IX

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Jimin hablaba, pero hablaba hasta por los codos. Había repetido casi lo mismo pero en diferentes oraciones, incluso notó que quería darle celos, eso era muy infantil, a decir verdad, a Taehyung le daba igual si Jimin se conseguía a alguien más. Después de todo iba terminar estando solo, porque nada es para siempre.

—Mi mamá muere por conocerte, ella dice que seguro eres un buen muchacho —dijo Jimin muy emocionado.

—¿En serio le hablas de mí a tus padres?

—Claro, ellos lo entienden y están agradecidos.

Taehyung se sintió más tranquilo, sólo lo había aceptado porque Jimin ha sido muy lindo apesar de siempre intentar rechazarlo.

Jimin abrió la puerta de su casa y entró gritando un "ya llegué". Su madre, quien preparaba la cena lo miró algo enojada.

—Jimin, ¿qué pasó con las basuras? Tienes que sacar la basura antes de irte a dormir. Me levanto y veo el bote lleno, no jodas.

—Mamá, traje a Taehyung —dijo cambiando de tema y señalando al chico a su lado. Taehyung sonrió algo forzado, eso había sido muy incómodo

—Oh... él es el chico del que tanto hablas.

—Sí, mamá.

—Un gusto —dijo Taehyung.

—Jimin sientate a comer.

Jimin guió a Taehyung hasta la mesa.

—Ella es algo seria, pero es buena gente —le dijo Jimin en voz bajita.

Era extraño que Jimin fuera hijo de alguien serio. Bien dicen que los hijos son el reflejo de los padres, pero Jimin no pareciera serlo.

—A Taehyung también, mamá.

—¿Por qué no avisaste que traerías a tu amigo? —dijo su madre sirviendo los platos—. Luego no quedará para tu padre.

—Te avisé desde ayer y hoy en la mañana.

Taehyung miró el plato delante suyo muy incómodo.

—Jimin, es mejor que me vaya. No me gusta molestar.

—No estás molestando, por favor, quédate. Sólo ignórala, sí alcanza para todos, ella es muy habladora —dijo avergonzado—. No tengas pena, después de comer vamos arriba y te muestro mi cuarto.

Taehyung terminó quedándose, algo incómodo, pero tampoco quería dejar a Jimin así, le había prometido estar con él.

Su madre al parecer no estaba de buen humor, incluso Jimin se extrañó. Él dijo que debe tener algún problema, pero eso no debía afectarle.

—Mi cuarto es este —dijo abriendo la puerta de su cuarto, estaba muy ordenado, tenía fotografías de ellos dos juntos pegadas en su pared. Le agradó su cuarto, el piso limpio, la cama tendida, su armario ordenado. Incluso las fotos de ellos combinaban muy bien con la pared azúl del cuarto.

Se acercó al escritorio de Jimin y se sorprendió al ver los lápices acomodados en un lapicero y las plumas en otro.

—No sé si las fotos sean incómodas para ti.

—No hay problema con ellas. Es lindo —dijo observándolas

—Me gusta verlas y saber que te tengo conmigo.

Taehyung sonrió enternecido, la muerte de su padre le había dejado dolor y una soledad inmensa, provocando su alejamiento de todos, pero por alguna razón no sentía las ganas de querer desaparecer de la vida de Jimin. Incluso deseaba poder estar más tiempo con él.

—No lo quería decir, pero te tengo en mi fondo de pantalla —dijo Taehyung algo avergonzado—... lo había puesto por error, pero no pude quítarlo, te mirabas bien allí.

Jimin sonrió y lo abrazó.

—Sé que puedes sentir lo mismo que yo.

—Estoy creyendo eso —dijo respondiendo su abrazo.

—Entonces tengamos sexo.

Taehyung lo miró muy confundido y se separó del abrazo.

—Emmm... m-me tengo que ir —dijo muy nervioso—. Yo... bueno, debo despedirme.

Jimin estaba algo decepcionado, pero intentó seguir como si nada hubiera sudedido.

—Oh sí, tú sólo sal, ¿o quieres que te acompañe?

—Es que me da algo de vergüenza con tu mamá.

Jimin asintió y lo llevó hasta afuera.

—Bueno... debo irme —se quedó parado sin saber qué hacer—. ¿Nos vemos mañana?

—Sí, en la escuela —rio jimin algo nervioso—. Sin hacer nada malo, sólo vernos y estar juntos como lo es siempre.

—Sí, tomados de la mano —ambos ríeron y soltaron un suspiro—. Gracias por la invitación.

—No es nada. Bueno, hasta mañana, Tae.

—Hasta mañana.

Jimin volvió a entrar a su casa, su madre estaba parada mirándolo y antes de que dijera algo, subió corriendo a su habitación, cerró con llave y se lanzó a la cama cubriéndose el rostro con una almohada para gritar en ella.

Esa mañana Jimin había revisado el horóscopo y él le dijo que iba a tener una aventura sexual con la persona que amaba.

Libra♎VMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora