La japonesa al despertar se sentó en su cama y miro a su lado, no estaba, miro la puerta del baño que estaba abierta pero al levantarse para observar si la peliazul estaba dentro no había nadie.
Sana: Tal vez se fue a trabajar.- susurró parado misma.
Agarró ropa y fue asearse, al salir de la habitación ya vestida se sorprendió al ver el desayuno ya hecho encima de la mesa, mientras la alta se sacaba el delantal.
Tzuyu: Ya iba a despertarte.- dijo con una sonrisa y jaló una silla para que su novia se sentarán.- Ya está listo el desayuno.
Sana: No le pusiste nada malo, ¿verdad?.- entrecerro sus ojos mientras se acercaba a la alta.- Byul me dijo una vez que cuando le hiciste un desayuno le pusiste mucha sal.
Tzuyu: Fue porque la noche anterior vómito en la ducha en vez del retrete, créeme este desayuno no tiene nada malo.
Sana: Confía en tus palabras.- envolvió sus brazos en el cuello de su novia y estiró sus labios.
Tzuyu: Tienes algo en los labios?
Sana: ¿Qué? ¿Qué tengo?.- se separó y pasó su mano por sus labios una y otra vez.- ¿Ya no tengo nada?.- preguntó un poco avergonzada.
Tzuyu: Espera...- se acercó y se inclino hasta unir sus labios en un tierno beso.- Tenías mis labios.
Sana: Eres muy linda...
Tzuyu: Lo sé.- le guiñó un ojo y depositado otro beso antes de sentarse a su lado.
Sana: Tzuyu, quiero hacerte una pregunta.
Tzuyu: Dime.
Sana: Mina te vió con una chica, ¿quién era?
Tzuyu: Nayeon, es mi mejor amiga.
Sana: ¿En serio?.- preguntó entrecerrando los ojos.
Tzuyu: Sí, está casada con mi otra amiga Jeongyeon y tienen una hija, se llama Amber. No sabía que eras celosa.
Sana: Solo lo soy un poquito.
Tzuyu: No tienes porqué estarlo, no soy ese tipo de persona que son infieles, odió eso, por favor confía en mí amor, ¿Sí?
Sana asintió con una sonrisa y se pusieron a desayunar en silenció sin ni una pizca de incomodidad.
Sana: ¿Tienes que ir a trabajar?
Tzuyu: Si, me gustaría quedarme pero mi celular va estar sonando todo el día por mi mamá.- agarró su taza de café y le dió varios sorbos.
No había visto a su mamá desde el día de la discusión, ya no contestaba a sus mensajes o llamadas le daban igual.
Sana: ¿Vendrás mañana?.- preguntó antes de llevarse un pedazo de tocino a la boca.
Tzuyu: Sí, me gustaría ver a Mina, aunque tengo un poco de miedo.
Sana: No tengas miedo, ella no está molesta, le dije que debes estar muy ocupada.
Tzuyu: Me siento mal por alejarme así, debí ser más madura y venir a verlas.
Sana: Tranquila, es normal que quieras algo de tiempo después de ser rechazada, lo siento mu...- la contraria la interrumpió poniendo un dedo sobre sus labios.