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El día siguiente...

|JIN CORPORATION|

Era sábado, pero los negocios seguían como siempre, Los empleados del fin de semana comenzaron a ingresar al edificio de la compañía.

Jin Liwei, como Presidente y CEO, no necesitaba venir a trabajar durante los fines de semana, pero venía cuando quería terminar algunas tareas, lo cual era casi siempre.

Esa mañana, Jin Liwei se despertó sintiendo que todo en el mundo era muy bueno, el cielo era de un hermoso color azul cobalto decorado con tenues nubes blancas, el sol brillaba y los pájaros cantaban.

¡Ah, qué mundo tan maravilloso!

Su cuerpo se sentía ligero y enérgico, si no fuera por su imagen, habría saltado felizmente mientras caminaba, sentía que podía enfrentarse a cualquier cosa hoy. ¡Vamos!

Desafortunadamente, no tenía idea de que su buen humor tendría efectos tan graves en sus empleados.

Durante todo el día, todos en la empresa estaban aturdidos; comenzó temprano en la mañana cuando algunos empleados saludaron al presidente de su compañía como de costumbre cuando lo vieron llegar al vestíbulo.

-Buenos días, presidente ―saludaron, inclinándose.

Entonces el rey Yama... quiero deicir, su presidente Jin hizo algo inimaginable. Disminuyó la velocidad, asintió, sonrió ampliamente y en realidad los saludó. 

-Si, Buenos días a todos.

Fue como si una flecha fuera disparada directamente a sus corazones.

Los empleados no preparados inmediatamente se congelaron, muchos dejaron caer sus maletines y carpetas de archivos, mientras que alguien dejó caer su café, manchando el prístino piso blanco. Sin embargo, nadie notó este sacrilegio en el piso de su compañía porque los ojos incrédulos de todos siguieron la parte posterior de su gran jefe cuando desapareció detrás de las puertas del ascensor.

Muchos empleados desafortunados que se encontraron con el presidente de su compañía en el camino fueron golpeados por su sonrisa impactante, pensaron que su aura eternamente glacial y su formidable liderazgo ya eran lo suficientemente viciosos, pero nunca imaginaron que su sonrisa sería tan mortal para sus pobres corazones mortales.

¿Que pasó?

¿Era el fin del mundo?

¿Murieron y esta fue la otra vida?

¿Era este el paraíso o era este el infierno?

Los cielos eran realmente injustos, la sonrisa de su presidente podría ser un arma de destrucción masiva.

Las empleadas que ya lo consideraban como su hombre ideal elevaron aún más su posición en sus corazones al más ideal de todos los hombres ideales en el universo (todos, tomen un momento de silencio para sus pobres novios y maridos que nunca serían tan bueno como su gran jefe). Y los empleados del otro equipo se volvieron aún más homosexuales (¡aleluya!).

Desafortunadamente, este día se convirtió en el más improductivo en la historia de la empresa desde su creación debido a la peligrosa sonrisa de su presidente.

|LA OFICINA DE JIN LIWEI|

La boca de Xu Tian se crispó cuando vio a uno de los altos ejecutivos salir de la oficina del presidente aturdido, el pobre hombre estaba tan aturdido que caminó directamente hacia el ascensor sin darse cuenta de Xu Tian.

Normalmente, habría reprendido a cualquier empleado que lo ignorara porque era la mano derecha del presidente, su estado en la empresa era básicamente inferior al del propio presidente, a pesar de que no tenía un puesto oficial en la empresa.

Esta vez, sin embargo, Xu Tian solo suspiró y sacudió la cabeza.

Desde que el presidente pasó un tiempo a solas con la señorita Long en el auto anoche, su jefe había estado de muy buen humor.

Aunque no lo vio por sí mismo (¡y gracias a Dios por eso!), tuvo una idea de lo que sucedió entre los dos en función del estado de ánimo feliz de su jefe.

No lo malinterpretes, como asistente, era feliz cada vez que su jefe se sentía feliz.

Sin embargo, mirando las cosas hoy, el obvio buen humor del Presidente, como lo demuestra su rara sonrisa, pareció tener efectos negativos para los empleados, si esto continuaba, la compañía estaría en problemas, eso sería trágico.

Xu Tian no entendió por qué su jefe de repente se obsesionó tanto con la señorita Long; por lo que recordaba cuando el presidente le ordenó que investigara y supervisara a la señorita Long después del accidente hace dos años, estaba seguro de que su jefe se sentía disgustado con la joven por perseguir al Segundo Maestro.

Ahora parecía que era el presidente el que perseguía a la señorita Long.

¿Qué pasó entre los dos? ¿Cómo es que Xu Tian no notó nada?

¿No fue esta inversión demasiado repentina?

Oh bien. Solo tenía que hacer su trabajo, no era su lugar interferir con la vida amorosa de su jefe.

Al abrir el navegador de Internet en su computadora de trabajo, escribió "Iris Long" en el motor de búsqueda. Un ceño se formó en su rostro después de leer durante unos minutos.

Agarró el teléfono y marcó.

-¿Hola? Este es Xu Tian de Jin Corporation. ¿Puedo hablar con el Director He?


H. G. W. I. A S. |1|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora