Dear President Kim || TAEKOOK

VII

57 días para dejar el trabajo.

Un día más. Siempre la misma historia.

Taehyung me abrió la puerta y yo entré, no le miraba a los ojos, no podía después de aquella conversación.

—Llegas un minuto tarde.

—Lo siento presidente Kim. - dije preparando el café.—Por favor vaya a ducharse.

Sin decir más Taehyung me hizo caso, y siempre se repetía lo mismo, yo preparando sus cosas, Tae entrando después de ducharse y luego al salir me da su corbata para ponérsela.
Sentía su mirada encima de mi, qué pretende conseguir con eso?

—Secretario Jeon.

—¿Sí? - dije sin apartar la mirada de la corbata.

Taehyung estaba molesto por eso, odia que no le miren a los ojos, llevo años trabajando para él, lo conozco mejor que nadie.

—Había pensado que después del trabajo podíamos parar en un sitio y tomar algo.

Le miré, sorprendido.

—¿Me está usted invitando a una cita?

—Algo así.

—Una cita gay.

—No es una cita.

—Antes lo afirmó. - le dije.

Taehyung se quedó callado una vez más y yo seguí.

—No podemos, tiene muchos papeles que firmar hoy presidente. - me alejé. — Y yo estoy ocupado cualquier día de la semana por culpa de alguien que yo sé, por lo tanto búscate a otro. - sonreí. —Vámonos, el chofer nos espera.

Taehyung apartó su mirada molesto, mientras que yo caminaba hasta la puerta y la abrí, esperando a que saliera para que yo pueda seguirle.

Llegando al coche Tae entró, poniéndose en la parte de atrás y yo delante.

—Secretario Jeon.

—¿Sí? - Sonreí.

—Póngase a mi lado.

Intenté calmarme. — Pero, presidente, debo salir para poder abrirle la puerta, por lo tanto tengo que estar delante.

—¿Quién le obliga hacer eso?

—Usted. - le miré serio. – Lleva años obligándome.

—Póngase a mi lado.

—Presidente Kim.

—Póngase a mi lado secretario Jeon.

Cerré la puerta del coche fuerte, el chofer se asustó pero Tae no. Me fui directo a la parte de atrás y me puse a su lado. Taehyung poniendo su mano sobre mi rodilla.

—Dale chofer. - dijo contento.

Suspiré.

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—Presidente Kim. ¿Dónde vamos?

Pregunté, al ver que pasábamos de la empresa y seguíamos yendo hacia delante, sin saber qué trama ese hombre.

—Presidente Kim, dónde me lleva, pregunté. - Volví a decir.

—No te llevo yo, sino el chofer.

—¿A órdenes de quien?

—Mías.

—¿Entonces? - dije ya enfadado.

—Te llevo a un parque para pasear.

—¿Un parq - No podía creérmelo. —Kim Taehyung, vuelve ahora mismo a la empresa por favor.