V

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Ester se enrolló más en su cobija sin dejar de ver su celular, se carcomía la mente de sólo pensar en ______ junto a otra chica. Si Adrián buscaba dañarla con esas imágenes, lo había logrado.

Se sentía en completa soledad, su novia ya no estaba ahí, se había alejado al saber la verdad.

Maldecía el día en el que decidió entrar en el juego del ojiazul.

Al abrir la galería sonrió al toparse con ciertas imágenes, era su álbum especial:

_&E

La española sonrió al ver fotos de _______, recordaba cada uno de ellos e incluso tenía su propia etiqueta:

Primera cita

Primer beso

Salida en familia

Pedida de novia

Primer mes

Entre muchos otros, eran ocasiones especiales.

Reconocía cada uno de sus errores, cuando sus escenas de celos llegaban a ser exagerados o las veces que la hizo renunciar a ciertas cosas porque no quería que ______ le dejara de prestar atención.

Fue egoísta con ella misma y con su novia.

Ahora pagaba un precio muy algo, de eso lo había dudas.

Llegaré tarde no me esperes" leyó en el mensaje.

Esa frase se le había hecho tan familiar, después de todo ella la ocupó varias veces cuando se fugaba con Adrián.

Sin saber que responder dejó su teléfono a un lado, quería a su novia de vuelta.



—_______, me ha encanto mucho esta tarde. Tu familia es increíble —comentó Emilia sin dejar de sonreír, tampoco podía soltar la mano de la latina.

—Siempre te adoraron, no lo olvides —ambas rieron por el comentario —Me sorprendió que llegaras de último momento —se colocaron frente a la entrada de la casa.

—Tenía años que no te veía, y quise venir como los viejos tiempos —acarició su mano, la británica sabía de la crisis que tenía su relación con la rubia y no dudo en aprovechar.

—Me alegra que lo hayas hecho, no es lo mismo sin ti —dejó un delicado beso en su mejilla —Nos vemos mañana, iremos a almorzar con mis padres, de nuevo —avisó sin dejar de sonreír —Por cierto, me encanta el pelirrojo.

—Sabes que es sólo una peluca, no es para tanto —rodó los ojos con burla.

—Pero aún así, me encanta. Cada color te queda divino. ¡Recuerda en blanco! —gritó antes de subir a su auto.

La ojiazul movió su cabeza sin dejar de reír, había olvidado que hacía cambios según los gustos de su mejor amiga.

Porque estaba enamorada de ella.















—¡Ester! —gritó una vez que estaba en el departamento.

—¡En el cuarto! —escuchó como respuesta, en mano tenía una pequeña charola con una rebanada de pastel de frutos rojos.

—¿Qué hacías? —preguntó tomando asiento en la esquina de la cama y le dio su postre.

—Estaba viendo una película pero me aburrió y ¿Tú?, ¿Qué hiciste hoy? —preguntó desanimada, en su mente no dejaban de pasar esas fotos.

—Fui a ver a mis padres, no recordaba que hoy había una reunión —se encogió de hombros —Y fui por Emilia al aeropuerto, llegó de visita —le dio una mordida a su rebanada.

—¿Emilia? —preguntó con el ceño fruncido.

—Mi mejor amiga, la que se tuvo que ir a Londres porque su padre había enfermado —le recordó sin emoción, cada día su plática era así: Distante, directa. No habían palabras románticas, no había amor.

—La recuerdo, era simpática —comentó sin verla a los ojos.

—Lo sigue siendo —aseguró con una sonrisa, seguía siendo la misma chica guapa y simpática.

—Me alegra —ambas guardaron silencio, no había otra cosa de la cual hablar.

Ester se culpaba...



















—Adrián, ¿Qué haces aquí? —preguntó la ojiverde preocupaba de que ______ fuera aparecer en cualquier instante, no quería que armara una pelea.

—Vine a verte, fue un idiota al molestarte por mensaje ese día. No tenía idea de que _____ no te había comentado, como les dijo a todos que estabas ocupada... —lo interrumpió.

—¿Ella dijo eso? —preguntó decepcionada, una parte de ella lo entendía.

No era una buena combinación llevarla a ella y que el ojiazul estuviera presente.

—Sí, o bueno eso les dijo a sus padres. Quise traerte esto —le dio una pequeña caja —Espero que te guste, yo...

—¿Ester? —escuchó la voz de su novia acercarse.

—Tienes que irte —susurró empujandolo afuera del departamento.

—Pero, ¿Por qué? —preguntó confundido, si son familia no sería sospechoso que estuviera ahí. Iluso.

—Le confesé a ______ lo que pasó, así que... Largo —cerró la puerta y ocultó el regalo debajo del abrigo que estaba en la mesa.

—¿Quién era? —preguntó con un poco de sueño, con una mano seguía tallando su ojo.

—La vecina, es que se había pedido su gato y quería saber si... Estaba aquí o si lo habíamos visto —respondió con naturalidad, la chica se encogió de hombros y se dirigió a la cocina.

Ester soltó un suspiro una vez que se había alejado, necesitaba quitarse a Adrián.

Sin importan qué sucediera.
















—¡_______! —gritó Emilia, la antes mencionada giró hacia su dirección y sonrió al ver a su mejor amiga acercarse.

—Creí que estarías ocupada —se acercó a dejarle un beso en su mejilla, la británica no tardó en hacer lo mismo.

—Lo estaba, pero te vi pasar por el parque y quise venir a verte —confesó sonrojada, se sorprendía por no ver a Ester detrás de ella.

—Iba a recoger un regalo, ¿Me acompañas? —la ahora castaña asintió sin poder dejar de sonreír, se sentía feliz y plena estando al lado de la latina.

—¿Para alguien especial? —preguntó tratando de entablar una conversación.

—Es unos días es el Aniversario de mis padres y mandé a hacerles algo especial —se encogió de hombros —No quise darles algo básico —bromeó.

—Te entiendo en eso —su celular había comenzó a sonar, ______ le abrió la puerta para darle el pase e interrumpió su gesto —Ahorita te alcanzo, tengo que responder —la chica asintió y fue por los regalos.

Emilia evitó la llamada al ver a Ester y Adrián platicando y riendo como si nada, en ese instante volteó a ver a _______, quien miraba a su dirección con una sonrisa.

La británica decidió ir a distraer a su mejor amiga y evitar hacerle pasar un mal rato, sonrió am ver los obsequios mostrados en la barra.

—Me encanta —respondió con emoción y preocupación. _______ continuó comentando acerca de los últimos detalles, mientras Emilia seguía pensando en lo que había visto afuera.






𝑪𝒐𝒏𝒕𝒓𝒐𝒍 | ᴇsᴛᴇʀ ᴇxᴘᴏsɪᴛᴏ/ᴛᴜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora