Las Crónicas De Liáng: Mundos Distintos [Tomo I]

Capitulo 8

Viernes: 9:59 AM

Mientras me cambiaba me di cuenta de algo, el pelo de las hermanas, me refiero a que el de Norah era rojo, un hermoso rojo, en cambio la de Lizy era rubio, no sé si son 100% hermanas de sangre porque la genética no ayuda en ese ámbito, o puede que Norah se haya teñido su pelo para no parecerse tanto a ella, aunque se vería igual de linda con un cabello rubio, en mi mente visualizaba a Norah con el cabello de dicho color hasta que me di cuenta de lo que estaba pensando ¿Por qué estoy pensando en esto? no importa no es nada, termino de cambiarme y salgo nuevamente.

—Te ves bien así con esa ropa—Dice Norah, a lo que yo le respondo con una sonrisa—Okay Lizy te toca cambiarte—Lizy sin decir nada obedece a lo que su hermana dice y ambas damas van a la misma habitación en la que estaba, mientras tanto recorría un poco el lugar en el que estaba admirando el paisaje elevado que tenía.

Tome el libro de dibujos de Lizy y lo que coloreaba eran—lo que para mí eran—seres mitológicos, si me pusiera en su lugar, sería como pintar animales de mi tierra, había de todo, elfos, hombres lobos, grifos incluso hasta dragones, solo fue un vistazo de lo que había en este mundo, pero algo no cuadraba, si se suponía que estas criaturas son cazadas ¿Porqué hay un libro con criaturas como estas? se me ocurrió dos cosas, o es un libro con temática de criaturas antiguas o imaginarias —Ya sabes, por lo invisibles—O también podría ser un libro ilegal acerca de estas criaturas que no están permitidas, aunque  por ser un libro para colorear infantil no creo que sea tan ilegal, luego de un rato las dos hermanas salían del cuarto con un atuendo playero, listas para ir a disfrutar del agua.

—Okey vámonos—dice Norah entusiasmada mientras que al igual que su hermana van bajando del árbol saltando hacia las ramas.

Empezamos a caminar en una dirección distinta a la tomada ayer, en estos días vi que el sol salía delante de la casa así que la casa mira hacia el Este, y fue la misma dirección en la que fuimos a aquella fuente donde pude ver a estas criaturas, ocupando esa lógica de donde sale el sol, ahora mismo estaríamos yendo al Norte.

Creo que lo normal—Digo creo porque no tengo hermanos—es que los hermanos menores quieran estar con sus hermanos mayores en vez de estar con alguien que apenas conoció, Lizy estaba a mi lado tomándome la mano como si yo fuera su hermano mayor, me pareció extraño ¿Por qué querría estar conmigo que en vez de su familia?

—Oye Lizy ¿Cuántos años tienes?—Estábamos muy callados así que algo para hablar no sería mal.

—Tengo 7 años—Una voz suave y baja sale de su boquita.

—Ella no se lleva muy bien con otras personas, tú debiste haberle caído bien—Dice Norah mientras seguíamos caminando.

—No sé que tengo de especial para que quiera estar conmigo, toma mejor llévala tú, no es nada solo que no estoy acostumbrado a estar con niños pequeños—Le digo a Norah algo nervioso.

—¡Ja! novato—Norah se acerca a Lizy pero la pequeña sigue sujeta a mi brazo, como si no quisiera separarse de mi—Ya ven Lizy ven conmigo—Ella la tomo de la mano pero aun así ella seguía firme a no dejar de estar a mi lado, no sé qué vio en mi para no querer dejarme.

—Tranquila...ya la llevo yo—Si no podía sacarla de mi lado, bueno ¿Qué más da? pero en la cara de Norah se podía ver su confusión ante el caso.

—Tal vez...—Norah vuelve a hablar pero esta vez en un tono muy bajo, casi susurrando.

—¿Qué?

—Ah no nada sigamos caminando falta mucho todavía—Decía Norah.

—Aaaaahhhhhh ¿en serio falta mucho?—Reacción normal de un niño cuando sabe que tiene que caminar mucho.