Capítulo 27.

3.4K 351 150
                                    

***
La pareja fue hacia su nuevo hogar, una choza que Kirishima había estado construyendo durante días sin que nadie lo supiera. Bakugou estaba maravillado.

—¿La has hecho tú?

—Sí, mi amor. Decidí no decírselo a nadie para que fuese una sorpresa, ¿te gusta?

Katsuki, quien estaba mirándola desde el exterior, observaba que la casa estaba hecha con los mismos materiales que el resto mas tenía una peculiaridad, y es que estaba decorada con símbolos de fertilidad, animales, plantas...Todo ello con tonalidades rojas.

—¿Y bien? ¿Te agrada?—Preguntó de nuevo.

—Sí, me gusta.

Eijirou sonrío expresando así su satisfacción ante la respuesta del omega.

—Entonces también te gustará el interior, ¡vamos!—Dijo agarrándole la mano a su ahora esposo.

***
Cuando Katsuki entró no esperaba encontrarse con la pared pintada de color anaranjado y con dibujos de animales y plantas.

El omega estaba gratamente sorprendido pues no conocía esa faceta artística de su alfa ya que éste jamás había realizado nada parecido frente a él.

—Vaya...No esperaba esto...¿Desde cuándo se te da tan bien pintar y dibujar?

—Pues...Desde hace un par de años, aunque no algo que yo haya hecho demasiado. Y menos frente a alguien.

—¿De verdad? ¿Nadie lo sabe?

—Nadie, ni siquiera mis padres.

El rubio cenizo se sintió especial al saberlo, le encantaba la idea de ser el único en conocer una de las facetas de su amado.

—Bien. Me alegra ser el único que lo sabe, así seré el primero en saber algo de ti...

—Bueno, tú tienes y conoces primeras cosas de mí. Como por ejemplo, mi primer beso.

—Sí, y esta noche, tu virginidad; ¿me equivoco?—Preguntó con tono seductor.

—Por supuesto, cariño. Mi virginidad es sólo tuya, al igual que la tuya es para mí.—Dijo mientras se acercaba a su amante y lo abrazaba por la cintura para atraerlo hacia él.

—Eijirou...Hazme tuyo ya, quiero sentirte.—Decía acariciando el fuerte torso de su novio.

—Umm, eso suena bien...Pero antes debes tomarte una infusión para adelantar tu celo, porque aún no lo tienes, ¿cierto?

—No, se supone que debería llegarme en dos días.

—Bueno, no importa. Te hago la infusión ahora mismo.

—Está bien.

El pelirrojo se dispuso a hacerle la infusión y, cuando ésta reposó por unos minutos, Katsuki se la bebió.

—Ahora hay que esperar unos minutos pero mientras hagamos algo~

—Suena bien~

Bakugou se tumbó en suelo y Kirishima se posicionó sobre él, entonces comenzó a besar y lamer el pecho y el cuello de su omega.

—Mmm...

—¿Lo disfrutas, cariño~?

—Mn...Sí, continua...

El alfa volvió a su tarea de hacer sentir bien a su omega y decidió descender por el abdomen de éste, dejando una fila de besos por él.

—Ahh, Ahhh...

Tribus.[Kiribaku](Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora