❝ ONE SHOTS LEMMON: MORTAL KOMBAT❞

Smoke x Jade.

Cerro lo ojos mientras se dejaba caer entre la oscuridad, sus labios estaban siendo acariciados por las suaves manos de aquel hombre de humo. Sonrió cálidamente mientras abrazaba a su consorte por la espalda; su cuerpo se tenso al sentir el cuerpo de Smoke sobre el suyo.

No era la primera vez que se entregaban al otro, pero siempre sentía la misma pasión al hacerlo. Era por la única razón de que lo que sentían por el otro era completamente real y demasiado sincero.

Jade recordó cuando se conocieron, en aquel viejo torneo de Mortal Kombat, la primera vez que había mirado a los orbes grises del checo, sintió que había algo en el que la cautivaría de por vida, pero en ese entonces no estaba del todo segura.

Pues Jade aun no lo conocía, tampoco podía sacarle los ojos de encima, era realmente perfecto; su mandíbula tallada, sus ojos grises y brillantes, su mirada seria y su acento checo que podía enamorar a cualquier mujer con solo soltar un suspiro. Y Jade lo aceptaba, el era lo mas hermoso que había conocido, era silencioso, sincero y muy amable.

Y ¿que pensaba Smoke de Jade?

El solo podia pensar en sus curvas, en su voz tan fina, en su cuerpo tan delineado, en su sonrisa tan perfecta, y en su piel morena y tan tersa. La edeniana también había conquistado al Lin Kuei, ella con solo hablar lo hacia caer en una eterna fantasía, pues no existía nada mas para el que su amada presencia.

(......)

Luego de tantos años las cosas habían cambiado, y habian perdido el contacto del otro, luego de la muerte, ninguno se había vuelto a ver. Y era totalmente triste, porque aun recordaban el aroma del otro, porque recordaban sus labios y sus cuerpos.

Smoke había terminado siendo una maquina, una mente distinta, pero de igual forma, en su interior frió y sereno, aun estaba el recuerdo de Jade.

Por su lado, la edeniana había caído directo a los brazos de otro hombre, de un Kahn, de un Azteca y gran hombre.

Ella simplemente habia querido llenar el vacio que Smoke habia dejado en su blando corazon, solo queria sentirse fuerte, pero ninguna noche se habia resistido a derramar lagrimas, nunca podia dejar de pensar en el cabello lacio, en la voz y en los ojos de el amor de su vida.

Kotal jamas podría remplazar el amor de su Lin Kuei.

Y lo peor de todo era que no sabia si lo volvería a ver, no sabia si lo volvería escuchar, a abrazar, solo quería tocar sus labios otra vez, solo quería acariciar su rostro y besarlo lentamente por el cuello.

Pero de nuevo, no aseguraba nada.

Asique sin mas, se dejo caer sobre una enorme cama mientras lloraba, mientras sentía su pecho arder y sus ojos derramar lagrimas infinitas.

  Y sin mas, su cuerpo se desplomo sobre la gran cama mentras caía en un profundo sueño.

                                                          (......)

  Al entrar en la oscuridad de su mente; una imagen aclaro su memoria: a su lado dormía un Smoke muy plácidamente sobre la gran cama; Jade acaricio su frente con ternura mientras le dejaba pequeños besos alrededor de su cuello, el Lin Kuei despertó tomando entre sus brazos a la bella edeniana, mientras la miraba penetrante con sus orbes grises. Jade sonrió con melancolía y comenzó a besar a su amada con mucha pasión, nada podía separarlos, su amor era tan grande como el mismo universo, su amor recorría sus venas, su pasión era eterna. Jade jamas había conocido un amor tan grande, jamas había vivido en una fantasía de esa magnitud, jamas se había sentido tan viva al besar a alguien.