Cuando Me Ames

Capitulo 04

Capítulo 4

“Eres la felicidad que necesito en mi despertar”

Dicen que nada está dicho en esta vida, que nada es seguro, que la amistad entre el hombre y la mujer no existe, que hoy es más fácil dar un puñal por la espalda que ir de frente, que el amor es cosa de locos, que odiar es cosa de flojitos y que la suerte no se busca; Si el amor es cosa de locos, bendita locura la mía por amar fuerte y demasiado, no me importa arriesgar todo por amor y es verdad, mi suerte de encontrar a él hombre indicado, se dio, porque cuando menos piensas que las cosas se te van a dar, es cuando más suceden.

Dicen también por algún lugar, que la felicidad no consta de algo material ni de alguien, pero yo creo que están muy equivocados en la última parte, porque eso me da la certeza de que nunca vieron a alguien sonreír y que eso te provoqué la satisfacción más grande del mundo; Todos nacimos para ser felices, no hay secretos para eso ni receta para saber dónde buscarlo, está al alcance de todos, más cerca de lo que te imaginas.

Facundo: Buen día. (Dijo en mi oído) Abrí los ojos, tengo en desayuno en la cama.
Lali: (Sin abrir los ojos) Me estas asombrando últimamente, cambiaron a mi novio.
Facundo: Mala. Dale, desayunemos.
Lali: Es sábado, quedemosno un ratito más en la cama, hagamos cucharita.
Facundo: (Acostándose a mi lado) Te amo tanto, no imagino una vida sin vos.
Lali: (Tomando su mano para que me abrazara) Te quiero siempre a mi lado.
Facundo: Quédate bien tranquila que eso siempre va a pasar.
Lali: No me olvido que él único que se quedó a mi lado después de la muerte de mi viejo fuiste vos, sin ninguna obligación, porque no hacía mucho que salíamos.
Facundo: Me volvería a quedar una y mil veces más en esa ocasión o en otras, porque a vos te elijo todos los días.
Lali: Te amo.

No hace falta que él conteste que también me ama, porque lo sé, cada día que elije estar a mi lado me lo hace saber, de algo me di cuenta con él, las palabras muchas veces no sirven, no cuando los actos son transparentes.

Facundo: ¿Como la pasaste anoche con las chicas?
Lali: Bien, tranquilas. Ahora que una se casa y que otra busca ser madre, ya no podemos descocarnos como antes.
Facundo: ¿Te estas cuidando? (Dijo de la nada)
Lali: Si, ya hablé con el ginecólogo ayer, antes de venirme a casa. Las comencé a tomar anoche.
Facundo: Por unos meses no quiero que vuelvas a pasar por lo mismo de hace unos días.
Lali: Lo sé, yo tampoco quiero. (Me di vuelta para mirarlo) Le pregunte si me puede hacer unos estudios, quiero ver si tengo algún problema.
Facundo: Yo también me los quiero hacer, estamos juntos en esta.
Lali: (Le sonreí) Sos perfecto, la puta madre. (Lo abrace)

Desayunamos con muchos besos y caricias, amo que me levante así, que podamos compartir un momento a solas, alejar los problemas que hay del medio y recordar que nos amamos.

Como todo sábado a la noche, salimos a comer solos, a pesar de que hablamos mucho de todo, siempre con él hay un tema para conversar, no me puedo aburrir nunca a su lado, es una caja de pandora.

Lali: Las mujeres que están allá te siguen mirando como lo hacen, y me van a conocer.
Facundo: Pasa que soy irresistible.
Lali: (Con la mirada le dije todo) Jodes y el que va a terminar con un palo en la cabeza, vas a hacer vos.
Facundo: (Ríe) No hacen nada con mirar, amor, yo tengo ojos para vos.
Lali: Pero ellas son rubias y altas.
Facundo: Yo amo a las petizas morochas.
Lali: Con la única mujer que te comparto en esta vida, es con tu mamá.
Facundo: Hablando de ella, me dijo que mañana, como todos los domingos, nos espera para comer.
Lali: Decile que estoy antojada de ñoquis, hace rato no cocino eso.
Facundo: Las vacaciones te volvieron adicta del sexo y poca cocina.
Lali: Tenias la factura atrasada, tenías que pagar.
Facundo: Cada día con vos es diferente. (Comiendo) ¿Cuándo vamos a ir a visitar a tu mamá?
Lali: ¿Te va si nos vamos el finde largo que viene?
Facundo: Sabes que, con verte feliz, todo me va.

CONTINUARA…