Lo que tu necesitas (LUIMELIA)

Cerca De Ti Pt. II

Ana.- Tu como que estáis muy callada ¿no? Ni con Lourdes quisiste pelear hoy.

Silvia.- No es que no me siento muy bien la verdad.

Amelia.- ¿Pero estáis bien cariño? Que si no mejor vamos al doctor.

Silvia.- No, no es nada, solo no dormí muy bien y estoy algo enfadada por lo de tu madre Amelia.

Amelia.- Ni me lo digas, que solo de recordarlo me entra un enfado enorme.

Ana.- Y ¿Por qué no hacéis algo? Digo podrías denunciarlo.

Amelia.- Podría hacerlo pero en realidad no conozco ningún abogado que me pueda ayudar a convencer a mamá para que haga la denuncia.

Silvia.- (pensativa) ¿Qué hay de Julia Erguía?

Amelia.- ¿La mamá de Lourd? Preferiría no molestarlas a ellas a parte ya tengo suficiente con que Luisita se enfadó la otra vez porque Irene me llamo sobrina como para ahora ir y pedir ayuda justamente a ellas.

Ana.- ¿Y Quintero?

Amelia.- Quintero está muy ocupado me contó de sus casos ayer que lo vi en el King's

Ana.- Pues yo creo que Luisita entenderá que si te acercas a la abogada Erguía es por vuestra madre y no por otra cosa ¿no?

Silvia.- Yo opino lo mismo, por mucho que a mí tampoco me gusta que estéis cerca de Lourdes, si hay alguien que ayuda mujeres es Julia.

Amelia.- Tenéis razón, más tarde me acercare al despacho a ver si me pueden ayudar a librar a mi madre de mi padre de una vez por todas.

Ana.- ¡Así se habla tía! Pero bueno las dejo que veré a Carlos y no puedo llegar tarde.

Silvia tomaba de su vaso pero al escuchar que Ana iría con Carlos casi se ahoga con la bebida.

Ana.- De verdad tú sí que estáis mal, yo mejor me quedo contigo a cuidarte, vamos al departamento y ya le aviso a Carlos.

Silvia.- No cómo crees ve a con tu novio que es muy importante.

Ana.- (la toma de los brazos y la mira directamente a los ojos) Tu eres más importante que cualquier persona.

Narra Silvia

Juro que podía ver su alma y sus ojos atravesarme como mil flechas ardiendo pasar por mi corazón.

Amelia.- Bueno entonces vamos y yo me sigo al despacho de Julia.

Despacho Erguía.

Julia.- Yo creo que si hablamos con tu madre con los argumentos correctos, ella lo podrá hacer, ahora lo que necesitamos es tomar algunas fotografías por si no se decide antes que desaparezcan las marcas, para que nos sirva como prueba y poder solicitar como medida cautelar una orden de alejamiento para tu padre.

Amelia.- Claro, solo que no tengo cámara, igual veré la forma de conseguirla.

Julia.- Por eso no te preocupéis, yo tengo una cámara y si te parece bien podríamos ir hoy mismo a tener esa platica con tu madre para que entre en razón.

Amelia.- Pues me viene perfecto porque mi padre estará de guardia hoy y no saldrá del cuartel hasta mañana así que vengo por ti más tarde ¿te parece?

Julia.- Claro, pero será que puedes pasar por casa, es que ahí tengo la cámara.

Amelia.- Perfecto te veo entonces.