Capitulo 3

5 0 0
                                    

-Mmm, veamos... sección... fantasías...

- ¡Esto no es una fantasía, Zora!- la reprendió Lais

- No, tonta, estoy buscando en la sección de fantasía un libro sobre veelas... veamos...- siguió buscando hasta que vio un estante más lejos un libro con tapa azul- ¡Perfecto!- se dijo a ella misma en voz alta-.

- ¡Léelo, léelo!-se emocionó la castaña abalanzándose sobre su amiga.

Zoraida abrió el libro y comenzó:- Las veelas son hermosas mujeres, espíritus del folklore del este de Europa, aparentemente no humanas, con largas cabelleras de pelo rubio platino, algo que por cierto, no concuerda con ninguna de nosotras –añadió a la lectura- y una piel que reluce como la luna. Son criaturas capaces de metamorfosearse que habitan en bosques, lagos, montañas y nubes. Por cierto, eso de las nubes lo dice por ti, ¿verdad Lais?- le dijo con una risita burlona.

- Ja, ja, muy graciosa, ¡continua!

-" En su forma animal pueden ser cisnes, caballos, halcones, serpientes o lobos"-

- ¡Genial! ¡Seré un hermoso cisne!

- Zora la fulmino con la mirada, así que Lais se calló, agachando su cabeza y mirando hacia el suelo.- "pero son más atractivas y peligrosas en forma humana: hermosas jóvenes de melena larga, y suelta que visten nebulosas túnicas y bailan bajo la luz de la luna de verano. Los jóvenes que caen en su influjo pierden la razón...-

- ¡Te dije que el poder de las veelas me ayudaría a conquistar al apuesto de Mike!

- ¿Ya quieres de dejar de interrumpirme?- fanfarroneo Zora antes de continuar- "pierden la razón: se aturden y olvidan comer, beber y dormir, a menudo durante días. Bueno Lais, creo que si quieres matar a Mike será muy útil- volvió a añadir la escéptica colorada- Cualquiera lo suficientemente desafortunado como para ver un baile de veelas tendrá que unirse a ellas y bailar, bailar y bailar hasta morir del agotamiento. Y aquel que pise un círculo de hada, el círculo de hierba pisoteada por las veelas cuando bailan, tendrá a buen seguro mala suerte o enfermará. Aunque las veelas pueden ser bondadosas con los humanos y compartir con ellos sus dones curativos y proféticos, son muy temperamentales.

-Pues eso se condice contigo...

Zoraida miró de reojo a su amiga, mientras continuaba la lectura- No tolerarán que se les mienta o se les engañe, y pueden infligir castigos terribles, en especial a quien incumple una promesa. En algunas tradiciones, se sabe de veelas que se han casado con humanos, y han fundado una familia y criado hijos, por lo visto sin ningún efecto perjudicial para ninguna de ambas especies"

- ¡Lo dije y lo vuelvo a repetir...!-

- No es necesario, puede ser que Mike ya te haya escuchado de lo alto que lo gritaste-bufó.

- ¿Enserio?- dijo ruborizándose Lais- yo y mi bocota-

- Tranquila, amiga, era solo una ironía- le dijo poniendo los ojos en blanco y devolviendo al estante correspondiente el libro de las veelas.

- ¿Me has llamado amiga?- a la niña se le había dibujado una sonrisa enorme en la cara y sus ojos celestes resaltaban como dos huevos fritos-Si, ¡lo has hecho!

- Bueno, pero no te entusiasmes eh...- contestó mientras caminaban una al lado de la otra por la biblioteca – ahora Lais... ¿Qué haremos al respecto?

-¿No es obvio Zora? ¡Es nuestra misión! ¡Nacimos para esto!

-¿Realmente crees en todo lo que dijo esa diosa, no?

-No entiendo de qué te preocupas... viajamos a un mundo mágico, tenemos collares luminosos con grandes poderes, ¿Qué podría salir mal?

Mientras se dirigían al salón de clases Zoraida pensó mil formas diferentes en las cuales esta "aventura" podría salir mal. Empezando por el hecho de que desconocían realmente de qué se trataba el poder de las Veelas, y sus únicos indicios eran de libros de fantasía

Por siempre VeelasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora