La hermana de Gabo. // Nelson el Prince.

《5》

5.

-Día siguiente-.

09:46 am.

Me desperté gracias al calor que tenía. Abrí los ojos y el aire estaba apagado.

No había energía eléctrica, ¡qué belleza!.

Me estiré tras dar un bostezo para luego levantarme.

Fuí al baño, me di una ducha rápida, me cepillé los dientes y luego entré de nuevo al cuarto.

Busqué en mi armario una franelilla negra, con un jogger vinotinto para luego colocármelo.

Me peiné el cabello, agarré mi celular que estaba en la mesita que está al lado de mi cama y me dirigí hacia la cocina.

Carlos Gabriel se encontraba sentado en una silla del juego de comedor bebiendo jugo, mientras veía su celular.

— Holaa, bebé. - dije mientras abría la puerta de la nevera y luego me servía agua.

— Holaa Gaby, ¿cómo amaneciste?

— Bieen. ¿Ya desayunaste? - dije mientras me sentaba en la silla que estaba al frente de él, al otro lado de la mesa.

— Si, hice 3 sandwich full, están en el microondas.

— Eeso pues. - dije sonriendo mientras me levantaba a buscar la comida en donde estaba. - Se ven buenos. - dije para luego darle una mordida a un sandwich.

— Están buenos. - dijo mientras sonreía.

— Confirmo. - dije después de terminar de tragar el pedazo que había mordido. - ¿A qué hora se fué la luz? - dije para luego darle otro mordizco al rico sandwich.

— A las siete y quince.

— Ay, ojalá que llegue ahorita.

— Ojalá, pero el apagón es en varios estados.

— Lo que faltaba.

Seguí comiendo mientras miraba a Carlos Gabriel reír.

¿Ok?

— ¿Tienes señal?

— Claaro, ache más [H+]. - dijo mientras sonreía.

— Aaah. - dije para luego darle el último mordizco al segundo sandwich.

Duramos varios minutos en silencio, hasta que yo terminé de comer.

— ¿Qué planes tienes para hoy?  - preguntó mientras me miraba.

— Ir para que mami más tarde, Eli me va a visitar y ya, no creo hacer más nada, ¿por qué?

— Aah ok, no, solo te preguntaba. Los muchachos vienen a almorzar aquí, traerán los condimentos y eso para la comida.

— ¿Quién?

— Víctor, Leo, Nels...

Lo interrumpí.

— Te preguntó. - dije para luego reír.

Carlos me miró serio, pero en el fondo se quería reír.

— Chistosa tu. - dijo con sarcasmo mientras se levantaba de la silla y salía de la cocina.

Yo seguí riéndome, hasta que mi celular comenzó a sonar, anunciando una llamada.

Lo agarré, vi quien era y atendí.

«Llamada en curso: Mejor amiga».