Las Crónicas De Liáng: Mundos Distintos [Tomo I]

Capitulo 25

Jueves 4:18 PM

Un día soleado se posaba sobre nosotros y la temperatura ambiente no era tan alta, a mi parecer el clima fue lo más raro del día, ya que nos encontrábamos en un funeral, esperaba cielos nublados o una lluvia torrencial pero no, soleado y sin nubes a la vista.

¿Y en que funeral estamos? Estamos en la de Emma, le hare un resumen rápido de lo que paso anteriormente.

Luego de que partir a buscar la flor, conseguirla y volver para dársela a Emma, pelear con un Yè láng y quedar adoloridos junto con Zack, llegamos al campo para darnos cuenta que Emma ya había fallecido poco tiempo cuando nos fuimos, Norah, Zoé y Zack fueron a verla tumbada en la cama con su piel pálida y llorar en su regazo, todos excepto yo, no tuve el valor de entrar y verla inmóvil, sin decirle a nadie solo me fui a acostar y creo que fue algo descortés e irrespetuoso de mi parte pero no soy lo suficientemente fuerte para entrar y verla muerta y saber que confió su vida en mí, el hecho de saber que he fracasado en la misión que ella misma me dio me hacia sentir fatal, no tarde mucho para quedarme dormido y volver a mi tierra natal, además tenía la excusa de que debía acostarme temprano para levantarme temprano e ir a la universidad pero ellos no saben que soy humano.

Al momento de despertar, las ganas de llorar abundo mi mente, aun cuando me repetía en forma constante que no debía hacerlo, mientras me preparaba y hacía mi aseo personal, lo común del día a día, aunque esta vez, no me sentía solo, en el sentido que escuchaba voces, aquellas voces que suelo escuchar y que me hacen retroceder.

''Eres un fracaso''

''No pudiste hacer una cosa''

''¿Crees que alguien podrá confiar en ti después de esto?''

''Si hubieras sido mejor no estaríamos en esta situación''

''¿Vas a llorar?—Decía una voz en tono burlesco—¿No crees que ya lloraste demasiado?''

Para al momento de salir de mi hogar y caminar unas cuadras, las lágrimas en mis ojos empezaron a brotar, mientras mi cuerpo se movía mi mente también, donde las voces con mensajes pesimistas abundaban y mi conciencia echándome la culpa, fue algo que no pude controlar, creo que así debería sentirse los doctores que no logran salvar a alguien de una cirugía o no poder salvar a un ser humano de un accidente, creo que es una misma situación, uno pone la confianza en que harán un buen trabajo y que podrán salvarte, cierras los ojos pensando que en un segundo los volverás a abrir y esa fue la última vez que pudiste pensar.

Como sabrán, y más con sus amigos, pueden distinguir quien esta triste, pues Ray y Caitlin estuvieron conmigo todo el día incluyendo a Jason, pero no me importaba él en realidad, la excusa que yo les dije es que Sebastián mi padrino murió y me dio pena porque fue el que me cuido cuando perdí mis padres y cosas de que padre no es el que engendra si no el que cría y se lo creyeron, realmente si me entero de que él murió me daría pena pero no al punto de llorar por él, luego de pasar todo el día con ellos volví a mi hogar, ellos se ofrecieron a quedarse conmigo en mi casa pero les dije que no que estaría bien, además tenía que terminar el trabajo que nos dejó el profesor de la universidad por quedarme dormido en su clase.

Y eso fue todo el día, en terminar el trabajo, en la tarde cuando llego Karen ya la pena se me había pasado o eso creí.

Cuando nuevamente volví a Liang supe que nadie había dormido porque organizaban el funeral que fue el día siguiente, es decir hoy, y aquí estamos en un cementerio que estaba en lo alto de una gran colina, todos vestían ropa elegante excepto yo, Norah me consiguió una polera negra y jeans negros, fue lo más elegante que pude estar, llego mucha gente lo cual me sorprendió, al momento de despedirla realmente estábamos ordenados donde habían sillas en filas y los más conocidos se ponían al frente donde estaba la familia de Norah y los invitados se ponen al final, Norah me invito a estar adelante con ellos pero sentí que no me merecía estar al frente, me pare atrás del todo observando el funeral, tenía una mirada triste y solo miraba al suelo.