Narra Lisa:
No se ni como, pero Jennie me había convencido de traer a Rose a casa. Y es que, se lo había repetido mil veces por lo menos... ¡no me caía bien! Pero Jennie, dale que te dale... al final, cedí y estábamos con la parlanchina de Rose al lado. Nos contaba cosas de gatos que no escuché. Lleguemos al portón y Jennie abrió la puerta y rió de los chistes que contaba la pelirroja. Cuando subimos a la casa, Rose y Jisoo se quedaron mirándose por unos segundos, hasta que Jennie se metió por medio.
—¡Bueno, Rose, esta es mi casa!—Dijo Jennie. Rose no pareció escucharla. Estaba re fijada en Jisoo—¡¿Roseee?! ¿Wea me estás escuchando?
—S-si—habló por fin Rose. Yo suspiré. Lo que me faltaba... que Rose fuera lesbiana y que me robara a Jennie—.
Rose se sonrojó (que gracioso, Rose, se sonrojó porque es rosa xD :v) y Jennie se giró a ver a Jisoo, que también estaba sonrojada. Jennie hizo una mueca, pero al final, acabemos Rose, Jennie y yo sentadas en la alfombra de su habitación. Rose tenía la cabeza en las nubes y Jennie se dedicaba a jugar con la pulserita que le regalé el otro día.
—¡Me aburro!—se me escapó. Las dos chicas levantaron la cabeza y me miraron.
—Te jode-—Rose estuvo a punto de decirlo cuando me levanté de golpe. Encendí la televisión de la habitación de Jennie y me puse a verla—bueno...
Jennie y Rose se pusieron a hacerse trencitas mientras que yo veía la televisión. Jisoo, entró a la habitación para recoger unas cosas, pero acabaron: Rose trenzando el pelo de Jennie y Jisoo trenzando el pelo de Rose. Me llamaron para que me uniera a la cadena, el aburrimiento me pudo y acabé haciéndole trenzas a Jisoo. Jisoo tenía el pelo negro y brillante, Rose era pelirroja y tenía el pelo despeinado, porque Jennie no podía desenredarlo, Jennie, tenía ese pelo castaño que tanto me gustaba, porque cuando ella estaba al sol, se veía tan bonito... y a la sombra también. Yo tenía el pelo pelirrojo comomRose, pero más tirando a rubio. A veces me gustaría tener el pelo brillante como Jisoo... Total, que nos hicimos unas trenzas preciosas y, al final de la tarde, nos hicimos las mejores amigas que pude tener. No se cómo, nos convertimos en inseparables amigas... La sirvienta marcho a hacer la cena y Rose se fue, no sin antes besar a Jisoo en la mejilla. La madre de Jennie estaba en serios problemas... estaba realmente rodeada de chicas que le gustaban chicas.
—¡Lisa!—Jennie se me tiró encima para hacerme cosquillas y no pude aguantar. Nos pusimos a reír y a mí casi me faltaba la respiración.
—¡Ay! !Jennie! ¡Ay!—dije, no solo por las cosquillas, si no porque tenía a Jennie encima y pesaba lo suyo. Ella paró de hacerme cosquillas para besarme y nos embarquemos en una guerra de besos. Nuestros labios se movían al compás y notaba como me iba excitando. Jennie tenía un extraño poder, con un solo beso podía hacer que mi temperatura corporal subiera a mil. Cuando nos separemos, por falta de aire, miré a Jennie a los ojos. Se la veía, de nuevo, tan indefensa... tan inocente, tan tierna... tenía que hacer algo.
Ataque su cuello y empecé a dejarle marcas, conocidas como chupones. Su temperatura también subió y las dos estábamos muy calientes. Menos mal que nuestra madre se había ido a trabajar, porque los gemidos de Jennie estaban subidos de tono.
—¡Aaah~!—exclamaba cada dos por tres—L-Lisa~
Yo solo seguía dejando marcas. Una vez hube marcado su cuello entero. Volvimos a besarnos, pero esta vez con lengua. Jennie empezó a mover sus caderas en círculos por encima de mi intimidad. Jennie sabía lo que quería. Y lo iba a conseguir.
—Jennie~—dije.
No se como acabemos... no se como nadie se dio cuenta de lo que Jennie y yo hicimos. Y lo peor, era que nos tiremos hasta las tantas de la noche haciendo... Cosas... bueno, teníamos instituto. Al intentar levantarme, me choque con lo que parecía ser el suelo. Había dormido en el suelo de la habitación de Jennie. Me levanté por completo y me dolía muchísimo la cabeza. Por unos momentos, me sentí mareada. Distinguí a Jennie tirada en la alfombra de su habitación. Ella aún no se habia despertado. Traté de levantarme, pero no lo conseguí. Seguramente, la sirvienta aún no tenía que venir a despertarnos, porque miré la hora y eran las seis de la mañana. Gateé hasta Jennie y la miré. Aún tenía las marcas que le hice la noche anterior, y, su camisa estaba del revés. Le di un golpecito suave en la cara y giró la cabeza.
—Oye, Jen—susurré para no hacer mucho ruido—¡Jen!
Abrió poco a poco los ojos y se cruzó con mi mirada. Ambas sonreímos. Éramos medianamente conscientes de lo que pasó la noche anterior y nos dimos un corto beso antes de levantarnos del frío suelo. Ella caminó hacia su armario para escoger su ropa y yo me fui a mi habitación. Justamente iba a venir Jisoo a despertarnos, pero le dije que no hacía falta, que ya estábamos despiertas. Le di los buenos días y ella sonrió. Me vestí a la velocidad de la luz y desayuné con Jennie una compota de manzana. Salimos por la puerta diez minutos antes de que el instituto comenzara y nos dimos cuenta de que estaba lloviendo. Saquemos un paraguas del paragüero que había en la entrada, y lo compartimos. No hablemos nada durante el camino, solamente sujetábamos entre las dos el paraguas de color transparente y mirábamos como la gente que no tenía paraguas salía corriendo con las capuchas puestas. Entonces, desgraciadamente, me acordé de mi madre...
(FLASHBACK):
Ese día, mi madre y yo teníamos que ir a una comida especial y, por lo visto, se puso a llover. No teníamos paraguas, porque, el último lo rompí y no había arreglo. Mi madre no quería que yo me mojara, así que me tomó (allí tendría yo como tres años o cuatro) y me cubrió de la lluvia. Ella, se constipó y estuvo en cuarentena durante dos semanas completas. Todo por mí. Todo por su niña... cuando se recuperó, yo hice de médico y la curaba (de mentira), y también la ayudaba en todo...
(FIN DEL FLASHBACK)
No pude evitar una lágrima que se resbaló por mi mejilla y rápidamente la limpié con la mano que tenía libre.
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Hola, que tal? Soy Gaby, y eh escrito este capítulo para todos ustedes. Mis compañeras y yo, queremos daros las gracias a todos por vuestros votos. Y también por vuestros comentarios. Esperamos que os esté agradando esta historia.
¡Nos vemos pronto!
