a que Norah me dijo que una de mis preguntas ya debía saber la respuesta, creo que se refería al de ¿Porqué los del reino no pueden verlos? si las criaturas que estoy viendo son los Hòuyìns y a estos los cazan, entonces son invisibles, no puedes verlos ni escucharlos, y para poder verlos hay que entrar en ese pequeño charco, si ya entendí, si los soldados los pueden ver entonces se volverá más fácil cazarlos, pero ¿Qué impide romper unas cuantas ramas para entrar a esa laguna?

4:08 PM

Llegamos a nuestro destino y de la misma forma que bajo Norah de la casa del árbol fue la misma forma en la que subió, sus saltos eran altos y con elegancia se posaba en cada rama, mientras tanto yo, subía por la escalera, al estar arriba ella saca un libro grande y ancho.

—Siéntate—ella se sentó en algo que parecía ser una mesa y yo hice lo mismo, me senté en frente de ella.

—No me digas que me vas a contar la historia en ese libro, además creo que es para niños ¿me la vas a contar con imágenes?—Note que la portada del libro era como infantil, yo solo me burle de la manera que me iba a explicar a lo que ella solo puso una cara seria, abre el libro busca una pagina y lo deja en la mesa, increíblemente se iba formando unos cuerpos como si se tratara de un holograma.

Las Crónicas De Liáng: Mundos Distintos [Tomo I]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora