Admirador Secreto (Malec)

Capitulo 22

El martes por lo menos parte de la mañana había pasado de manera normal, y ahora en la hora del descanso me sentía un tanto incomodo en la cafetería, sentía como si me estuvieran viendo, aunque en el fondo sé que realmente nadie lo hace y todo mundo está en sus asuntos, pero yo lo siento así, solamente me quería ir de ahí, y más cuando lo vi entrar con Camille prácticamente colgada de él.

-¿Por qué no intentas hablar con él?- me dijo Clary en voz baja

-No- respondí automáticamente- ya no quiere saber nada de mi

-No pierdes nada con intentar

-¿Quién dice que no?

-Es fácil para ti decirlo ¿no?

Me puse de pie y me fui de ahí mientras escuchaba como Isabelle me gritaba y todo el mundo volteaba a verme, sentía que había pasado una eternidad ahí adentro, aunque realmente habían sido máximo diez minutos, así que mejor me fui a caminar por la escuela para poder despejar mi cabeza.

Claro que quería hablar con él, quería arreglar todo esto, quería explicarle muchas cosas, especialmente el por qué había hecho todo esto, pero sabía que nunca me haría caso y solamente terminaría humillándome más frente a todos, aunque tal vez podría escribirle una carta… bueno pensándolo mejor creo que no sería tan buena idea dado que por algo parecido termino todo esto así.

El resto del día me la pase pensando en la idea de que enviarle una carta, si bien podía ayudar a arreglar todo también podía empeorarlo todo, pero supongo que Clary tiene un poco de razón al decir que no pierdo nada en intentarlo… bueno quizás solamente mi dignidad y seguridad aunque siendo sinceros ya no sé si tengo algo de eso, así que en cuanto termine de cenar me encerré en mi habitación para poder escribir la carta, y realmente no sabía que poner, no sabía que escribir para que enserio entendiera todo lo que quería decirle en esos momentos, todo lo que quería explicarle y hasta el momento llevaba por lo menos cinco hojas arrancadas, hasta que logre por lo menos usar lo que para mí fueron las palabras correctas.

Hola Magnus

Bueno solamente hago esto como la única esperanza de poder “hablar” contigo sobre lo que paso.

Honestamente no entiendo por qué hiciste eso y enserio que, si hice al malo o algo que te molestara de verdad lo lamento, tu enserio me gustas y el hacerme pasar por tu admirador fue la única manera que encontré para poder acercarme contigo, y ni siquiera sabía si funcionaria, pero si paso y créeme que fueron los días más felices que tuve… por lo menos para mí porque a estas alturas dudo mucho que lo hayan sido para ti…

Solamente quiero disculparme por haberlo hecho, lo menos que quería era causarte problemas o molestias, de verdad lo siento y de verdad lamento si te hice pasar malos momentos, enserio lo siento, espero me perdones por todo lo que haya hecho mal.

Atte. Alec L.

En cuanto terminé de escribirla arranque la hoja la doble y la metí en uno de mis cuadernos para después meterlo a mi mochila.

Al día siguiente igual me fui con ellos como lo había estado haciendo los últimos dos días sin embargo iba pensando en la carta, aun creía que no era una buena idea dársela, pero quería hacerlo, debía hacerlo, si quería arreglar todo esto tenía que dársela.

-¡Alec!- me grito Jace

-¿¡Que!?- grite volteándolo a ver por el espejo

-¿Hiciste el cartel?- pregunte y solo lo mire con confusión- el que teníamos que enviar por correo al maestro para hoy

-Ah, sí lo hice y también lo mandé

-Te debo una- dijo guiñándome el ojo

-Me debes muchas- respondí y solamente se comenzó a reír

Solo rodé los ojos y regrese a seguir viendo el camino por la ventana, debo admitir que desde que me levante tengo un mal presentimiento, quizás sea por la carta o quizás sea otra cosa pero con lo que sea, enserio espero equivocarme y que no suceda nada malo, pero ya lo he dicho antes la mala suerte me persigue.

La primera clase que teníamos era justamente la del cartel que teníamos que mandar y honestamente estaba nervioso, no era el mejor trabajo que haya hecho y dudo mucho que tengamos buena calificación, además todos los que ha revisado hasta ahora están mejor que el nuestro aunque tengan errores.

-Bueno, quiero pensar que el nuestro es perfecto- susurro Jace aunque al parecer no lo suficientemente bajo

-Yo no estaría tan seguro de eso Herondale- hablo el profesor molesto y automáticamente me encogí en mi asiento- su trabajo fue el peor de todos

-¿Pero por que?- respondió molesto Jace

-Jace…

-¿Enserio lo pregunta?, no les pedí algo tan difícil, les pedí el trabajo con ciertas especificaciones las cuales no están- esto era peor de lo que pensaba- no puedo creer que sean tan inútiles como para entregarme un trabajo así a estas alturas de la escuela

-Lo siento- susurre

-Le digo de una vez que esta reprobado en el semestre asi que ni se moleste en seguir viniendo- continuo y luego volteo a verme a mi- y para usted es lo mismo Lightwood, es realmente una decepción lo que hizo

Simplemente asentí, sabia que era una estupidez, pero comenzaba a sentir un nudo en la garganta y mas al ver que la mayoría del salón se estaba burlando, sabia que Jace estaba demasiado enojado y mas al momento en que agarro sus cosas y se fue; me tarde unos momentos en reaccionar para después levantarme con mis cosas e ir tras él.

-¡Jace!- le grite mientras corría tras él- -¡Jace!

-¿¡Que!?- se giro a verme haciendo que me detuviera de golpe- ¿¡ya viste lo que acaba de pasar!?

-Lo siento, enserio lo siento

-Por mas que te disculpes, eso no va a cambiar lo que paso

-¡También pudiste haberme ayudado!- le grite enojado- yo siempre hago todo

-Lo haces por que quieres, yo te ofrezco mi ayuda y tu la rechazas por que no me crees capaz de hacer un buen trabajo, ¿Cuántas veces nos he salvado por que te quedas dormido haciendo tarea?

-Yo…

-¿¡Cuantas!?

-V-varias- automáticamente retrocedí, tenia razón, esto había sido mi culpa, pude haberle pedido ayuda pero no lo hice- lo lamento

-Basta no quiero pelear- dijo apretando los dientes

-Enserio lo siento, p-prometo que te ayudare a estudiar

-No gracias, para lo que acaba de pasar mejor lo hago yo solo

-Jace…

Simplemente se dio la vuelta y se fue, no era la primera vez que peleábamos así, sin embargo era la primera vez que me sentía tan mal y tan culpable por lo que había pasado, por que si había sido mi culpa, tenia razón el maestro al decir que era un inútil por no poder hacer lo que había pedido y tenia mas razón Jace al enojarse conmigo.

Había comenzado a enterrarme las uñas en las palmas de las manos tratando  de tranquilizarme para no quebrarme en ese momento, todavía me quedaba un largo día y después de esto, dudo mucho que sea una buena idea entregarle la carta a Magnus, así que mejor me iría a encerrar a la biblioteca un rato para estar solo…

-¿Estas bien?- escuche una voz a mis espaldas que me hizo detenerme de golpe y voltear, Magnus- Escuche tu pelea con Jace, ¿todo bien?

-¿Q-que?- pregunte confundido y después reaccione- A ti que te importa de todas formas

-Alexander…

-Tu dijiste que te dejara en paz y eso hago

-¡Estas sangrando!- me grito y voltee a ver mis manos, supongo que no había medido mi fuerza

-Estoy bien

Fue lo ultimo que le dije antes de aventarlo e irme al baño a enjuagarme, si bien no era tanta si era algo considerable, me había abierto con las uñas un poco en las dos manos y al tenerlas apretadas se había acumulado la sangre en ellas, así que me eche agua hasta asegurarme que parara la sangre y después ponerme un poco de papel con cinta por lo menos en la derecha que era la que mas me había lastimado.

Una vez termine de hacerlo seguí mi camino a la biblioteca, sabia que tenia otra clase en una hora pero aun así me quede ahí hasta la hora del descanso, esperaba que Isabelle me mandara un mensaje buscándome, pero no fue así…, ninguno de los tres lo había hecho, supongo que Jace les había dicho lo que había pasado y no querían que nos volviéramos a pelear.

-Eso o simplemente no te quieren ahí- otra vez mi voz – se honesto es lo mas probable

Quizás tenga razón, suena lógico que no quieran que este con ellos, últimamente siento que nada mas les estorbo, que les molesta que este ahí, y solo lo hacen por educación o simple compromiso y ahora tienen el pretexto perfecto para hacerlo.

Antes de regresar a mis clases fui al baño a volverme a enjuagar las manos, había sido una estupidez el por que me había lastimado y no quería que se me infectara o algo parecido, aunque quizás eso me enseñaría a dejar de hacer estas tonterías.