Ese día, Manuel se fue enojado de la casa de Valentín. Sabía que el chico no tenía la culpa de su enojo, porque sólo le dijo la verdad, pero eso fue lo que le molestó, que en tan poco tiempo de conocerse ya lo haya leído de esa manera. El enojo se fue transformando en tristeza a medida que iba llegando a su casa. Apenas entró, estaba su madre en la cocina. Trató de pasar lo más desapercibido posible y fue directo a su habitación.
Sabía que inevitablemente ese día iba a llegar, y por eso trató de aplazaro lo más posible. No se creía digno de amar tan intensamente como amaba Mateo. No pensaba que pudiera dar ese siguiente paso, comprometerse hasta ese punto. Las relaciones amorosas no eran lo suyo.
Acostado en su cama, con las luces apagadas e iluminado sólo con el reflejo de la luna en su ventana, se permitió llorar. Hace mucho no lo hacía, posiblemente habían pasado años. No es que no quisiera, a veces el llanto se quedaba estancado en su garganta en forma de nudo y no salía de ahí, atormentándolo por horas.
Se sentía la peor persona que habitaba la tierra. Después de aquél hecho no había vuelto a hablarle a Mateo, y sabía que probablemente él también se estaba sintiendo como una mierda, llorando en su cuarto con las luces apagadas. Lo conocía lo suficiente como para apostar por ello.
Volvió a llorar pensando en eso. Prácticamente lo había usado, y fue egoísta. Y todas las veces que se habían besado también lo fue, porque jugó con los sentimientos de Mateo descaradamente. Sabía que el menor estaba enamorado de él, y aún así le seguía los juegos y hasta lo provocaba.
De igual manera, y por mucho que le costara admitirlo, se había enamorado de su amigo y ya no había vuelta atrás. Aceptó besarse con él por primera vez porque no quiso dejarlo con las ganas, pero para la segunda oportunidad ya la historia era completamente distinta. No había parado de pensar en los labios de Mateo sobre los suyos, y deseaba probarlos por lo menos una vez más. Claro, no iba a ser él quién se lo pida, porque no quería verse débil ni necesitado, aunque esa noche en la fiesta, sus palabras no fueron lo que uno consideraría como "coherentes".
Y entonces todo de fue yendo a la mierda progresivamente, sus impulsos se volvieron cada vez más difíciles de controlar, las ganas de romperle la boca de un beso cada vez que lo veía eran insoportables, y encima el menor lo miraba con esa carita de nene inocente que lo ponía a mil.
Su celular yacía bloqueado en su escritorio, pero desde su cama lo oía vibrar. Sabía que era Valentín. No iba a contestarle, pero lo pensó dos veces y se dijo a sí mismo que ignorarlo no era la mejor opción.
[valen oliva]
perdon manu, me fui al carajo
posta que fue con la mejor, no pense q te ibas a enojar :(
ahora me siento para el ortono valen, lo q pasa es q como me tiraste la posta se me revolvió todo
no te pongas triste
no estoy enojado con vos
gracias por bancarme </3[valen oliva]
enserio?? me volvio el alma al cuerpo
si necesitas hablar
ya sabes
siempre hace bien <3Releyó el mensaje, y sus ojos se aguaron nuevamente. Las ganas de llorar volvieron, pero las contuvo como pudo. Tenía que hablar con Mateo, no podía seguir haciéndose el boludo como hasta ahora. No sólo se estaba hiriendo a sí mismo, si no que por su culpa su amigo también la estaba pasando como el orto. La peor parte para Manuel, era que bajo los ojos juzgadores de los demás, este era un problema relativamente fácil de solucionar.
Vos gustás de mí, yo gusto de vos... listo, ¿qué tanto?
Pero no. Manuel estaba lleno de inseguridades, y no son tan fáciles de superar como parecen. Miedo al rechazo, a no ser suficiente, miedo a entregar todo de uno mismo, y que luego lo dejen tirado como si no valiera nada. Sabía que el menor no era así, que no tenía ninguna intención de hacerle daño, pero sus relaciones pasadas no habían sido buenas, y le era inevitable relacionar a Mateo con esas personas que lo dañaron tanto. Sin embargo, a veces uno tiene que dejar el pasado atrás, y tirarse a la pileta.
Así que juntó fuerzas, marcó el número de Mateo en su celular, y esperó a que el otro atienda su llamado.
---------bueno!!1!! q anda pasando?? por si todavía no se dieron cuenta, la historia está por concluir...... díganme que piensan sobre eso 🤧 espero q les haga gustado el capítulo, ni idea lo que escribí y tengo miedo que no se entienda nada porque mi mente es medio un bolonqui en estos momentos.
AVISO IMPORTANTE !!!!
arranqué una nueva novela Trueplik, ya subí el primer capítulo, si les pinta pueden ir a leerla❤
y les recuerdo que subí un one-shot Wosani con temática de cuarentena coronaviruense¿?
todo se encuentra en mi perfil,
después me cuentan qué opinan 😌💗💗nada eso, muchas gracias por leer, votar y comentar como siempre,
lxs amo 💗💗
ESTÁS LEYENDO
llorapija; trueplik
Short StoryPatético, sí. Mateo lo sabía, pero aún así no podía evitarlo. Era un llorapija. Un llorapija de la pija de Manuel, y la lloraba cada vez que podía, sabiendo que el mayor no iba a darle cabida nunca.