¡Hawái es divino!
La arena, el mar, la brisa, todo es realmente hermoso.
Como buena turista tomo fotos de todo, del paisaje y de los nativos; quienes por cierto son muy amables. También me tomo un par de fotos, pienso mostrarselas a mis amigas y a Natalia.
Valentina y Calle llevan puesto el vestido de baño bajo la ropa, así que sólo se la quitan y entran al agua. Yo busco un baño y me cambio.
Me acerco a papá para dejarle mi celular, hay varias cervezas sobre la mesa. Tomo un par y me acerco a la orilla.
Coloco una toalla sobre la arena y me siento, no quiero interrumpir el romance de la parejita. Echo un poco de bloqueador sobre mi mano y empiezo a esparcirlo sobre mi pierna. Calle me mira disimuladamente, yo en cambio no disimulo en lo absoluto. No puedo dejar de mirarla y detallarla, tiene un cuerpo armonioso. Si antes dije que era una diosa, ahora es la diosa de las diosas. Sus senos han crecido más, conserva su cinturita y su abdomen plano y sus caderas también han cambiado, ahora están más anchas, espero que mi hermana no tenga nada que ver con eso.
Minutos después Calle sale del mar y se sienta junto a mí.
—Hola (dice Calle).
—(Poché se quita las gafas de sol) hola, ¿qué tal está el agua?
—Deliciosa, ¿no vas a entrar? (Calle se peina el cabello con las manos).
—Más tarde (Poché sonríe).
—Oh, ¿me das una cerveza? (Calle pregunta).
—¿Estás segura? Sabemos que el alcohol causa estragos en ti (dice Poché en tono sarcástico).
—(Poché sonríe) sólo dámela.
—Cuando quieras (Poché hace un guiño, Calle reprime una sonrisa).
—Me refería a la cerveza.
—Yo también (Poché le pasa una cerveza a Calle).
Calle me observa durante varios segundos.
—14 meses... (dice Calle).
—Así es (Poché toma un sorbo de su cerveza y sonríe).
—Sé que es ridículo preguntarlo ahora, pero ¿cuál fue el motivo de tu viaje? (pregunta Calle).
—Ya debes saberlo.
—Quiero escucharlo de ti.
—Bueno, el último día de clases le conté a papá sobre mi sexualidad, él no lo tomó nada bien y decidió enviarme a un convento en España. Creí que sería difícil pero me acostumbré (Poché cuenta).
—Oh... ¿Y tuviste alguna novia allá?
—( Poché sonríe) casi pasa algo con una chica, pero no lo permití. ¿Y qué hay de ti?
—Antes de Valentina tampoco, duramos varios meses saliendo y me intenté alejar de ella varias veces pero acabe aceptando ser su novia (dice Calle).
Silencio incómodo.
—(Calle continua) estás realmente hermosa.
—¿Eso crees?
—Sí, tienes un cuerpo maravilloso y ese tatuaje (Calle se muerde el labio).
—( Poché se ríe) creí que no te gustaban los tatuajes.
—Oh, vamos. Siempre he pensado que el tuyo es sexy.
—Y yo siempre he pensado eso de ti (dice Poché en tono pícaro).
—Quizá ahora sí, ya que me terminé de desarrolla (Poché se ríe).
—No dije "ahora" dije "siempre". Eres muy hermosa Calle, lo sabes (Poché guiña el ojo, Calle se sonroja).
—Gracias Poché.
—De nada ( Poché toma un sorbo de cerveza).
—Así que finalmente te dejaste crecer el cabello (risas). Me gusta.
—(Risas) gracias. ¿Me ayudas con esto? (dice Poché señalando la crema).
—Vale.
Me acuesto boca abajo sobre la toalla.
Calle empieza a esparcir la crema sobre mi espalda con suaves y lentos movimientos. Sus dedos se abren paso por toda mi espalda, Dios, esto se siente realmente bien.
Ella toma un poco más de crema y continua con la parte baja de mi espalda. Toca mi trasero, no sé si es intencionalmente o no, pero lo hace. Yo suspiro.
Una vez más, toma más crema y la aplica en mis piernas. Sube haciéndome un masaje, llega a mi entrepierna y roza levemente mi intimidad. Definitivamente es intencional.
De mi boca se escapa un gemido y de la suya una risa pícara.
—Suficiente crema, gracias.
—¿Estás segura? Creo que falto un poco...
—( Poché interrumpe) así está bien. Me meteré al agua y le diré a tu novia que salga para que te acompañe, ¿va? (Poché hace énfasis en la palabra "novia").
Necesito enfriar mi cabeza. Entro al agua, me doy un chapuzón. Está fría, lo necesitaba.
¿Qué le sucede? ¿Intentaba excitarme? Si fue así entonces lo estaba logrando. ¿Pero que gana con todo esto mi querida cuñada?
Papá nos llama desde el kiosco, la comida ha llegado. Todos nos dirigimos a la mesa y comemos.
Pescado. Está delicioso.
Después de la comida, Valentina y Calle se siguen bañando en el mar. Yo me acuesto en una hamaca y tomo todas las piñas coladas que puedo.
***
Se hace de noche.
Cenamos algo ligero en el restaurante del hotel, nos quedamos un rato en el vestíbulo y leemos folletos turísticos.
Hay varias playas desérticas, playas que poca gente ha pisado, playas sin exceso de gente, justo lo que queremos. Al parecer la única forma de llegar ahí es caminando y son aproximadamente 4 horas. Hay que escalar montañas pequeñas, pasar cerca de acantilados, cruzar ríos, atravesar montes, pero es perfecto.
Decidimos hacerlo, saldremos en la mañana así que tenemos que dormir temprano.
En el pasillo, Valentina y Calle se despiden con un beso, yo simplemente digo: "adiós", mi hermana me mira fijamente. Cierro la puerta.
Calle se desviste frente mio y se pone su pijama, yo voy al baño y me pongo la mía. Vuelvo y la encuentro sentada en la cama echándose un poco de crema sobre sus piernas, es crema hidratante para el daño del sol.
Me siento junto a ella, estamos en silencio.
—¿Quieres un poco? Poché ... Poché ... (dice Calle).
—¿Ah qué?
—Que si quieres crema.
—Ah, no, gracias.
—(Calle pone el envase sobre la mesa) ¿sucede algo?
—No, ¿por qué lo preguntas? (Poché mira fijamente a Calle).
—Porque has estado algo silenciosa desde que entramos.
—( Poché susurra) si supieras.
—¿Qué cosa?
—Nada.
—Vamos dime.
Silencio.
«¿Qué más da?»
—Te veo y recuerdo un montón de cosas, es como si viajara al pasado.
—Es algo normal, tú fuiste mi primer amor, jamás te voy a olvidar. Es decir, aunque no lo quiera, siempre algo me va a recordar a ti y a lo que vivimos juntas.
—( Poché baja la mirada) no creo que sea normal lo que yo siento.
—¿Por qué lo dices?
—Porque tengo ganas de besarte ahora mismo, tocarte, hacerte el amor como antes (dice Poché ).
Silencio incómodo.
—( Poché continua) creo que mejor duermo en el suelo.
Antes de poder ponerme de pie, Calle agarra mi brazo. Yo la miro sorprendida.
—Yo también. Desde la cena en casa de mi hermano no hay cosa que más desee (dice calle sonriendo).
—¿En serio? (Poché regunta sonrojada).
—Sí (Calle intenta besar a Poché, pero ella la detiene).
—No quiero que te arrepientas de esto después.
—Probablemente mañana despierte odiándome, pero al mismo tiempo sintiéndome tan bien como no lo he estado desde hace 14 meses (Calle alza el mentón de Poché y sonríe).
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Jugando a Amar (Adaptación Caché)-Terminada
FanfictionMaría José Garzón, 17 años, una estudiante de sexto año, llena de lujos vive con su hermana y su padre ha teniado una infancia dificil despues de la muerte de su madre, tiene una relacion con Cristian un chico mayor que ella y llevan varios meses ju...