I.R.A (Internado de Rehabilitación para Adolescentes)

I.R.A.

I.R.A.

-Hace dos días, a las cuatro de la mañana aproximadamente, yo, Arabella Stone, sufrí el ataque de un hombre, en el bar nocturno “La boca del Lobo”, el cual abuso sexualmente de mi -respire hondo- luego del echo ingerí un tipo de pastillas, las cuales provocaron que me desmayara, mi amiga Regina me trajo a emergencias con unos amigos más. Al llegar al hospital los doctores dijeron que si no hacían algo rápido podía morir y por eso me hicieron un lavado de estomago. Estuve inconciente un día entero, y hoy a las nueve a.m. desperté.

-¿Algo más que quieras agregar Arabella?

-Nada más. -respondí para finalizar mi conversación con el psicólogo del hospital.

Estuve una hora tirada en la camilla sin hacer nada, el horario de visitas ya estaba por comenzar.

Mi madre entro con su característica sonrisa forzada, con bolsas en los ojos, era completamente extraño verla sin su teléfono en la mano ni sus caros vestidos.

-Cariño, te traje comida que hizo Marta -nuestra ama de llaves- se que no te gusta la comida de hospital.

-Gracias- dije en un susurro.

-Necesito hablarte de algo -moví mi cabeza en señal de afirmación mientras que metía un bocado de calabaza en mi boca- con tu padre hemos hablado, e iras a I.R.A.

La mire con confusión -¿I.R.A? yo no tengo problemas de ira ¡tengo problemas con el alcohol las drogas y que no me puedo defender de un hombre que esta intentando violarme! -grite, estaba frustrada, enojada ante todo.

Se aclaro la garganta, y se que ella quería gritarme, siempre hace eso para no explotar.

-Cariño, no es un internado de ira, es una abreviación de “Internado de Rehabilitación para Adolescentes”.

Iba a decir que estaba bien, pero mi estupido cerebro proceso todo, ¡Ellos querían internarme!

-¡NO! No pueden hacerme eso ¿internarme a mi? No y no ¿y la escuela? ¿Y mis amigos? ¿¡MI VIDA!?

-Voy a remarcarte todo con lentitud, primero la escuela a ti te importa nada, segundo ¿amigos? ¿Esos tipos y la tipita son tus amigos? ¿O son tus amigos por que te proporcionan buena droga y barata? No me vengas con estupideces a mi Arabella, iras al internado te guste o no.

La mire intentado desafiarla, pero sabia que esta vez hablaba en serio, esta vez si me iba a prestar atención, iba a comportarse como una madre de verdad.

Al día siguiente volví a casa, pero lamentablemente no para quedarme. Empecé a empacar. A las ocho p.m. tenemos que estar ahí, en el puto “I.R.A”.

***

Miraba mi relejo en el espejo del baño color celeste, mi “uniforme” consistía de una camisa bastante holgada y unos pantalones que me quedaban inmensos ambos color verde manzana, y unas pantuflas bastantes cómodas y calentitas, pero totalmente carentes de color vivo.

Salgo del frió cuarto y me dirijo nuevamente a la recepción del gran edificio.

-Bueno, Arabella Stone -dice la mujer regordeta, mirando la pantalla de la computadora que esta detrás del mostrador- tu cuarto es el 282, esta en el segundo piso, ala violeta. Seguramente tendrás una compañera, los jueves son días informales -decía todo monótonamente, como si lo repitiera veinte veces al día- la hora del desayuno, el almuerzo y la cena están en esta planilla -me alcanza unos papeles- aquí también explica lo del horario de visitas, las horas de llamadas y otras cosas -asiento, mi madre ve y escucha todo desde una banca atrás mió- aquí tienes tu otra muda de ropa -deposita una bolsa con otro uniforme idéntico al que tengo puesto- necesito que me des todas tus pertenencias, ponlas en esta caja cariño -la caja es de color violeta, tiene el numero de mi habitación y mi nombre, la mujer levanta la vista- ¡Emily, cariño! Ven por favor -doy vuelta mi cabeza para ver a la tal Emily, me sorprendo al ver una muchacha de pelo color rosado- necesito que le muestras a Arabella el lugar -la chica asiente, pero no habla- bueno cariño -esta vez se dirige a mi- nada de celulares, objetos afilados, ni encendedores, la caja será guardada y se te dará el día que te vallas. Señora Stone ¿quiere firmar los últimos papeles, por favor?