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__¿Camila? ¿Cómo te sientes?.

La morena no respondió, solo miró hacia el techo del hospital.

__Quiero ver a mis padres__  susurró con la mirada perdida, estaba confundida, enojada, sumamente triste y dolida por todo lo que había pasado

__Ellos vendrán pronto Camila, ¿podrías decirme si te duele la pierna?.

Por supuesto, tenía la pierna rota y cuatro costillas también, obviamente había sido una suerte que no le haya ocurrido nada más grave que ello pero igual se sentía miserable. Y lo peor de todo era que su mejor amigo no estaría allí afuera esperando por ella para luego sonreírle y darle el abrazo que tanto necesitaba, pero él no estaba, él no iba a volver.

__No siento nada ¿ok? Nada__  respondió de mala gana oyendo un suspiro de parte de la doctora

__Tu hermano ha preguntado por ti.

__No me diga nada sobre él, mucho menos le hable de mi__  escupió enojada, Ally negó lentamente y concluyó con su chequeo

__¿Sabes Camila? No creas que Dylan no sufre, puedo asegurarte que no hay día que él no llore y se culpe de todo, absolutamente todo...deja de pensar solo en ti y tu sufrimiento, hay más personas a tu alrededor que también perdieron algo importante por un accidente que nadie sabía y pasaría.

Ally observó cómo Camila finalmente la miraba y ella solo sonrió mientras salía de la habitación, debía dejarla pensar.

__¡¿Él...se encuentra bien?!.

Se detuvo mientras reía, sabía que funcionaría.

__ Físicamente mejora, mentalmente, no. Cada vez se hunde más en el dolor y me preocupa mucho, pero tampoco quiere ver a nadie y no hay día que no se culpe por todo esto__  explicó con preocupación, Camila tragó pesado

Sabía por qué estaba así, creer haber provocado la muerte de tu pareja y haber lastimado a tu hermana por una idea estúpida para salvar tu cuello debía estarlo matando día a día...se movió incómoda y su pierna dolió.

__No hagas movimientos bruscos Camila, sé que te preocupa tu hermano, pero aún no puedes moverte y él mucho menos...¿espera un poco si? Ya sabrás de él.

Una enfermera entró a la habitación con el desayuno de la morena.

__Doctora, los padres de los hermanos Cabello están afuera, piden hablar con usted antes de pasar a ver a la señorita__  señaló a Camila con un gesto y le colocó el plato en la mesa plegable que traía la camilla

Ally asintió sin decir nada y salió de habitación para que la enfermera continuara con su trabajo.

__¿Dylan, él está bien?__  Sinuhe preguntó al mirarla salir de la habitación, Alejandro estaba serio. Parecía como si no le importara su hijo

__ Físicamente está mejorando bastante rápido, es un joven muy fuerte señora Cabello. Mentalmente ha estado decaído, no deja de culparse por el accidente.

__Es que fue su culpa doctora, él lo sabe y lo acepta como el hombre que es...no crié a mi hijo para ser cobarde, lo crié para ser un hombre y su deber es proteger a su hermana, la puso en peligro, él lo sabe y lo acepta. No está decaído doctora, solo se castiga y bien merecido lo tiene__  escupió enojado sin mirarla siquiera, sostuvo a Sinuhe de la cintura cuando la sintió temblar, estaba llorando nuevamente

Habían tenido miles de peleas en toda esa semana, Alejandro no dejaba de culpar a su hijo mayor por el accidente y Sinuhe no paraba de decirle que ninguno de los dos había tenido la culpa, ninguno pudo haber sabido que esto pasaría y ambos casi mueren por ello, él debía controlarse pero Alejandro no quería entenderla.

Él creía firmemente que Dylan fue el culpable solo por ser el hombre entre los dos.

__Camila si quiere verlos, si me disculpan...tengo que trabajar señores, permiso__  Ally miró al hombre con indiferencia y luego se alejó de allí, estúpido machista atorado en el pasado, odiaba las personas así

Ambos padres entraron a la habitación de la morena mientras que Ally siguió su camino hasta la fecha Dylan, tenía un par de horas que no chequeaba al joven y debía llenar un informe.

__Dylan buenos di...¡Dylan!.

Ally corrió hasta él joven que tenía las muñecas sangrantes y una hojilla igual de ensangrentada en el suelo, tenía la mirada perdida y notó que había llorado por varias horas, su respiración estaba demasiado lenta, su corazón casi no latía.

Dylan Cabello se estaba muriendo.

__Doctora Bro...¡Por Dios!__  el enfermero que venía a hacer su trabajo de rutina en la habitación del joven vio aquella escena y en seguida corrió a pedir ayuda, necesitaban detener el sangrado y con urgencia una transfusión de sangre

__¡Rápido! Necesitamos sangre y detener el sangrado en sus muñecas ¡Ahora! ¡Llamen al doctor Mendes, necesito su asistencia aquí rápido!.

Gritaba a dos enfermeros que entraron corriendo con gasas, artículos para suturas, vendas y bolsas de sangre.

__No podemos movernos al quirófano, se hará aquí ¡¿Donde está el doctor Mendes?!.

__¡En camino!.

Ally asintió asustada, tenía que lograrlo, no podía permitir que él muriese de esta manera.

No lo permitiría.


•••

Me disculpo por la tardanza, mi cerebro con respecto a esta historia se secó por un tiempo, no tenía ideas y por ello no había publicado.

Espero el capítulo sea de su agrado, nos leemos pronto.

Ser tú - CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora