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Cuando Wonho había mencionado algo divertido, no se imaginó que “lo divertido” para Wonho sería caminar un par de kilómetros hasta llegar a la playa donde estarían esperandolos sus suegros, los cuales decidieron ir en coche como la gente normal, y es que Wonho había decidido ir a la villa vacacional de su familia para pasar el fin de semana, la cual se encontraba cerca del mar donde había un área protegida que podía ser explorada.

Hyungwon, por su parte se encontraba exausto, el hacer actividades físicas no era lo suyo y probablemente no lo sería nunca, así que mientras caminaba, pensaba en lo mucho que le gustaría ser como Wonho que estaba caminando tranquilamente frente a él y parecía que los kilómetros recorridos no lo habían afectado en lo más mínimo.

— Ya no puedo caminar... —dijo finalmente rendido mientras se apoyaba sus manos en cada rodilla— mis pies me están matando.

Al escuchar a su novio, Wonho se dio la vuelta y volvió a su lado mientras Hyungwon se quejaba.

— Ya falta poco Hyungwonnie... —acarició su espalda en busca de animarlo— ya vamos a llegar y a comer algo delicioso.

El exhausto Hyungwon hizo un puchero.

— Dijiste lo mismo hace dos kilómetros... — respondió dándole una mirada asesina y Wonho rió con fingida inocencia, pero al ver el estado de su novio suspiró.

Se detuvieron un momento en silencio y Hyungwon parecía no recuperarse así que Wonho lo pensó un rato y luego acaricio su cabello.

— En serio, ¿ya no puedes? —preguntó preocupado sin dejar de acariciarlo.

El delgado negó levemente.

— No... —contestó con un quejido— Ahora mismo mis piernas se sienten como gelatina, si doy un paso más voy a caerme... —hizo un puchero y suspiró— quizá si descansamos un mom... ¡¿Qué estas haciendo?! —preguntó sorprendido cuando Wonho se agachó frente a él.

— No tenemos tiempo para descansar. —explicó— ya esta a punto de oscurecer y mis padres nos están esperando... —lo miro por encima del hombro— vamos, sube, yo te llevaré.

Hyungwon negó automáticamente y puso una mano en su espalda a manera de rechazo.

— No puedo dejar que me cargues... —dijo avergonzado— sé que también estas cansado, y soy pesado.

Wonho se quedó en silencio un momento al igual que Hyungwon, quien temía la reacción de su novio por haber hecho un rechazo a su gentileza. Sin embargo, pocos segundos después el silencio fue roto por una dulce carcajada de parte del mayor que no se contuvo en mirarlo como si aquella fuera la cosa más graciosa que alguien hubiera dicho.

— ¡Oh, vamos! —se rió— una pluma pesa mas que tú, deja de poner excusas y sube.

Hyungwon lo pensó un rato y finalmente cedió, así que puso sus piernas a cada lado de la cintura del mayor mientras lo abrazaba por el cuello. Wonho se levantó con él en su espalda, sosteniendo sus piernas y empezó a caminar de nuevo con bastante tranquilidad.

— Si te cansas demasiado, me bajas. —le advirtió aún sintiéndose culpable y avergonzado de la situación.

Wonho en cambio, soltó una risita.

— No te preocupes Hyungwon, recuerda que soy tan fuerte como el Capitán América. —respondió con voz graciosa.

Hyungwon se rió por la tontería y lo abrazó con más fuerza, no dudaba que fuera tan fuerte como un super héroe, pero era sólo su capitán América.

Entre risas y bromas siguieron su camino y llegaron a la playa justo a tiempo para ver cómo el sol se escondía en el horizonte.

— Mira Wonho... —apuntó con emoción hacia el sol que estaba a punto de terminar de ocultarse— es hermoso... —dijo embobado, apoyando su barbilla en el hombro de Wonho ya que este aún lo tenía en su espalda.

Sarang [Hyungwonho] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora