Casada con mi mejor amigo

Capitulo 11

CRIS

Ver a Kat desmayarse en los brazos de ese imbécil aumentó mi enojo e ira.

Dando grandes zancadas me dirigí hacia donde estaban ellos y al que tenía a Kat en las manos, le pegué un golpe seco en la mandíbula pude escuchar un crujido al golpear a este tipo mientras que al otro cobarde sólo salió de allí como si estuviera frente al mismísimo diablo.

Luego deje a Kat en el sillón que estaba ahí cerca. Después de esto lleve mis pasos a un hombre de estatura media a lo que parece ser su padre ya que tiene rasgos iguales a ella.

Por un momento me le quedó viendo y en él sólo parece que hay odio, los ojos de este se pasean de Kat a mi luego suben a la planta alta.

No le di mucha importancia y decidí tomar a Kat y llevarla al hospital más cercano, hasta que note que Vani no estaba ahí, y lo comprobé cuando él ya estaba subiendo a la segunda planta. Me aclare la garganta para pronunciar las palabras siguientes

-Señor Jonhson, preferiría que mejor se marchará

-Ooohhh claro me iré, olvide que está ya no es mi casa- escupió las palabras con rencor y odio

-Perfecto entonces hasta pronto

Y se fue cerrando de un portazo la puerta. Me fui a traer a Vani la monte rápido en el auto y luego lleve a Kat.

Hice una parada en la pulpería de la esquina ya que parecía que la mujer que se encontraba conocía a Kat y a Vani, dejé a esta última allí jugando.

Acelere lo más rápido que pude sabiendo que no tenía mucho tiempo con Kat ya que está se estaba poniendo pálida y sus labios morados.

Mi pecho se sacudía ferozmente mientras montaban a Kat en una camilla y desaparecía por las puertas de emergencias.

Desesperado caminaba dando vueltas por la sala, ¿cuál fue mi última vez en un hospital?. Hasta que escuche mi nombre.

-¿Cristian Hamilton?

Corrí hacia donde estaba aquel doctor que me había llamado.

-Si soy yo, Doctor ¿cómo se encuentra ella?- pregunté con la respiración a mil por hora-¿Está ella bien?

-Por suerte ella está bien, llegaste justo a tiempo Cristian un poco más y lamentablemente ella no hubiera podido sobrevivir. Si quieres pasas para que veas por ti mismo como está ella- le di un asentimiento y me llevó a donde estaba ella, luego este salió dándome un poco de privacidad.

Al verla ahí en una camilla me rompió el corazón, ella estaba con sus ojos cerrados las manos a los costados. Se veía tan linda apesar de que estuviera en esa camilla y no se viera de la mejor manera.

-Kat, siempre me gustaste- pensé para luego depositar un beso en su frente