Me levanté de un salto al escuchar el grito de Vani en la otra habitación, me llamaba incansablemente y entonces fue cuando lo ví.
Ella arrecostada pegada a la ventana mirando para afuera y noto que hay nieve en el suelo de afuera ¿A caso nevó en horas de la madrugada?
-¿Kat?- me dijo viendo a todas partes -¿Donde esta mamá? Para enseñarle esto, a ella siempre le gustó mucho ¿verdad Kat?
No aguante más y empezé a llorar enfrente de ella mi mundo se desplomaba bajo mis pies y aquellos muros que habían caído se volvía a levantar y se hacían cada vez más grandes.
-Vani, mamá no regresará - le dije aún con la respiración a mil por segundo.
-¡¿QUE!?- me preguntó y sus ojos ya estaban rojos al igual que la punta de la nariz -¡¿Kat no te atrevas a mentirme?!
-NO Vani no lo hago, muñeca tranquilizate por favor
-¡¿Por qué Kat?! ¿Porque nos hizo eso?- me decía mientras se secaba las lágrimas que se resbalaban sin cesar
-No lo sé muñeca
Y así ella salió del cuarto como si hubiera visto al mismísimo diablo. Trate de regresar mi respiración a la normalidad cosa que costó demasiado.
Paso un buen tiempo en el baño, y ya se estaba aproximando al medio día y decidí hacer el almuerzo,fue algo ligero.
Sumidas en un profundo silencio estábamos Vani y yo en el comedor que había creado papá, y entonces Vani rompe el silencio con la pregunta qué menos esperaba -¿cómo es que mamá...?, quiero decir ¿cómo es que ella no volverá? quiero que me cuentes la verdad - preguntó y yo solo pude mirarla fijamente pensando bien en las palabras.
-Pues verás Vani, mamá tuvo unos problemitas y enfermo y... se nos fue Vani- contesto con la voz quebrada
-Oohh ¿en serio? todo debió ser por mi culpa y la verdad la última vez no te fui tan sincera- se encoge de hombros- escuché un poco de la última conversación de papá y mamá, hablaban sobre unos papeles de no sé qué y mamá lloraba mucho y le decía a papá que por favor no la dejará, hasta que yo cumpliera los 15 o a los 18, ya considerándome una chica mayor luego de todo eso fui a meter más la pata- sonríe de forma irónica- le dije que quería una clase de ballet y que costaba un poco cara y ahí ella se quebró y le dije que si no podía pagarla que no se preocupará- soltó con los lagrimales rojos
-Oohh nena nada de esto es tu culpa ¿entiendes?- le decía con voz firme una y otra vez lo mismo
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Casada con mi mejor amigo
FantasyKaterine, una chica con 22 años, que quedó sola y con su hermana, tras la muerte de su madre. Nuevamente se reencontrará con su mejor amigo, y se volverá a enamorar nuevamente de él. Cristian, un chico con 23 años, se vuelve frío tras la muerte de...