Narra Olivia:
Llegué a casa y me encontré a Will en la cocina preparando el almuerzo, sonreí antes de que me viera ya que cocinaba muy bien.
-Hola. - dijo y me dio una sonrisa.
-Hola, ¿qué turno tenía mamá?
-Empalmaba dos turnos ¿recuerdas?
-Verdad, que buena forma de incorporarse al trabajo. - dije y me puse a ayudarlo.
-Ni que lo digas.
-¿Sabes?
-Si no lo dices no lo sé. - dijo.
-Ja ja ja, que gracioso.
Will soltó una carcajada y luego se me quedó mirando esperando a que hablara.
-Me han puesto un viaje la semana que viene.
-¿En serio?
-Sí, me voy el jueves que viene y llegó el domingo que viene.
-¿Y para qué es?
-Para cerrar un contrato con una empresa de Canadá.
-¿Vas a Canadá?
-Toronto, para ser exactos.
-Que suerte, ¿y cómo que te han puesto a ti para ir a cerrar un contrato?
Puse mi cara más ofendida que podía poner.
-Me ofendes, Will.
-Sabes que no va a eso, sé que tú vales mucho y que seguramente llegarás a eso pero me sorprende que con el poco tiempo que llevas trabajando allí te manden a cerrar un contrato.
-Ya, a mí también me sorprendió. Resulta que va Trevor...
-¿El chico de la discoteca?
-Sí, ese, como es el mejor trabajador que tiene pues ha decidido que lo acompañe la persona que menos tiempo lleve en su departamento y ¿adivina quién es?
-¿Y con qué fin?
-Para que aprenda de él, dice que el viaje me vendrá bien para aprender y tener más experiencia.
-Ah, pues en verdad no es mala idea.
En ese momento se escuchó la puerta seguida de la voz de mi padre.
-¿Chicos?
-En la cocina. - gritamos los dos a la vez y luego nos empezamos a reír como cuando éramos más pequeños.
^
Iba con Abi de camino al gimnasio mientras le contaba lo del viaje, habíamos decido que como hacía muy buen tiempo iríamos andando. Habíamos cogido por un parque para cortar camino cuando una pelota llegó a mis pies y al levantar la cabeza después de cogerla vi una cara familiar.
-Hola, Jarek.
-¡Hola! - dijo contento.
Miré alrededor esperando ver a Trevor pero en su lugar vi corriendo hacia nosotros a otra persona.
-¡Jak! - dijo la chica de las veces anteriores.
Lo cogió en brazos y lo miró fijamente, ahí me di cuenta de que aunque Jarek fuese clavado a Trevor tenía un gran parecido a la chica también.
-¿Por qué me das estos sustos mi vida?
-Lo siento, solo quería coger el balón.
-No pasa nada. - dijo y le dio un beso en la frente.
ESTÁS LEYENDO
No me des las gracias.
Teen Fiction-Prometo cuidarlo, te lo juro por mi vida. Fue lo último que alcanzó a decirle antes de que se la llevaran de una vez. Si ya estaba roto de dolor, cuando vio como se la llevaban creyó que su mundo se había acabado. La vida es muy injusta con algunas...