Lo que tu necesitas (LUIMELIA)

La Elocuencia De Las Flores

Luisita no era una chica celosa, en realidad era muy segura de sí misma sobre todo de su pareja, sin embargo algo que era muy característico de ella era la curiosidad, sobre todo cuando se trataba de Amelia, no podía evitarlo quería saber hasta el más mínimo detalle ya que todo en ella le fascinaba, si tenía que ser sincera quería saber que había pasado entre Lourdes y su novia.

Luisita.- Buenos días mi amor.

Amelia.- Mmm...

Luisita.- ¡Despierta cariño! *le da un pequeño beso*

Amelia.- (adormilada) Luego...

Luisita.- Ya, anda... *le da un montón de besos*

Amelia.- (se hace la dormida) Más tarde amor.

Luisita.- *hace un puchero, se aleja de Amelia pero no se levanta de la cama*

Amelia.- *Abre los ojos, sonríe* Ven aquí *la acerca a ella, pero la ve pensativa* ¿Pasa algo?

Luisita.- Bueno es que me gustaría preguntarte algunas cosas, pero es por curiosidad...

Amelia.- Adelante cariño pregúntame lo que queráis. *le da un beso en la frente*

Luisita.- ¿Tú creéis que estábamos destinadas a estar juntas?

Amelia.- ¿Por qué lo preguntáis?

Luisita.- Porque no puedo dejar de pensar que aunque te conocí hace años, habéis llegado en el mejor momento a mi vida.

Amelia.- No sé si fue destino, pero lo que sí es seguro es que nuestros tiempos fueron perfectos no podríamos estar aquí ahora, si ese día me hubiera fijado en ti.

Luisita.- ¿cómo? Creéis que si hubiéramos tenido una relación desde hace años, ¿no seguiríamos juntas?

Amelia.- No es eso amor, es solo que hace años, para mí no había nadie más que Lourdes y lo que ella quería y quien ella era.

Luisita.- ¿Cómo yo para ti ahora?

Amelia.- No, contigo es diferente por mucho, ahora soy mucho más madura para saber que estar contigo no significa cortarnos las alas, ahora sé que estar contigo significa volar juntas, cada vez más alto.

Luisita.- ¿Puedo preguntarte que paso con Lourdes?

Amelia.- Lo que me paso con Lourdes fue que dejamos de movernos, nos conformamos, llego un punto en el que nos cerramos tanto que solo hizo falta un problema, para acabar con la burbuja donde vivíamos.

Luisita.- ¿Por eso nunca te volví a ver?

Amelia.- Bueno no me visteis otra vez porque no vivíamos aquí, vivíamos en Valencia solo veníamos ocasionalmente.

Luisita.- Después de que terminaron, ¿la volvisteis a ver?

Amelia.- No nunca, hasta ayer por la noche.

Luisita.- ¿Sentisteis algo ayer que la volvisteis a ver?