Cap 13

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Narra Alexander:

Me sentía el hombre mas feliz del mundo, no podía borrar la enorme sonrisa que mi rostro tenia.

Cada vez que tocaba mi corazón sentía como este palpitaba desenfrenadamente, pues Bane era el motivo de dicha acción.

Me encontraba caminando por los pasillos del instituto buscando mi habitación hasta que vi a Izzy.

-Y esa sonrisa Alexader, seguramente fue Magnus- hablo provocando que volviera a sonreir al escuchar su nombre.

- No se de que hablas - conteste como si aquello no tuviera relación.

-Cada vez que los miro a ustedes, recuerdo como fue que  mi hermano y su esposo iniciaron su relacion, y eso me trae hermosos recuerdos, espero que a ustedes todo les valla bien - dijo regalandome una dulce sonrisa para luego comenzar a caminar.

-Como lo supiste- hable deteniendo su andar.

-Los vi desde mi ventana- contestó soltando una pequeña risa, para luego dejarme solo.

Era la primera vez que sentía como mis mejillas ardían, pues ahora no sabia quienes mas pudieron habernos visto.

Narra Bane:

Pasaban los días y cada vez me sentía mucho mas seguro al utilizar  mi magia, ya que podia hacer las cosas sencillas.

Magnus se encontraba delante mío, pues hoy tendriamos un nuevo entrenamiento, para ser sincero me sentía ansioso pues esperaba con ansias tener el control total de mi magia.

-Bane preparado- dijo mientras se acercaba a mi.

-Creo que si- conteste con seguridad.

El me miró para luego sonreír de forma sarcástica, pues de un momento a otro Magnus comenzó a  lanzarme uno de sus echizos, provocando que cayera al suelo.

- Eso no es justo - conteste mientas trataba de levantarme, en cambio el comenzaba a reírse de mi.

Cuando estuve completamente de pie solté un hechizo contra el rápidamente, provocando que también cayera al suelo.

-Ves que aquello no es justo- dije mientras reía a carcajadas, provocando que el rodara los ojos.

- No es justo por que yo soy tu maestro- dije con el seño fruncido.

Cuando Magnus estuve de pie trató de volver a lanzar otro hechizo, pero llegó Alec justo en ese momento evitando que el lo hiciera.

-Hola cariño- dijo Alec a su esposo, para luego acercarse a él y besar sus labios de forma tierna, provocando que de alguna manera sea yo el que terminara un poco sonrojado, pues cada vez que los veía a ellos me hacía pensar en lo mío con Alexander.

Al terminar  de besarse Magnus susurro algo a su esposo haciendo que este volteara a verme, para luego asentir  y dirigirse hacia mi lado.

- Bane tu crees que te encuentras listo para ir hacia el portal y tratar de activarlo-  dijo de forma seria mientras cruzaba sus brazos  sobre su pecho.

Lo miré a los ojos un poco sorprendido, pues sabía que aún no podía controlar mi magia como lo hacía Magnus, pero aún así quería intentarlo.

Mientras pasaban los segundos sentía como mi saliva raspaba mi garganta, pues esta trataba de pasarse el nerviosismo que mi cuerpo sentía.

-No lo sé, Magnus ¿crees que estoy listo? - pregunté esperando a que su respuesta sea positiva, ya que esta calmaria los nervios que sentía.

Magnus me miró y sonrió mientras se acercaba hacia nosotros, colocándose al lado de su esposo.

-Si lo estás, con lo que acabas de hacer me mostraste que ya te encuentras  listo para ir y activar ese portal- hablo para luego darme unas palmaditas en el hombro, tratando de darme ánimos.

Asenti a lo ambos decían para luego hablar - lo haré, vayamos a activar ese portal- dije de firmemente.

Ambos sonrieron y comenzaron  a hablar cosa que yo no pude entender, pues mis oídos dejaron de escuchar todo lo que tenía a mi alrededor.

Miles de imágenes comenzaron  a aparecer en mi cabeza mientras se mezclaban, ya que si Alexander y yo nos íbamos a casa ya no los volveríamos a ver a ellos nunca más.

Terminamos el entrenamiento más temprano de lo normal, pues Magnus  había sugerido que fuéramos esa misma noche al portal.

Cuando salí de su departamento comence a caminar dirigiéndome solo al instituto, ya que Alec quería estar a solos con su esposo unos minutos más.

Mientras caminábamos sentía como el frió de la noche recorría mi cuerpo, miraba a cada lado pues sentía como alguien me observaba desde lejos.

Mi cuerpo  comenzó a correr involuntariamente, ya que un miedo comenzó a crecer en mi interior, pero no llegando muy lejos alguien salió de la oscuridad acercándose a mi lado.

-Bane te encuentras bien- escuché la voz de Alexander, el susto había desaparecido convirtiéndose en un enojo.

-Como te atreves a asustarme de aquella manera- reclame mientras fruncia el seño.

-Solo quería darte una sorpresa- contestó  con una sonrisa en el rostro.

-Eres un idiota- dije para luego acercarme a él y darle un abrazo, pues aunque me había asustado ya no sentía miedo, porque ya no me encuentraba solo.

- Pero aún así me amas- dijo aceptando mi abrazo para luego acurrucarme en su pecho.

-Alexander talvez pronto volveremos a nuestra dimensión  - solté derrepente, ya que el también debía de saber aquello.

- Enserio- dijo con la voz animada,  pues sabía muy en el fondo que el extrañaba a su hermana.

-Pronto iremos a casa- susurre para luego comenzar a caminar pues solo faltaban  un par de horas para saber lo que el futuro nos tenía preparado.
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