Traicionera - Segunda temporada.

Cambio de planes

— ¿Ya despertaste? - Vegeta alzó la vista para encontrarse con Gokú, quién lo observaba desde el marco de la puerta de su habitación - Fuiste un imbécil al salir anoche,¿Sabes lo que me costó traerte aquí?

Cierto,no se había fijado en el pequeño detalle de cómo es que llegó hasta ahí. Se levantó y se acomodó, cruzó sus piernas y llevó su mano a su cabeza; tenía una jaqueca horrible.

— ¿La verdad? No recuerdo mucho de lo que pasó anoche - Admitió y se encogió de hombros, indiferente a lo que sea que sea que tuvo que hacer el pobre de Gokú para traerlo a su casa.

— Pues déjame iluminarte - Se adentró a la habitación, sin dejar de mirarlo con una expresión dura - Anoche, como a las nueve, te vi entrar a una fiesta - Empezó a hablar, se sentó en una silla, delante suyo - Pero no me dejaron pasar porque sólo los que estaban en la lista o tenían una invitación especial podían pasar. Así que decidí esperarte afuera - Suspiró - Estuve ahí, como un idiota, preocupado porque te pasara algo y tú estabas borracho ligando con una chica - Río, con histeria - A las tres de la madrugada deciden salir e ir a coger en tu auto

— ¿Nos viste? - Fue lo primero que preguntó, ni siquiera le pidió disculpas o dijo que se sentía mal por hacerlo esperar.

— Sí, Vegeta, pero no te creas que me interesó verlos en su asunto - Aclaró - Agradece que te dejé terminar en vez de interrumpirte.

— Te hubiera matado - Le apuntó con el dedo.

— Sí,lo que digas - Rodó los ojos - Tuve que dejar mi auto en el estacionamiento y traerte en el tuyo hasta aquí y ni me preguntes cómo le hice para traerte a la cama.

— Demonios, eso suena extraño - Hizo una mueca de asco y fingió un escalofrío.

— ¡No estoy jugando, Vegeta! - Levantó un poco la voz. En su rostro se veía que de verdad estaba enojado - Tu madre y Pan no durmieron en toda la noche, yo estuve en un maldito y helado estacionamiento toda la noche en vez de con mi hijo y esposa, cuidando de él que le agarró una fiebre, lidié con un borracho que estaba sucio con su propio semen,¿Crees que eso da gracia?

— No te pedí que hicieras nada de eso, Maldición - Se levantó de su cama, aún con el dolor de cabeza fue lo suficientemente fuerte como para mantenerse de pie y seguir hablando - Soy un adulto, sé lo que hago y no necesito una Maldita niñera. Aún si me ahogaba con mi propio semen en el estacionamiento, no debería de ser tu problema. Tú escogiste ir a buscarme, no es mi culpa - Iba a salir de ahí pero Gokú fue más rápido y lo tomó del brazo.

— Escúchame - Le dijo con voz seria - Créeme que yo tampoco hubiera elegido ir a buscarte, pero al contrario de ti, a mí sí me importó y me dolió escuchar a tu pobre madre llorando por teléfono mientras me rogaba ir a buscarte, ella estaba lejos,¿No te preocupó ni un poco lo que le podía pasar? - Lo último lo preguntó en un tono suave - Sé que lo que estás haciendo y lo que hiciste anoche es para evadir el dolor que sientes,¿Pero qué pasa con el dolor que le causas a los demás?

Vegeta se quedó en silencio pues sabía que todo lo que le decía es cierto, cada palabra era verdad; huía de su propio dolor y creyó que en una fiesta, alcohol y sexo con desconocidas lo arreglaría. Se soltó del agarre y sin decir más salió de la habitación hasta llegar a la sala donde su madre estaba sentada, tomando una taza de té. Cuando la mujer lo vio se levantó, sus ojos llorosos  y su sonrisa temblorosa hicieron a Vegeta avanzar hacia ella y abrazarla.

— Hijo... - Susurró la mayor y correspondió al abrazo. Aún recuerda las horas de terror que vivió después de que Pan le avisara que su hijo escapó. Estaba la cuidad central de Japón, lejos,sin poder hacer nada para ayudarlo y con el temor a perderlo.

— Lo siento, mamá, de verdad lo siento mucho - Pudo oír perfectamente cómo su voz se rompía en cada sollozo y las lágrimas tibias en su hombro descubierto - Yo... Sólo quería olvidar que dolía... Sólo quería dejar de pensar que ella ya no estaba - Gokú observaba la escena a una distancia prudente, en silencio para no incomodar a madre e hijo.

— Cariño, está bien - Su madre lo separó de ella e hizo que le viera a los ojos - No vas a tener que sentir dolor de nuevo - La sonrisa alegre de la pelinegra dejaba confundido a Vegeta -  Bulma no está muerta.

— ¿Qué dijiste...? - Vegeta y Gokú hablaron al mismo tiempo. Ninguno de los dos podía procesar bien lo que les estaba diciendo la mayor, quién seguía sonriendo.

(...)

— ¿Y qué pasó después...? - Luego de un largo silencio, Killin volvió a preguntar.

— No lo sé... Se la llevaron, me dejaron... No lo sé - Se encogió de hombros, la tristeza se podía ver en su rostro y la forma tan penosa de su posición. Después de escuchar toda la historia, desde que Lápiz y Bulma empezaron a salir, la desaparición de Bulma y el que su hermano confesara ser Gay y se haya ido a otro país, hasta sus celos por Bulma por estar con Vegeta y que terminó aceptando ser la cómplice de Videl para matar a Bulma y cómo todo salió mal cuando su hermano se interpuso, terminando con cómo Videl la convenció de escapar después de inculpar a Bulma.

Le siguió contando cómo es que terminaron huyendo,sin dinero ni comida. Le contó también que Videl fue llevada por el tal Señor Brief, y ahora estaban ahí, nuevamente en un silencio del cual nadie sabía cómo salir.

— Debes de entregarte y confesar lo que hiciste - Habló, suavemente. Algo en él se removió al oírla, al entender todo; ahora quería ayudarla a que haga lo correcto. Ella asintió rápidamente.

— Sí,lo que sea para que ésta culpa se me quite - Las lágrimas volvieron a caer cuando alzó la vista hacia él - Si tengo que ir a prisión lo haré... Porque me lo merezco - Killin iba a decirle que es lo mejor, pero una llamada lo interrumpió, de nuevo.

— Disculpa - Ella asintió y Killin contestó - Habla Killin,¿Gokú? Hola,¿Cómo están todos? - Lazuli no sabía con quién hablaba , pero se veía que eran conocidos. La persona, al otro lado de la línea, siguió hablando y después pudo ver al chico con cara de no creer lo que estaba escuchando - ¿Es una broma Verdad? - Inquirió, pero la respuesta pareció negativa pues su sorpresa no se desvaneció - ¡Eso es increíble! De verdad no me esperaba que me dijeras eso... Wou - Ahora parecía feliz y aliviado - ¿Necesitas que ayude a encontrarla?

— ¿Qué está pasando? - Preguntó más para sí misma que para el otro.

— Gokú, dentro de unos minutos estaré ahí, creo que tengo algo... O mas bien alguien que será de mucha ayuda - Volteó a ver a la rubia que no entendía ni una mierda - Hasta luego - Colgó y nuevamente se dirigió a Lazuli - Cambio de planes;te vas a entregar después de que me ayudes con algo.

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1209 palabras y contando 😂😂😂. ¿Qué les parece, hasta ahora? ¿Lo estoy haciendo bien o ya los decepcioné?
Sin miedo, la verdad, aunque duela 😂😂😂. Disfruten. Bye.