Marry Me | NamMin | (PAUSADA)

Capítulo 14 - Back To The Past.

Un pequeño JiMin de ocho años corría por los pasillos de su hogar en busca de su madre, para mostrarle la linda mariquita que había encontrado, al llegar a la entrada encontró a la mujer en frente de dos hombres trajeados que de inmediato no le gustaron al menor, quien se escondió detrás de las piernas de su madre, dejando a la mariquita libre.

—¿No nos pueden dar más tiempo?

—Lo siento señora, ya les hemos dado mucho tiempo.

—De acuerdo, gracias.— susurró JaeHye cerrando la puerta lentamente, JiMin notó las mejillas redondas de su madre empapadas de lágrimas.

—¿Estás bien, mami?— preguntó inocentemente tirando de su vestido para llamar su atención.

—Sí cariño, estoy bien, ve y busca a Rosé, la comida está lista.— JiMin asintió entusiasmado y fue en busca de su pequeña hermana, con a penas tres años, Rosé era una pequeña muy inteligente, al ver a su hermano entrar en la habitación sonrió.

—¡Comida!— gritó ella saliendo del lugar primero que el mismo JiMin.

El pequeño de cabello negro se encogió de hombros y fue con ella hasta el comedor, donde yacían sus padres sentados hablando.

JaeHye tomó a Rosé en sus brazos, ayudándola a llegar hasta su propia silla, JiMin tomó asiento y comenzó a servirse.

—¿Qué se supone que haremos ahora, SooMin? Nos vamos a quedar sin casa, sin un hogar, tenemos dos niños pequeños, ¿qué vamos a hacer?— JiMin observó a su madre llorar nuevamente.

—Rosé no tomes eso, no es tuyo.— comenzó a discutir el pequeño con la menor, ignorando todo lo demás.

—Tranquila cariño, lo resolveremos, te aseguro que lo haremos.

—No te he dicho algo.— susurró JaeHye con la voz rota, su marido la miró frunciendo el ceño.—Me despidieron.

—¿De qué estás hablando?

—Hace dos semanas, me despidieron del trabajo, he estado buscando pero nadie quiere contratar a una embarazada sin títulos universitarios, tampoco me quieren para la limpieza, no encuentro ninguna salida, ya no puedo más.

—Cariño, ¿por qué no me lo dijiste?

—No quería preocuparte.

—JaeHye, vamos a superar todo esto, ¿sí?

—Esta casa vio crecer a nuestros hijos, nos vio en todos los momentos felices, en los tristes y en los divertidos, nos vio crecer como familia, no quiero dejarla, es nuestra, no es justo.

—Ya sé que no es justo, ven aquí.— SooMin abrazó a su esposa.—Deja de llorar, le hará mal al bebé.

JiMin comía sin dejar de ver a sus padres, de vez en cuando ayudaba a Rosé, quien se ensuciaba más con cada bocado.

—Papá.

—¿Qué pasa, MinMin?

—¿Por qué mamá está llorando? ¿Hice algo malo? Puedo solucionarlo.— la barbilla de JiMin comenzó a moverse, signo de que lloraría en cualquier momento.

—No cariño, no hiciste nada malo, mamá está pasando por un momento difícil, termina de comer, ¿sí?— respondió JaeHye con la voz ronca.

JiMin solo asintió levemente.

Los días pasaron, SooMin intentaba encontrar un segundo trabajo para ganar más dinero y lograr que el banco no les quitase la casa, y para qué, aquellas personas insensibles querían vender la propiedad a los Kim para que hicieran allí otro restaurante, la rabia calentaba la sangre de los Park.